Te veía cocinar y pensaba que no era momento de que estuvieras trabajando. Se me ocurrió que aquella tarde los chicos debíamos cocinar por ti, para que así pudieras descansar.
Después de comer y cuando todos se hubieron marchado te quedaste conmigo. Los dos solos en el sofá y nos mirábamos, nos mirábamos mucho.
Recuerdo que ese día no me salían las palabras. No sé por qué, pero no alcanzaba a decir nada, absolutamente nada. Durante un tiempo permanecimos callados, mirándonos y disfrutando de la compañía del otro. De tu perfume.
¿Conoces esos silencios incómodos que ocurren entre dos personas cuando están solas?
Pues yo los disfruto. Para mí significan cierta complicidad y comprensión. Me gusta disfrutarlos.
Rompimos el hielo hasta cierto punto cuando comenzaste a cosquillearme, sabes que tengo muchas cosquillas, por todo el cuerpo y siempre te aprovechas de ello y, aunque me torturas, en el fondo me gusta.
Recuerdo el accidente que sufriste cuando tratabas de hacerme reír, yo traté de protegerme y resbalaste y golpeaste la ventana con tu ceja. Fue un golpe aparatoso.
Recuerdo tu enfado cariñoso y me veo a mí tratando de mimarte y cuidarte. Te besé en la ceja y te pedí perdón mil veces, aunque los dos sabemos que no fue culpa de nadie, te abracé y te miré de esa forma tan nuestra.
Enseguida sonreíste y nos reímos de lo que había sucedido, Después de eso me burlé un poco y rápidamente cogí la almohada para protegerme de un nuevo ataque. Y no te odio por ello, te amo.
Porque siempre estamos riéndonos juntos, en lo bueno y en lo malo, siento que ahora siempre conseguimos entendernos al final... ¡con una sonrisa y con un Don!
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TODOS LOS RECUERDOS QUE TENGO DE TI (CARTAS REALES)
RomanceHola, mi nombre es Jack D. y soy escritor, pero vengo aquí con el alma desnuda y el rostro cubierto para escribir las memorias de mi primer amor tal y como yo las recuerdo. No pretendo con ello hacer literatura, si no te gusta mi historia puedes i...