Make A Wish

Capítulo 3: Comprando Vestidos

CAPÍTULO 3: Comprando Vestidos

Había pasado aproximadamente una semana desde mi desastroso cumpleaños y desde que había descubierto lo realmente perra que era Stephanie.

No habíamos hablado desde lo ocurrido. Nos encontramos un par de veces, al final de la semana - pues su fiesta no había sido preparada y sus padres les habían pillado en medio de toda la diversión- y ni me había mirado, pues estaba junto a cuatro porristas de nuestro curso.

En lo que me concierne, lo he superado, por lo menos lo del rumor, pues Kurt contó la verdad sobre él - que había comenzado Sthepanie - y un par de chicos de la academia de inglés me habían confesado que se lo había contado, por lo que se habían acercado un par de veces a pedir perdón por haberselo creído. Sí, los rumores estaban más que extendidos.

- ¿Me estás escuchando? - gritó Ally a través del teléfono. Yo salí de mis pensamientos y me froté los ojos con las mangas de la chaqueta, el día anterior me había quedado despierta hasta las cinco de la madrugada acabando un libro nuevo.

- Umm... claro - dije yo saliendo de mi subconsciente. Pude oír como Ally aguantaba la risa y me la imaginé con la ceja levantada.

- ¡Claro que no me has escuchado! - dijo ella emitiendo un chillido agudo - Te estaba diciendo que solo quedan dos semanas para la vuelta a clase, por lo tanto, solo queda una semana para la feria de verano... ¡qué ganas!

Entonces recordé de lo que hablaba.

Desde que teníamos doce años, cada semana antes de la vuelta al colegio Ally nos invitaba a su casa durante tres días, esta estaba un poco alejada del centro en un pequeño pueblo a las afueras, donde siempre se celebraban ferias y fiestas.

- No estoy segura de que este año vaya a ir - le dije a Ally. Supe en ese mismo instante que estaría echando una de sus miradas 'quemestascontandosinolohacesterajo' muy común en ella -. Ya sabes, debido a lo que pasó con Stephanie no creo que sea buena idea. Probablemente vaya.

Se instaló un pequeño silencio. Finalmente Ally comenzó susurrando - De verdad, cuando pienso que te he enseñado algo... - bufó - Dani, no puedes hacer eso, Stephanie siempre fue una imbécil, así lo único que logras es dejar que gane, y siendo Stephanie, ya es hora de que pare y empiece a ceder.

Entendí perfectamente a lo que Ally se refería. Siempre y absolutamente siempre, desde que éramos pequeñas, Stephanie había acaparado la atención de la gente de su alrededor. Por su cara bonita y su aparente aparencia de ángel, aunque realmente le gustara hacer cosas de la que todas nos arrepentimos y las cuales guardamos en secreto.

Incluso un año, durante mi décimo tercer cumpleaños había acaparado toda la atención. Yo había decidido hacer una fiesta antigua, en blanco y negro, pues me había parecido muy original hacer una fiesta temática. Mis padres habían decorado la casa con grandes guirnaldas en blanco y negro así como habían colgado cortinas de estos colores. La comida había sido preparada por la pastelería de mi madre y el ponche llevaba colorante y podías ver como la mitad era blanca y la otra negra.

Mi padre también había instalado unas luces que contrastaban con la temática. Hasta los invitados iban de blanco y negro. Aquella tarde yo me había dicho que sería una de las mejores, que sería increíble y, por una vez, sería la protagonista.

Claro que después apareció Stephanie.

Llevaba un vestido rojo y unas botas plateadas hasta las rodillas, lo recuerdo como si fuera ayer. Entre todo el blanco y negro ella destacaba como nadie. Ella se había disculpado con un basto 'Lo siento, no tenía nada blanco y negro'.