¿Destinados?

Capítulo 6 - Alianza

Louise y Caitlyn volvieron rápidamente a casa. Debían mostrarle la selfie a la mama de Louise. Lamentablemente cuando estaban por llegar al hogar de Louise, una bicicleta casi atropella a las dos chicas y en el intento de zafarse, el celular con la foto cayó al suelo y se quebró la pantalla.

-Oh no – dijo Louise al ver la pantalla de su celular hecha trizas.

-¿La pantalla no enciende? – preguntó preocupada Caitlyn.

El ciclista bajó de su bicicleta y se aseguró de que las dos chicas estuvieran bien, luego siguió su camino. Este fue un acto muy gentil de su parte, la mayor parte de la gente en esa ciudad ni siquiera se hubiera detenido.

-No Cait, no enciende – respondió Louise.

-No te preocupes amiga. Ya lo llevaremos al servicio técnico y ahí te lo arreglan – trató de consolarla.

Louise no podía creerlo, justo cuando estaba por averiguar si era Jason el que la salvó el domingo, se le rompe el celular. Caitlyn también estaba fastidiada, pero no lo expresaba para así poder calmar a su amiga.

Louise y Caitlyn llegaron a casa y la señora Wiegand los atendió otra vez con té y torta. Esto alegró un poco más a Louise. La mamá de Louise, Giselle, le dijo a su hija que mañana llevaría su móvil al servicio técnico.

Cuando Caitlyn volvió a su casa, Giselle le hizo una pregunta a Louise.

-Hija, ¿Cómo van las cosas con Matthew?

-Bueno, pues, creo que ya solucionamos el problema del domingo – le respondió Louise.

Pero no era verdad, solo no hablaron más del tema con Matthew, pero ella seguía molesta y no entendía por qué la había dejado plantada.

Esa tarde de martes, Louise avanzó bastante en sus tareas de la semana, para luego leer un poco de la nueva novela de Josephine Lanius: "Ser discutida, es ser percibida". La novela de Lanius trata temas de la psicología como los pensamientos y sentimientos de las adolescentes. Los críticos lo calificaron como una terapia dentro de un libro.

La mañana siguiente, les tocó clases de lenguaje. Como había dicho el profesor, este les dejo avanzar en el trabajo grupal. La clase se trasladó hacia la biblioteca de la escuela y allí se sentaron en grupos. Jason estaba contento de que no estuviera ni Caitlyn ni Matthew.

-Ok, nos tocó el tema de Oscar Wilde – indicó Louise.

-Empecemos escribiendo los conceptos principales – sugirió Ryder.

-Oscar Wilde vivió en el siglo XIX – empezó a decir Louise.

Jason estaba impresionado. Louise aparentaba no ser tan brillante en las clases, pero en realidad sabía más que Ryder, ¡eso era mucho! Sabía desde fechas, títulos de libros y temas a datos de su familia y sus frases célebres.

Louise y Ryder aportaban ideas y Jason las iba escribiendo en un documento de Word.

-"La vida imita al arte mucho más que el arte imita a la vida." Esa es mi frase favorita de Wilde – opinó Louise.

-No la entiendo – replicó Ryder.

-Yo sí. Me gusta – dijo Jason. En realidad tampoco había entendido la frase.

-Al parecer tenemos varias cosas en común.

Ryder miró a Jason y levantó las cejas. No creía que hubiese entendido la frase.

Los tres siguieron trabajando durante la clase de lenguaje. Al acabar esta, Matthew se le acercó rápidamente a Louise.

-Hola Lou – la saludó Matthew dándole un beso en la boca.

Louise lo apartó rápidamente, no quería incomodar a Jason y Ryder.

-¿Cómo va tu trabajo? – le preguntó ella.

-Bien. Adolph encontró harta información en internet. ¿Sabes? Me hiciste mucha falta, tú siempre sabes tanto...

"Qué asco" pensó Jason.

Louise le sonrió a su novio.

-¿Vamos a la cafetería y compramos dos cafés con vainilla? – Invitó Matthew a Louise – yo invito.

-Genial, vamos – respondió ella.

Matthew y Louise se fueron, dejando solos a Jason y Ryder. Estos decidieron volver al salón. Ryder quería sus galletas.

Mientras iban de camino al salón, Caitlyn se les acercó a los dos chicos.

-Jason, ¿puedo hablar un segundo contigo? – preguntó la chica.

-Caitlyn...- Jason se extrañó – claro.

-Vamos al patio a hablar. Lo siento Ryder, pero es privado.

Ryder también se extrañó ¿Caitlyn quería hablar a solas con Jason? De todas formas, él se fue al salón dejando solos a Jason y Caitlyn.

Cuando los dos llegaron al patio, se sentaron en una banca.

-Jason, ¿te gusta Louise sí o no?

-¡Caitlyn! ¿Por qué me preguntas eso?

-¿Sí o no? – volvió a preguntar con su tonito de superioridad.

-Bueno, la verdad... sí.

-Lo sabía – dijo ella, orgullosa.

-¿Tanto se nota? – preguntó él

Caitlyn asintió con la cabeza.

-Jason, hay algo que quiero decirte – Caitlyn tomó un respiro -, Matthew no me agrada, y creo que a ti tampoco. Louise está encantada con él, y no se da cuenta de que no es una persona buena para ella. He estado observándote, y sé que te gusta de verdad y que tienes buenas intenciones.

-¿Qué quieres decir?

-Que quiero separar a Louise de Matthew, y creo que tú me puedes ayudar. ¿Estás conmigo? – propuso Caitlyn.

-Pues, no sé. ¿No estaría mal hacer eso?

-Es por el bien de Louise.

Jason lo medito por unos segundos y luego respondió.

-Sí, está bien.

-Ok, primero, necesito que seas completamente sincero conmigo. ¿Tú fuiste el que la salvó el domingo?

La pregunta tomo por sorpresa a Jason. "¿Cómo se había enterado de eso?"

-Sí, fui yo – respondió él.

-¿Y por qué no le dijiste a Louise?

-No lo sé, creo que me dio vergüenza.

-Louise está bastante afanada buscando a su "príncipe azul" – aclaró Caitlyn – pero ahora voy a intentar de que no se dé cuenta de que fuiste tú.

-¿Por qué? – pregunto Jason.

-Si se da cuenta, se va a poner nerviosa. Eso afectaría nuestros planes.

-¿Planes? – Jason no estaba tan seguro con lo que iban a hacer.

-Sí, para separar a Louise de Matthew necesitamos hacerle ver la verdad. Mi principal sospecha es sobre lo que estaba haciendo Matthew el día domingo, pero de eso me encargaré yo. Lo que necesito que hagas es que acompañes a Louise y no dejes que Matthew este solo con ella. ¿Entiendes?

-Sí, creo que es una tarea fácil.

Caitlyn se levantó de la banca.

-Ahora volvamos al salón. Ah, y por sobre todo, no le digas nada de esto a nadie.

Jason asintió y volvió al salón junto a Caitlyn. Se sentía tanto emocionado como culposo. Quizás esto que iban a hacer iba a dañar a Louise. Pero si Caitlyn lo dice, que es su mejor amiga, debería ser real que Matthew no es una buena influencia, ella nunca trataría de dañar a su amiga.