Hacía más de veinte minutos que Adam conducía por la autopista, estaba segura que íbamos a más de cien pero hace mucho que había dejado de preocuparme. Me sentía cómoda con mis brazos alrededor de sus abdominales, mientras el olor a cuero de su chaqueta llenaba mis pulmones y el viento frío de la carretera atravesaba mi fino suéter, era en realidad uno de los momentos más curiosos de mi vida, pues aun cuando sabía que era perseguida por asesinos y que el joven que conducía entre mis brazos superaba el límite de velocidad e iba armado me sentía segura.
-¿Adam?-Dije sorprendida de mi tono risueño.
-¿Si?-Preguntó y su voz sonó encantada.
-¿Qué eres?-Solté la pregunta sin pensarla y para mi sorpresa el me respondió con la misma rapidez.
-Un guardián-Su tono relajado me invitó a preguntar más.
-¿Así como un ángel?-Le pregunté agradecida de que el casco ocultara mi rostro.
-Dios, no-Respondió-Más bien como un mutante-En ese momento tomo un desvío sin señalizaciones y luego de una curva pronunciada se detuvo y bajó de la moto. Se sacó el casco y el brillo en sus ojos me sorprendió, entonces recorrió mi suéter negro con ellos y me entregó su chaqueta-Úsala-Me la puse feliz de poderme ocultar en el casco y entonces el me lo quitó-Pregunta.
-¿Por qué nos detuvimos?-Decidí quedarme sentada en la moto por si el decidía abandonarme en aquel lugar a mi suerte por preguntar de más.
-Porque quiero aclarar tus dudas antes de continuar-Su respuesta me recordó al Adam de Gioconda con todas sus emociones al margen y traté de no exteriorizar mi enojo.
-Explica lo de "mutante"- Le dije y el asintió y me dio la espalda-Explícame todo.
-Soy un mutante Charlie. Luzco físicamente como un humano pero soy muy diferente a uno, somos producto de experimentos realizados durante la guerra para crear soldados diez veces más ágiles, rápidos y fuertes que un humano, tenemos una memoria superior y nuestros cuerpos son más resistentes, es por ello que para nosotros es más difícil envejecer-Adam hizo una pausa como esperando que me desmayara y como no hice más que esperar en silencio, continuó-Somos pocos, nuestros abuelos escaparon en aviones que fueron registrados como desapariciones en el océano; nuestra mayor población está en un país llamado Teimerland rodeado de todas las protecciones que sus habitantes pudieron desarrollar para guardar nuestro anonimato y no ser descubiertos por humanos. Nuestros ingenieros son capaces de crear armas más peligrosas que una bomba atómica y el solo imaginar a un humano con ese poder justifica nuestro anonimato.
-¿Y por qué estás aquí y no en Teimerland?-Le pregunté ajustando el cierre de su chaqueta para evitar el frío que ahora me molestaba.
-Vivo en la academia del norte, allí es a dónde vamos.
-¿Qué es una academia?-Pregunté con curiosidad.
-Son lugares enormes controlados por un miembro del consejo en donde entrenan y estudian los guardianes jóvenes.
-¿Consejo?
-Es como un parlamento en donde el director de cada academia y el líder de cada ciudad se reúne a discutir temas importantes.
-¿Cuántas academias hay?
-Hace cien años había una por cada continente, ahora no lo sé.
-¿Qué son los líderes de ciudades?
-Son como gobernadores, de pequeñas comunidades de guardianes en diferentes continentes.
-Así que eres diez veces más fuerte que un humano común-Dije feliz de que aún me diera la espalda-Y una chica humana te pateó las pelotas-Adam se volvió hacia mi sorprendido y me devolvió la sonrisa por un segundo. Se acercó a mí entonces cerró los ojos y negó con la cabeza.
-Ya te lo dije-Su voz sonó contenida por encima del casco-Eres la chica más extraña que he conocido.
Continuamos a más de cien por la solitaria carretera sin señalizaciones y en menos de diez minutos nos detuvimos frente a un enorme portón de hierro forjado negro con dos cámaras de seguridad enfocadas hacia nosotros.
-¡Soy Adam!- Le gritó al portón como si esperara que éste respondiera y me aferré más a su cintura cuando la voz masculina llenó la noche.
-¿Contraseña?-La voz me sonó conocida y burlona.
-No seas idiota Nick-Dijo Adam y entonces entendí porque- Estoy con Charlie y nos sigue un cazador-De inmediato me di la vuelta sobresaltada como esperando que un arma me apuntara desde uno de los arbustos, y la mano de Adam apretó las mías sobre su abdomen. El portón se abrió y Adam aceleró colina arriba por un camino de adoquines hasta detenerse frente a un gran templo griego con altas columnas blancas y grandes escalinatas en la entrada-Bienvenida a la academia-Dijo bajando de la moto y ayudándome a bajar.
ESTÁS LEYENDO
Traidor
Teen FictionUn asesino, un presidente corrupto, una locutora famosa y un joven de otro mundo se cruzan en una peligrosa historia que te retará a creer. ¿Estas preparado?