Mi dulce muñeca

Capítulo 15: Un pacto de amor

Los ojos verdes se abrían con dificultad, intentando acoplarse a la claridad del exterior. Un recuerdo fugaz hizo a Sakura levantarse de un movimiento, miró a su alrededor y reconoció su habitación, puso la mano sobre su pecho en un puño tratando de calmar su corazón.

—Así que, solo fue un sueño... — su mandíbula se apretó y sus cejas rosas acunaron su frente. No era raro tener ese tipo de sueños, los había tenido incontables veces.

—¿Qué soñaste?

Los ojos jade se expandieron al escuchar aquella voz tan familiar, giró su mirada hacia la ventana de la habitación a dónde daba el balcón.

Ahí se encontraba precisamente Sasuke Uchiha, recargado al margen de la ventana abierta, inexpresivo y con su ropa aún humeda.

—¿Sa-sasuke? ¿Qué haces parado allí? — pronunció confundida la chica, aún creía estar soñando.

El ojinegro suspiró.

—¿Preferías que me hubiera quedado toda la noche en tu cama?

Sakura enrojeció ante la idea y desvío la mirada avergonzada.

—Pensé en irme, pero preferí esperar a que despertarás — cerró los ojos y suspiró —nunca pensé que despertarías hasta el amanecer.

—Lo-lo sien... to — apretó las sábana en su regazo.

Uchiha solo la observó en silencio.

—Volví a causarte problemas. ¿Qué fue lo que ocurrió exactamente anoche? — sus ojos jade brillaron buscando respuesta en los ónix.

Apartó la mirada y sus mejillas entojecieron, avergonzado no quiso responder.

Pero la expresión de Sasuke fue suficiente para que Sakura aceptara que no fue un sueño, que todo había pasado bajo la lluvia, "el amor de su vida se le había declarado". Entonces los colores le subieron al rostro y de su cabeza salió humo.

Sasuke frunció el ceño —no vuelvas a desmayarte sin dar una respuesta a mi confesión — dijo irritado enfrentándola.

—Tú... ¿Pásate toda la noche ahí parado, junto a mi ventana?

Cruzó los brazos.

» Es que se veía tan linda dormida y hacía tanto que no la veía.

De hecho se había quedado cerca, tomándola de la mano y contémplandola todo el tiempo, cuando sintió que iba a despertar se apartó de inmediato temeroso.

—Debido a qué no haz respondido a mi confesión, no se me hizo apropiado invadir tu espacio personal.

Su cara volvió arder, Sasuke era muy directo, más de lo que recordaba. Miró que sus ropas eran las mismas de la noche anterior y que estaban húmedas, él no había hecho nada "inapropiado" con ella, y no sabía si eso le molestaba.

—¿Entonces? — insistió.

» Pero, ¡Caramba! Llevaba toda una vida esperando por él que la respuesta era obvia.

Pero no podía decirlo, aún no creía que esto le estuviera pasando a ella, tanto que ha quedado muda y su mente divagando en lo que había sucedido la noche anterior.

Al no obtener respuesta, comenzó a preocuparse, ¿Se habrá arrepentido de quererlo? El ojinegro se acercó a ella y extendió su mano.

—Ven conmigo, Sakura.

La pelirrosa se quedó un instante mirando la mano extendida frente a ella, pero como era de esperar cedió ante el encanto del Uchiha sin hacer pregunta alguna, iría al mismo infierno con él, ni siquiera se preocupó de como se veía de desalineada justo ahora, no le importaba absolutamente nada, había soñado tanto un momento así que todo lo demás era insignificante.