Capítulo 2: Búsqueda y desesperación

10.2K 895 192
                                    

En algún lugar...

Unos ojos carmesí se abren de golpe, se encuentra recostado, y por algún motivo la imagen del rostro de su ex-compañera Sakura le viene a la mente, su sharingan se activó inconscientemente, ¿por qué en ese preciso momento? En un intento de eliminar cualquier pensamiento que lo llevase a su antiguo yo, se levanta y comienza a caminar a la salida de su habitación.

—Tal vez un poco de aire fresco me despeje le mente.

Antes de salir, en una de las grandes alas del escondite, se encontró al tipo serpiente junto a su perro fiel de cuatro ojos.

—¿A dónde vas Sasuke? —, dijo el tan venenoso travesti.

El Uchiha volteo a verlo de reojo y antes de salir responde con arrogancia —no te incumbe.

El sabio de las serpientes solo lo mira irse y el peliplateado solo se limita a acomodar sus anteojos para sonreír.

[...]

Una búsqueda desesperada se llevaba a cabo a los alrededores de la batalla de hace algunas horas, un rubio y compañía, incluyendo al kazekage, buscaban por todos lados a su amiga de pelo rosa.

—¿Cómo mierdas pudo pasar esto? ¡Tsk! ¡Maldición! ¡Sakura! — apresuró el paso entre las copas de los árboles.

—Esto es mi culpa Naruto, si no fuera por... — fue interrumpido.

—¡Calla! Tú deberías estar descansando ahora, deja esto en mis manos ¡De verás! — intentó parecer confiado, aún que por dentro se estuviera ahogando de desesperación.

—Tengo a varios ninjas de la arena en su búsqueda, así mismo, ya envié aviso a Konoha y a otras aldeas por si hay avistamientos de Sasori, después de todo es conocido en todos lados por estar en el libro BINGO.

Mientras avanzaban entre las ramas, el ojiazul miró a su compañero con el rabo del ojo intentando agradecer, pero las palabras no salieron de sus labios, un recuerdo inundó su mente.

Flashback ~

Una anciana herida era rescatada por el equipo Gai, al parecer estaba bien, el antídoto que Sakura le había puesto en el último momento le había salvado la vida.

Después de la batalla de Naruto y Kakashi contra el rubio de Akatsuki y sus explosiones, lograron recuperar el cuerpo ya sin vida de su amigo de la arena y regresar hacia donde los demás aguardaban. Pero hacía falta alguien, los ojos azules no lograban encontrar a su amiga peli-rosa, la angustia se hizo presente, los que conocían la situación solo bajaron la mirada ante las preguntas desesperadas del Uzumaki.

La abuela Chiyo habló, contó lo sucedido, de como Sakura había salvado su vida y perecido en batalla.

—Yo, casi inconsciente, logré ver como mi nieto Sasori, cogía entre sus brazos a Sakura y se alejaba con ella, no pude hacer nada para impedirlo.

Poco después llegaron Gai, Lee, Neji y Tenten en su ayuda, cuando la anciana terminó de contar, los ojos azules se habían tornado rojo bestial, el zorro de nueve colas comenzaba a hacerse presente, pero Kakashi logró controlarlo antes de que la situación se saliera de control.

La abuela Chiyo continuó -—traigan a Gaara ante esta inútil anciana, debo pagar por mis errores del pasado, y esta es una buena forma de hacerlo, mi vida a cambio, la que tengo gracias a Sakura. Tienen que encontrarla antes de que le suceda algo malo.

Todos los presentes miraron y escucharon con atención en muestra de respeto, incluso el rubio, quien apoyó a la abuela brindándole chakra para salvar a su amigo.

Después de tal hazaña, sin lugar a dudas, la anciana Chiyo murió, con una sonrisa de satisfacción, pues su misión había cumplido.

Gaara despertó lleno de confusión, para cuando esto pasó se encontraba rodeado de personas, incluso los de su aldea que se habían preocupado por él, y lo más importante, ahí estaba Naruto, a quien no había visto desde hace mucho, su amigo le tendió la mano dándole la bienvenida de nuevo a la vida...

Fin del flashback ~

Había varios escuadrones de búsqueda y rescate, buscando el paradero de Sasori y Sakura.

—Definitivamente voy a encontrar a Sakura, y hacer trizas a ese maldito — sus puños se apretaron y su mandíbula se tensó.

El kazekage lo miró sin decir nada, ambos se perdieron entre el espeso bosque, a las afueras de la aldea de la arena.

[...]

Los ojos verdes lloraban sin consuelo, sus lágrimas empapaban sus mejillas rosadas, sumergida en sus pensamientos, asumiendo que moriría sin volver a ver a Sasuke o a Naruto. Escuchó nuevamente abrir la puerta, ella de inmediato escondió su rostro para que su captor no la viese llorar, ya era suficiente humillación estar como rehén.

El muñeco se acercó y puso una charola con comida —hace mucho que no hacía esto, desde que dejé de ser humano, espero que te guste — la chica no volteó a verlo, él sonrió y se alejó —tal vez estés confundida —, él bajó la mirada —pero quiero que sepas que en tí encontré algo que he estado buscando, ojalá aún fuera humano, por primera vez me arrepiento de ser una marioneta...

La chica levanta el rostro para encontrarse con la espalda de éste mientras se aleja y cierra la puerta tras él, dejando a la chica aún más confundida –¿Qué intenta decirme? ¿Qué es lo que quiere de mí? ¿Por qué no va al grano? – esas preguntas se debatían en su mente.

Pensaba una y otra vez, tratando de averiguar el objetivo de su enemigo.

Tomó la charola y sin darse cuenta terminó todo, no sabía bien, pero moría de hambre, miró el plato vacío y apretó sus labios, si estaba envenenado no importaba, su última opción antes de ser doblegada, sería el suicidio.

—Ya no voy a llorar más, tengo que buscar la manera de escapar, y hacerlo por mi propia cuenta... O morir en el intento.

Mi dulce muñecaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora