Después de que Riker trajera las pizzas, nos sentamos a cenar. Por un lado estaba Riker viéndonos, anhelando un pedazo de pizza. Pero nadie le mandó a terminarse tres pizzas COMPLETAS.
Dieron las 11 de la noche y yo ya moría de sueño, no entiendo como se adaptan a los cambios de hora. ¿Cómo le hacen cuando van al oriente? Ya saben: Europa y Asia
—¿Ya tienes sueño?
—Sí, aún no se como se adaptan a tantos horarios.
—Solo es de acostumbrarse.— Dijo Ross y se abrazo más a mi.
Desde que nos conocimos en el auditorio no se aleja de mi ni cinco centímetros, claro que no me molesta, yo estoy encantada de que me rodee con sus brazos. Me abraza por los hombros y después por la cintura, incluso de vez en cuando me da un besito en la frente. Es taaaan lindo, no puedo con tanto amor.
Es como si fuéramos novios.
Si llegara a ser su novia, ¿sería así conmigo? Por que sin duda le diría que sí. Aunque si ahora no fuese así conmigo y me pidiera ser su novía igual le digo que sí por que.. por que es sueño de toda Rosser.
Íbamos camino al hotel y aún no se donde dormiría. Nos las arreglamos para caber todos en una camioneta de tres hileras de asientos. Al final, después de tantos desacuerdos quedamos así:
En la primera hilera: Mark de piloto, Stormie de copiloto.
En la segunda hilera :Rydel, Ratliff (abrazados también), Savannah y en el suelo alado de la puerta Riker.
En la tercera hilera iba Rocky y Ryland.¿Donde ibamos Ross y yo?
Nos mandaron en la cajuela. Sí, en esa mini cajuela.
Todos los instrumentos iban en un camión, atrás de nosotros.
Llegamos a el hotel y entramos en una suite. Habían varios cuartos y todos se fueron a uno distinto.
Rocky y Ryland a uno.
Savannah y Riker en otro.
Mark y Stormie a otro.
Ratliff y Ross a otro.
Rydel a uno... uno solo para ella.
¿Yo? Me quede como tonta parada en medio de la sala.
Todos apagaron sus luces y la única que estaba encendida era la lámpara de la sala... que era mi única compañía.. y la del cuarto de Rydel.
—Amelia, ¿qué haces allí fuera?
—Bueno, todos se fueron a cuartos distintos y yo no supe a donde ir.
—Cierto, dormirás conmigo. Duermo sola y hay una cama vacía. Además, quiero hacerte unas preguntas. Ven.
Y Delly me arrastró a su habitacion.
Y allí estaban mis maletas. ¿Desde cuándo? Ni idea. ¿Cómo? Tampoco lo sé.
Saque mi pijama, esa pijama me la hizo mi madre hace unos meses. Ella ama la costura y pues le dije que si me podía hacer una.
Sali del baño y Rydel me vio.
—Dios mio, esa pijama es hermosa. Nunca en mi vida vi que una pijama fuera de un piano.
Sep, mi pijama era de un piano. Eran enormes teclas de piano.
—Que bueno que te guste. Mi mamá la hizo para mi. Aparte le dije que hiciera otra.. y es para ti.. no sé si te queda.
Dije mientras sacaba otra igual con la unica diferencia de que la otra decia Rydel Lynch, en una esquina de abajo.
-¡La amooo! Y seguro me quedará. La hicieron justo a mi medida. Tu madre es una adivina.
Se la puso y sí.. ideal para ella. Apagamos las luces y cuando ya estabamos acostadas, preguntó:
-Isai, ¿tú no tenías novio?