Make A Wish

Capítulo 36: Venganza & Partido (2/2)

CAPÍTULO 36: Venganza & Partido (2/2)

No tuve tiempo a reaccionar.

Liam realmente me estaba besando, intensamente, para callar todo lo que había estado diciendo. De alguna forma había logrado pegarme contra la pared, manteniéndome inmóvil al usar su cuerpo para frenarme. Sentí que mis rodillas se hacían papilla a la vez que él me besaba. Nunca me habían besado de esa forma, ni mucho menos pensaba que se pudiera sentir tan rara.

Era como si estuviera flotando y, a la vez, estuviera en mi cuerpo, fusionándome con él a medida que profundizaba el beso. Pero entonces él se separó.

- Olvídalo, él no te merece ¿vale? - susurró acariciándome con la mano la cara - Y no te enfades conmigo, me lo debías, a ver si esto me trae buena suerte - rió un poco, al referirse al beso, para luego abandonarme allí. Mi cabeza estaba hecha un verdadero desastre y no sabía que pensar, como si mi mente hubiera quedado hecha pedazos. Él me había besado.

No sé cuanto tiempo estuve allí de pie, esperando quieta con la espalda pegada a la fría pared, tal vez esperando por que volviera o tal vez porque no era capaz de reaccionar. Me pareció una eternidad, pero cuando fui capaz de moverme, instintivamente llevé una mano a mi boca, acariciando mis labios, donde él me había besado.

"Tenía que haberle devuelto el beso" pensé. Puede que él quisiera acostarse conmigo y me arriesgara a que me rompieran el corazón, pero no sería capaz de ser feliz de una vez si no era capaz de arriesgarme.

¿Qué hubiera pasado con Tris si nunca de hubiera vuelto osada? ¿Qué sería de Blue si hubiera ignorado y se hubiera alejado de Gansey? ¿Habría muerto Peeta si Katniss no se hubiera arriesgado con las bayas? ¿Y si Ruby nunca hubiera ido con Zu, Liam y Chubs?

El mundo no tiene sentido sin tomar riegos, a veces, debemos salir de nuestra zona de confort y luchar por las cosas que queremos y necesitamos en nuestras vidas. Pelear. Tomarlo. Volver a la suerte y el destino de nuestro lado.

Pero ahora estaban jugando el partido y yo tenía una segunda fase que poner en marcha, por lo que me obligué a mí misma a salir de mi estado de trance y salir caminando de los vestuarios masculinos y dirigirme a las gradas, para subir las escaleras y esquivar a la multitud, llegando al lugar donde se encontraba nuestro grupo, compuesto por los de siempre: Grace y Chase, Evan y Ally, Peeter y May, Lexi y Zack, y finalmente Juliette e Ian. Me senté entre mis dos mejores amigas durante el resto del primer tiempo, el cual resultó que ya iba por la mitad.

Cuando llegó el descanso, los Tiburones nos iban ganando por un par de puntos y Jackson había sido lesionado a pesar de que el equipo titular estaba al completo. Bueno, ahora faltaba el capitán. Así que el entrenador hizo un corrillo para hablar con el equipo, designando - por los gestos que pude distinguir -, a Liam como capitán suplente. Esto era un gran peso para él, pero estaba realmente convencida de que lo lograría.

Las animadoras salieron a hacer sus bailes y formaciones, saltando por los aires y animando a su afición de que todavía había grandes opciones de ganar el partido y el primer puesto de la liga, al que los Tiburones también optaban. Pude ver satisfactoriamente que Stephanie no estaba. Tomé eso como la señal que teníamos para comenzar.

- ¿Evan?

- Ahora mismo, toma - me dio un pequeño micrófono inalámbrico y comenzó a teclear códigos y modificar controles en su pequeña Tablet, deteniendo repentinamente la música y haciendo que él micrófono conectara con los altavoces. Grace me levantó un dedo para animarme mientras atendía una llamada -. Adelante, se lo merece.

Sonreí y me levanté.

- Queridos amigos, siento muchísimo haber detenido la increíble demostración de piruetas y emocionantes frases motivadoras que nuestras queridas animadoras estaban haciendo. Es verdad que ellas realmente son increíbles, pero yo estoy aquí para hacer un importante llamamiento - comencé a bajar por las gradas lentamente, aferrando mi mochila contra mí. La gente se volteaba para mirarme, sorprendida -. Y es que alguien ha sido muy malo.