Cuando un narco se enamora

Capítulo 15- Miedo

¡Jodeeeeer, que gusto!

Me despierto con los rayos de luz en mi cara, siento el sol golpear mi rostro a todo lo que da, muevo mi cuerpo para estirarme y las piernas y brazos me duelen, como si hubiera hecho ejercicio, estoy a punto de moverme cuando siento una mano en mi estómago. Rápidamente volteo y veo a Abie acurrucada junto a mi.

¡Mierda!

Ella está aún dormida, de esa manera parece un jodido ángel, está dormida sobre su lado izquierdo, ella posa su mano en mi estómago, sus labios está entreabiertos, es jodidamente perfecto. Comienzo a trazar líneas en su rostro con mi dedo, tan suave y perfecto, su rostro es tan bello, basta una mirada para que sienta el corazón estallar. Y es ahí cuando lo siento.

Miedo, puro, duro, intenso, siento un miedo indescriptible.

Puedo verme enamorándome de esta mujer, puedo verme formando una familia con ella, la puedo ver a ella conmigo toda la vida. La ansiedad se instala en mi pecho, tengo ganas de salir a tomar a aire, el verme de pronto adquiriendo una relación con ella me asusta hasta la muerte, no, yo no busco formalismos, ni obligaciones.

Me levanto de la cama lentamente, no quiero despertar a Abie, lo que estoy haciendo no está bien, estoy dejándola como a un puta después de haberla follado, ella se merece más que un hombre que tiene tanto equipaje con el, solo sería un problema en su vida.

Termino de salir de la cama y me cambio rápidamente, salgo de la casa de Abie y me subo a mi coche, antes de irme volteo a ver hacía la ventana de su casa y casi me arrepiento de lo que hago, en la ventana esta Abie, solo me mira, no dice nada, no hace nada, solo puedo ver su mirada, está triste, la herí, me recuerdo a mi mismo que no me debe importar y arranco mi carro. Es lo mejor para los dos.

Llegó a mi casa y me ducho, salgo rápidamente y me cambio, hoy necesito distraerme, iría la oficina pero ahí esta ella, no se como será la relación a patir de ahora, en cambio me estoy dirigiendo a la bodega, lo que sea con tal de distraerme.

-Ey, no pensé que fueras a venir hoy, me dice Half al momento de llegar.

-La verdad no estaba planeando hacerlo, pero necesito distraerme, le contesto.

Half asiente y me pasa documentos, empiezo a revisarlo y de pronto me sumerjo en ellos, paso revisando las cifras y los estados de cuenta que poseo, la verdad cada día el narcotráfico está mejor, las ganancias están repuntando y no estoy perdiendo ni un solo peso, ventajas de saber del negocio y manejarlo adecuadamente.

Me doy cuenta que se ha hecho tarde, me levanto y en eso un mensaje entra, lo reviso y veo que es de Adrin, necesita que firme unos papeles, dudo en ir, pero considerando que es bastante tarde seguro que Abie no estará en la empresa.

Llego a la empresa y reviso los papeles que Adrin dejo, después de leerlos bien, los firmo, salgo de la oficina cuando veo a Abie salir de su oficina ¡Mierda! ¿Mi suerte podría ser peor? Ella se da cuenta de mi presencia, cuando me ve a los ojos puedo ver la furia en ellos, está molesta conmigo, por primera vez no se que decir o hacer, ella me saca de mi zona.

Ella no espera a que diga nada y comienza a caminar hacía la salida, salgo del trance y ahora veo su atuendo, maldita sea, ella siempre luce hermosa.

-Abie, la llamó.

Ella comienza a caminar más rápido, me está ignorando.

Abie, vuelvo a llamar.

Ella sigue sin voltear y acelera su paso.

-Abie para.

Acelera aún más su paso, ella me va a hacer sentir, joder.

Estamos a punto de llegar a la salida cuando le grito

-¡PARA CON UNA MIERDA ABIE!

Ella se queda quieta al momento de eso, está de espalda a mi, no voltea a verme, llego hasta donde está y me paro frente a ella.

-¿Qué pasa?, le pregunto

Ella levanta la vista y solo me mira. Ladea la cabeza como si estuviera estudiandome.

-No pasa nada Señor Elliot.

¡¿QUE MIERDA?!

-Entiendo que estés molesta por lo de está mañana Abie, pero nunca te prometí nada, follamos y listo, superalo.

Al momento de haber dicho esto último me arrepiento, puedo ver como sus ojos se llenan de lágrimas, por supuesto no las derrama, es tan orgullosa para hacerlo.

-Entiendo Señor Bass, pero recuerde usted no es el único hombre en el mundo.

Y con eso se va, dejando a un Elliot lleno de ira por saber a que se refería con eso, ¿buscará otro hombre? Malditamente que no lo hará ¿o si?

¡MIERDA, MIERDA, MIERDA! ESTOY JODIDO.

¡Hola chicos y chicas! ¿Cómo están? espero que bien.

Perdóoooon por no haber subido capítulo tuve unas semanas de locos en la universidad, pero ya estoy de vuelta, prometo subir más seguido ahora, espero que sigan leyendo y votando.

¡Nos vemos!