There's a world out there

Capítulo 49

Susan

Un viento frío chocó contra mi espalda desnuda haciéndome sentir un escalofrío y despertarme en el acto. Los brazos de Zayn me rodeaban firmemente contra él y mi cara estaba pegada a su pecho desnudo, que se movía al compás de su tranquila y adormilada respiración.

Me moví entre sus brazos para obligar a mi cuerpo a despertar, pero una punzada de dolor en mi espalda me hizo dar un pequeño salto, para que luego Zayn sólo me abrazara aún más fuerte contra él. Cómo un rayo, o mejor dicho, cachetada, recordé lo que había sucedido la noche anterior. Mis ojos se abrieron en realización de lo que significaba y mi cuerpo se llenó de pánico. No sabía qué hacer, necesitaba correr a algún lugar o algo.

Me escabullí entre sus brazos y rodé al borde de la cama pero al intentar pararme mi espalda y mis muslos me hicieron gemir del dolor y encogerme en el mismo lugar. Me volteé a ver si Zayn no se había despertado, y por suerte así fue. Tomó toda mi fuerza mental no gritar del dolor cuando me obligué a caminar hasta el baño.

Me encerré y me senté en el baño tratando de mantenerme tranquila, mientras escenas al azar de la noche anterior me bombardeaban. De los accidentes patéticos que me solían suceder a diario, ese fue el más grande de mi vida. No tuvo que haber sucedido. Al menos no de esa forma. Y luego yo y mi... "Entusiasmo" por seguir después de terminar la primera vez.

Había dolido cómo la mierda, tal vez peor, pero... Al final... No lo sé... Me sentía bien, no estaba segura si era porque de verdad lo había disfrutado o porque había sido con Zayn. Ese sentimiento me había invadido y sentí que no podía ser más feliz, y que en algún momento eso iba a desaparecer y no quería que lo hiciera, eso fue lo que me animó a hacerlo de nuevo, varias veces más. Además del hecho que el dolor que sentía en el vientre y parte superior de los muslos era de ese tipo del que estás segura que si vuelves a hacer lo que lo provocó, desaparecerá conforme más lo hagas.

Vaya si me equivoqué.

El pequeño dolor de la parte inferior se corrió por todo mi torso y por todos mis muslos, incluso estar sentada me causaba dolor. Bajé la mirada y vi los pantalones de Zayn tirados a la mitad del baño, dirigidos hacía la ducha. Mi cara ardió y el pánico volvió a inundarme. Tenía que hacer algo... Cualquier cosa.

Vi mi ropa aún doblada en una pequeña mesa y mi celular que había dejado sobre ella. Es el deber de Lucy tranquilizarme en momentos de pánico, como éste. Me estiré para alcanzar mi celular sin poder evitar gruñir del dolor. Justo cuando buscaba su número, una llamada entrante apareció en la pantalla, una llamada de Lucy.

Esto de la telepatía de mejores amigas en serio podría asustar a cualquiera, yo no lo estaba, después de años con esto estaba completamente acostumbrada.

- Hey, Lucy - intenté sonar casual, no sabía cómo abordarla, y si ella me estaba llamando, seguro tenía que contarme algo.

- Susan -suspiró y se quedó callada - Susan, ayer pasó algo.

- ¿Qué? ¿Perdiste tu virginidad? - bromeé y reí jugando con mi propia ironía, porque así era cómo yo lidiaba con mis problemas. No me respondió. No hubo nada. Ni siquiera una risa. Oh, mierda. Ahora estaba asustada - Pasó, ¿verdad? - cerré los ojos lentamente. No sabía si sentir lástima por ambas u otra cosa. 

¿Por qué me sorprendo? La suerte de Lucy y Susan es tan característica de nosotras, que en serio me sorprendería el hecho de que no hubiera sucedido.

- Susan... Amo a Harry. Muchísimo. - Lucy soltó un risa nerviosa - No tienes idea de lo feliz que estoy, de lo... Bien que me siento con todo ésto, pero... Tengo miedo Susan.