Capítulo 23 (Corregido)

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Dedicatoria a los lectores que comentaron en el capítulo anterior:

ShirleyAndreaArias  (Primer comentario)

DayScreminCroskey  (Segundo comentario)

xgoth4everx  (Tercer comentario)

★★★★★★★★★★★★★★★

Pov Marcus:

Ahora mismo tengo unas ganas de pegarle una paliza a ese desgraciado, ¿cómo coño se atreve a llamar a Valery después de haberle jodido la vida como lo hizo? Y lo peor es que el tío parecía ser el típico fanfarrón al que no le gusta perder, porque en el preciso instante en el que le dije que era el novio de Marcus empezó a lanzar mil insultos.

Pero yo dejé de oírlos en cuanto le colgué de golpe. Tras devolverle el móvil a Valery, la estreché en mis brazos, ella trató de ocultarme su miedo pero fue inútil, ya la empezaba a conocer lo suficiente como para saber cuándo le preocupa algo.

—Nadie volverá a hacerte daño, Valery. ¿Lo has entendido? Nadie. Yo siempre estaré a tu lado —Le prometí mientras le acariciaba el pelo para tranquilizarla.

Valery asintió en silencio y luego se metió en el coche, yo le prometí que iría detrás de ella en la moto y así lo hice. Cuando llegamos al barrio, se quedó observando su casa durante un buen rato.

No hacía falta ser un adivino para saber en lo que estaba pensando y por eso le tomé de la mano y le di un ligero apretón, sonriéndole.

—Creo que deberías contárselo, ellos tienen que saberlo. Eres su hija, Valery —Le aconsejé mientras ella me contemplaba asustada.

—No sé cómo hacerlo, Marcus —Dijo ella con tono nervioso.

—Yo siempre estaré a tu lado, ¿recuerdas? —Le repetí con una sonrisa, para luego hacerle un besamanos.

Valery me sonrió de nuevo y finalmente entramos en su casa.

—Mamá, ya he llegado. Vengo con Marcus —Gritó Valery tras cruzar la puerta.

— ¡Estoy en la cocina, cielo! —Le respondió la señora Prescott.

Los dos nos dirigimos hacia allí, Valery me sostenía la mano con fuerza y contemplaba preocupada a su madre.

—Hola cariño, ¿qué tal os ha ido el día? —Preguntó Amy con una tierna sonrisa.

—Bien, bien... —Dijo Valery desviando la mirada.

Por suerte su madre no se dio cuenta de ello y continuó cocinando mientras tarareaba.

—Por cierto, la merienda está en la despensa, cariño. Y también he hecho zumo de naranja —Dijo ella señalando la nevera y el armario junto a ella.

—Muchas gracias, señora Prescott pero Valery quiere contarle algo muy importante —Dije yo dándole un pequeño apretón para darle confianza.

—Por supuesto, Valery cariño, ¿qué ocurre? —Le preguntó su madre bajando el fuego para centrarse por completo en Valery.

Valery tomó aire y acto seguido comenzó a contarle todo:

—Mamá... Eric me ha llamado. Ha salido de la cárcel —Dijo ella con las manos temblando y mirando temerosa a su madre.

— ¿Qué has dicho? ¿Cuándo ha salido ese cabrón de la cárcel? ¡¿Y por qué coño nadie nos ha avisado de ello?! ¡Deberían haberte avisado de que había salido de la cárcel, jode ese cabrón abusó de ti! —Gritó furiosa la señora Prescott, al mismo tiempo caminaba por la cocina como una leona enjaulada.

Diario de una gótica (Corrigiendo)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora