Me he quedado sin palabras.
-¿Señor Bass?
Me doy cuenta que la señorita Waldorf me está mirando como si estuviera loco, joder, ahora pensará que soy raro. Intento despabilarme un poco y por fin me digno a responder.
-Lo siento señorita ¿Waldorf? pregunto como si no recordará su apellido.
Veo como toma una respiración profunda, perfecto ahora piensa que soy un arrogante, aunque la verdad es que si, no quiero que se de cuenta que su belleza me impresiono.
-Si, Abie Walrdof, responde secamente.
-Muy bien señorita Abie
-Waldorf, me corrige
-Waldorf, muy bien, me dijeron que viene para el puesto de gerente en el área de exportaciones, ¿es correcto?
-Si Señor Bass, acabo de graduarme de comercio internacional en la Universidad de Columbia.
Impresionante, bonita e inteligente, no es una combinación que se de muy seguido.
-Eso es excelente señorita, pero como ve, aquí no buscamos personas que se hayan graduado de escuelas para niños ricos, queremos personas que sepan hacer su trabajo, ahora dígame ¿por qué debería de contratarla?
Da un respingo en cuanto termino de hablar, la he intimidado e incluso podría decirse que ahora me ve con cierto orgullo.
-Bueno señor Bass, me considero un persona que siempre da un 10 por ciento más, la mayoría de las personas buscan solo cumplir con lo establecido, yo no, siempre trato de rendir un 110 por ciento.
-Muchas personas dicen lo mismo, no es algo que me sorprende señorita.
Sus ojos pueden lanzar dagas, es obvio que no se lo esperaba, ¿creía que solo por ser bonita la contrataría? muy en el fondo se que lo haría, haría lo que fuera por ver esos lindo ojos otra vez. Parece estar meditando lo que le dije, lo cual me da la oportunidad perfecta de mirarla bien.
Es una mujer hermosa, piel blanca, cabello castaño y largo, su piel parece de porcelana, es alta y delgada, atributos en los lugares correctos, piernas larguísimas y bien formadas, ¿cómo se verían alrededor de mi? ¿qué carajos Elliot? se, profesional, soy profesional, me obligo a dirigir mi mirada a su rostro tiene unas mejillas muy bonitas parecieran que se sonrojan todo el tiempo, boca apetitosa, joder, esos ojos, son cafés, muy intensos, siento que pueden ver a través de mi alma. Para ya con eso Elliot, pareces idiota.
-Bueno, se que no es de su incumbencia señor Bass pero considero que puedo dar el ancho en su empresa, trabaje antes para la empresa de mi padre, huí de ahí porque nunca iba a crecer mientras tenga la sombra de mi familia.
-¿Quién es su padre? pregunto
Veo como sus ojos dudan, al final se decide:
-James Waldorf
¡MIERDA! está mujer es la jodida hija de ese hombre, James es un conocido productor de tecnología en el país, una persona muy perfeccionista, lo conocí hace un par de meses en una reunión de negocios. Sabía que tenía una hija, esa niña es famosa, pero ¿ella? si así es está mujer es una niña.
-¿Cuántos años tiene señorita?
-21
¡Santa mierda! estuve hacen tan solo unos minutos fantaseando con sus piernas, es una niña joder.
-Conozco a su padre, no tengo una relación muy estrecha con el, pero es un hombre que admiro debido a todo lo que ha logrado, le digo sinceramente.
-Gracias, es por eso que estoy aquí señor Bass, deme la oportunidad de demostrarle a mi padre que puedo ser alguien sin su ayuda, por favor.
La miro detenidamente, ella baja la cabeza, segundos después la sube y nuestras miradas se encuentran, sus pupilas se dilatan, mantiene su mirada en la mía, por su segundo un escalofrío recorre mi cuerpo ¿qué mierda me pasa? siento que ella puede ver a través de mi, estoy a punto de acercarme un poco más a ella, cuando Abie corta la mirada.
Salgo de mi trance, no se si haré bien en contratarla, es obvio que es alguien muy capaz, se que ayudará mucho si le doy el empleo, pero algo en ella me dice que esto será una mala idea. No se que hacer.
-Debo interpretar su silencio como un no ¿verdad? Bueno fue un placer conocerlo señor Bass, gracias por su tiempo.
Antes de que pueda reaccionar se levanta y se dirige a la salida. Reacciono y me levanto como un rayo, joder se que es una mala idea, pero en este momento no estoy pensando, quiero volver a ver esos ojos.
-Señorita, digo mientras la tomo del brazo.
Abie voltea y puedo sentirlo, tiembla ante mi toque, yo siento como la electricidad mi recorre todo el cuerpo, nunca antes nadie me había pasado esto, está mujer me hace cosas. Su mirada se posa en mi mano tomando su brazo, voltea hacía a mi y yo la suelto, cuando la dejo hace que yo quede parado frente a ella, aún con tacones sigo siendo mucho más alto que ella, el perfume que trae puesto me invade, tomo una respiración profunda, me acerco un poco más a ella, ahora solo estamos a unos centímetros, mierda.
-¿Señor Bass? pregunta Abie mientras me mira a los ojos
Estoy tan cerca de ella, veo su nerviosismo, joder yo estoy igual, no se que me pasa, nunca soy así de tonto con las mujeres, normalmente son ellas las que se arrastran ante mi, pero Abie es diferente; es como un enigma, quiero saber más sobre ella, Abie muerde su labio inferior y yo estoy tomando todo mi auto control para no besarla y morder ese labio por ella, mi teléfono comienza a sonar y rompe el momento. Me separo de ella y ella deja sacar un suspiro.
-El trabajo es suyo, preséntese mañana a las 8.00am, mi secretaría le dará todas las indicaciones. Enhorabuena, le digo tratando de sonar indiferente.
Veo como su mirada se hace grande, una mirada aparece en su rostro.
-Muchas gracias señor Bass, le prometo que no se va a arrepentir.
-Eso espero señorita Waldorf, respondo.
Ella asiente y sale de mi oficina, dejo salir un respiro como si hubiera estado conteniendo la respiración, nunca antes me había sentido así, no se muy que fue lo que paso ahí, fue demasiado extraño, algo nuevo para mi.
Mi teléfono vuelve a sonar y me apresuro a contestarlo.
-Bass, respondo
-¿Y bien?, contesta Brad al otro lado de la línea.
-Es la hija de James Waldorf.
-Mierda hombre, por supuesto no le diste el empleo ¿verdad?
-Se lo di.
-¿Pero que carajos? Sabes que el advirtió que nadie debía darle trabajo a su hija ¿sabes en que problema te meterás cuando se entere?, responde Brad casi gritando.
-Primero que nada una cosa Brad, yo nunca hago lo que me dicen, yo hago que quiero y segundo esa muchacha se merecía ese empleo, es inteligente y buena, digo tratando de sonar indiferente.
-Joder.
-¿Qué? pregunto
-Te gusto ¿verdad? te gusto esa chiquilla.
-¿Qué? mierda, no, ¡es una niña!, respondo horrorizado.
-Eso espero hermano, no necesitamos más problemas, entonces Brad cuelga.
Me recargo en mi silla, Abie no me gusto, si mierda es bonita, tiene un cuerpo hermoso, pero no, no me gusta. Mentiroso.
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Cuando un narco se enamora
Storie d'amore¿Qué pasa cuando un narcotraficante al cual nunca le ha interesado nada se enamora? O mejor aún, ¿Qué pasa cuando la chica de sus sueños lo rechaza? O todavía mejor, ¿Qué pasa cuando todo lo que le importa lo puede perder por su profesión? Ven & ad...