Todo podría cambiar.

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Pov. Minseok.

Justo cuando sentía que mi cuerpo caería sobre el frío piso, él me envolvió entre sus brazos y me dio esa calidez que tanto necesitaba, me llevó hacia el sofá poniéndome en un lugar seguro, lloré por un corto tiempo, sentía que mis lágrimas se secaban, sentía el ligero movimiento de mi angelito, él es mi fortaleza, todo lo hago por él, es dañino para mi pequeño esta situación.

-¿Te sientes bien?- Changmin hyung me preguntó mientras me alcanzaba un vaso con agua.

-Hyung, lamento todo esto.- me disculpé con una ligera inclinación de cabeza, sentí mucha vergüenza, vergüenza de ser tan débil quizá.

-¿Me quieres contar por qué Luhan salió hecho una furia de aquí?- mi corazón se encogió, no, no quería que él supiera de mi dolor, nadie debe saber, esto no debe salir de mí, no tengo por qué involucrar a más personas.

Sonreí débilmente.- Él solo estaba enojado porque manager hyung discutió con él.- mentí una vez más, y mostré mi más perfecta falsa sonrisa que podría tener, hyung es una buena persona, además lo admiro mucho no quisiera que él se entera de mi dolor.

-¿Seguro?- ¡No, él trató de matar a mi pequeño! y sí hyung estoy embarazado.

-Por supuesto hyung.- bajé la mirada con una leve sonrisa.

Me sorprendí al sentir sus cálidas manos sobre mi mejilla, alcé poco a poco mi rostro y él me miraba con una suave expresión que me reconfortó, nos quedamos mirando a los ojos, ese momento parecía como si se hubiese detenido, se sentía bien pero, pero yo no dejaba de pensar en él, en el padre de mi bebé, así que desvié la mirada.

- Lo siento.- él dijo y sentí como se removía en su asiento, estaba sonriendo incómodamente mientras se sobaba la nuca.

-Y-yo, hyung tengo que volver, nos vemos.- la situación era muy incómoda así que opté por despedirme con una leve inclinación, salí rápidamente de aquel camerino, me detuve un momento antes de salir, mi corazón latía mucho, por un momento pensé qué, no, Minseok ¿Cómo crees? Changmin hyung nunca se fijaría en ti.

Caminé hacia afuera, y caminé en dirección al auto, manager hyung me vio y le dije que luego devolvería el traje porqué me estaba sintiendo mal, él asintió así que aproveché para pedirle que vaya a buscar mi ropa al camerino, así lo hizo, minutos más tarde lo vi regresar junto a los demás chicos y con Luhan.

Nos dirigimos hacia el apartamento y me inventé cualquier cosa para no dormir con Luhan, estaba muy dolido, no dormiría con él, al menos no por esta noche así que le pedí a Tao que me hiciera un espacio en su cuarto poniendo como excusa de que el baño quedaba más cerca, pude ver como Luhan frunció el ceño pero luego se encogió de hombros, simplemente no le importamos.

Hoy día el sol salió desde muy temprano, hoy tenía cita con el médico para ver el crecimiento de mi angelito y Luhan me acompañaría, lo hacía por puro compromiso no porque tenga curiosidad de ver a mi pequeñito.

Desayunamos, yo me encargaba de servirle el desayuno a Luhan, nos alistamos y salimos rumbo al hospital, pedí cita para el ginecólogo, el doctor Lee era muy amable, y me hacía sentir a gusto, como sospeché hoy no sería la excepción y más aun con lo que pasó anoche, una enfermera me llamó y como siempre Luhan no quiso entrar.

-Buenos días.- la amplia sonrisa del médico me recibió como cada mes lo hacía.

-Buenos días.- devolví a cambio.

-¿Bien como se ha comportado ese pequeñito?- preguntó mientras me indicaba la balanza para pesarme como cada mes.

-Bien, últimamente siento que se mueve más seguido.- dije emocionado me gustaba mucho sentirlo.

Tu amor es mi tortura.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora