Susan
- Podríamos hacer videollamadas... Yo temprano en la mañana y tú tarde por la noche - conversábamos con Zayn en la cocina mientras tomábamos té. Cada día era uno más cercano a mi regreso, y con la visita a mis padres sólo nos quedaba una semana más. Aunque la disquera no iba a meterse, era cierto que no quería que viajara cada poco, y también que con la distancia las cosas podrían ponerse difíciles, y honestamente, me sentía algo preocupada
- Si, es una buena idea; de todos modos iré cada fin de mes y cuando pueda - besó mi mano.
- El punto es que no viajes tanto - bajé la cabeza frustrada - ¿Cómo te convenzo para que no lo hagas? No quiero complicarte la vida.
- Estas haciendo esto difícil sin ningún motivo, puedo viajar, no me molesta, así que a ti tampoco debería. Ahora, si no quieres que llegue a visitarte, también puedes decirlo - me envió una mirada de frustración, enojo y súplica.
- ¡No es eso! ¡Para nada! Sólo no quiero interponerme en lo que tengas que hacer - lo vi un momento para después tomar su mano resignada - Está bien, pero te quedarás en mi casa el tiempo que estés y no pagaras absolutamente nada.
- Sabes que eso no pasará, pero igualmente aceptaré - guiñó en mi dirección, como el gato que se comió al canario. Gemí de frustración al cielo.
- Lo sabía, pero al menos lo intenté. Aunque no me he rendido - entrecerré los ojos amenazantemente, tanto cómo podía llegar a ser, pero lo único que logré fue una carcajada de parte de Zayn, y una aún más fuerte cuando intenté golpearlo en el estómago y se movió un instante antes de que pudiera tocarlo.
Mientras Zayn seguía riéndose de mí y yo fingía ruidos de rabietas, el timbre nos interrumpió. Zayn frunció el ceño extrañado y se dirigió a abrir; lo seguí por la curiosidad de saber quién podría haber tocado, pero me quedé en la sala sólo para escuchar.
- ¿Harry? ¿Qué haces aquí? - dijo Zayn al momento de abrir la puerta. ¿Harry? Me asomé para ver que efectivamente era él quién tocaba.
- ¡Harry! - Lo saludé efusivamente con la mano desde dónde estaba.
- ¡Hey! - Harry me saludó de la misma manera desde la puerta y luego entró - ¿Tienes té? Quiero té - Harry pasó de largo directo a la cocina, mientras Zayn se le quedaba viendo extrañado. Sinceramente pensé que era normal para ellos, pero la cara de Zayn me decía lo contrario.
- Hombre, ¿estás bien? - Zayn se acercó con cautela a un Harry que comenzaba a revolver el estante dónde ponía los tés.
- Se pelearon, ¿cierto? – lo vi desde la puerta, era obvio, Lucy no estaba con él y recordé que me había comentado esa mañana que iba a salir con Ashton pese a lo que había sucedido la última vez. Claro, no le dije nada, estaba harta de su necedad de salir con él, así que no me metí. Harry rió a lo bajo.
- Estoy harto de que no quiera que me preocupe por ella - Harry se apoyó en la encimera de la cocina completamente frustrado. Nos dimos una mirada de preocupación con Zayn.
- ¿Qué te dijo? - Zayn se acercó y recostó a su lado viéndolo.
- No, ¿qué le dijiste? - Tuve que meterme, conocía a mi amiga, y algo tuvo que decirle para encender la bomba.
- Le dije que regresara más temprano de la hora que me dijo - dijo cómo si no entendiera por qué se había enfadado.
- ¿Y te gritó por eso? - Zayn levantó la ceja.
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There's a world out there
FanfictionCuando la vida te da limones, haz limonada. Pero cuando la vida es una perra y te lanza los limones a la cara con el afán de herir o de hacerte aprender, pues buscas cómo defenderte y tomar las cosas que te pasan de la mejor manera. Esta historia no...