Así es el amor

Capítulo 1 Samuel y Luzu

-¡¡¡ME CAGO EN TODO, ME CAGO EN TI MIL AÑOS LUZU!!!-

-No, no, no, Vegetitta-

-Y luego dice, no, que el compañerismo, que el equipo y no se que mas-

-Relaja Vegetta, ya verás como gano y te dedico mi victoria-

-Como gano dice todavía-

Estos son Samuel y Luzu, unos chicos que llevan una relación desde hace dos años, y que mas de ser pareja, son los mejores amigos, los compañeros inseparables, hermanos de toda la vida, confidentes uno del otro.
Todos los viernes en la noche, tienen una sesión de juegos, si, se llaman por Skype y pasan casi toda la noche jugando online, ya sean carreras, o simplemente aventuras en Minecraft, locuras en GTA o cualquier otro juego.

-Pero tío ya van tres veces Luzu-

-Anda que yo no tengo la culpa que seas tan malo vegettoide-

-¿Tan malo? Luzu... Si te la has pasado chocándome para pasarme macho-

-Acepta tu derrota Vegetta-

-Nada de derrota macho, otra carrera mas-

-Vamos allá pues-

Ambos asistían a la misma escuela, Luzu un grado mas arriba que Samuel, por lo que durante las clases no se veían del todo, pero siempre comían juntos en el momento de descanso.
Samuel es el capitán del equipo de Soccer y Luzu el capitán del equipo de natación, ambos entrenamientos se llevaban a cabo a diferentes horas y días, por lo que uno siempre asistía al entrenamiento del otro, ya era algo habitual en sus vidas, y el pasar la mayoría del tiempo juntos, y si no estaban juntos, sus móviles sonaban cada dos por tres, entre mensajes y una que otra llamada.

-¡¡VEGETTA!! No, no mamón que haces-

-¡Vamooooos Luzu-

-Te voy a alcanzar y vas a ver-

-Si, si, como digas Luzito-

-Cuando te coja Vegetta, vas a pillar-

-Primero intenta alcanzarme-

La próxima semana seria de nuevos ingresos a la escuela y, Samuel y Luzu, además de ser capitanes de los equipos de Soccer y natación, eran también los jefes o capitanes, como quieran llamarles, de su grupo, lo que significaba que debían dar la bienvenida a los nuevos alumnos, con lo que vendrían, presentaciones, recorridos, explicaciones y demostraciones, por si algún nuevo chico quería unirse a alguno de los equipos deportivos de la escuela.

-¡¡¡VAMOOOOOOOOOOOOOOOOOS-

-Eso no es justo Vegetta y lo sabes-

-Anda tío no me vengas con lloriqueos ahora, si bien que me lo hiciste tres veces-

-No Vegetitta, te equivocas-

-Claro que no tío, ahora te vas a hacer el que juega limpiamente-

-Si, te equivocas, esta semana lo hemos hecho solo una vez-

-¡LUZUUU!-

Estaba cerca un torneo de natación, y Luzu había estado demasiado ocupado, claro que Samuel siempre lo acompañaba, apoyándolo en todo momento y mas aun, que esto era algo importante para el, ya que si ganaban su escuela seria campeona, además que estarían presentes profesionales, y seria una gran oportunidad para Luzu, el ser notado y poder cumplir su sueño de estar en las grandes competiciones.

-Mañana iremos a comer juntos, no lo olvides-

-Que no, que no Luzu, pues quien me crees-

-Samuel mi novio-

-Halaaa que malo chaval-

-Anda ya, vamos a dormir que sino no te levantas mañana-

-Vamos pues-

-Hasta mañana cariño-

-Descansa guapo-

Como ya he dicho antes, pasaban la mayoría del tiempo juntos, si no era físicamente, lo era por llamadas o textos.
Los fines de semana los aprovechaban al máximo, ya que eran los días que podían estar juntos, sin interrupciones, sin tareas, sin trabajos, solo ellos dos, disfrutando del día.
Ser los capitanes y jefes en su escuela, les consumía demasiado tiempo, pero a pesar de eso, ellos siempre estaban bien, no dejaban que sus puestos y actividades, trabajos, tareas y obligaciones, afectarán o se interpusieran en su relación.

Llevaban una relación muy estable, sólida, bonita y envidiable, aun que como cualquier otra, no siempre las cosas iban a color de rosa; Samuel debido a su carácter y a que se estresa demasiado rápido, siempre terminaba por comenzar peleas o una que otra discusión, tiene un carácter algo fuerte y se deja llevar la mayoría de las veces por lo que esta sintiendo en el momento (refiriéndonos a estrés, coraje, tensión, etc.)

Luzu en cambio, es mas tranquilo, se toma las cosas con calma, es mas relajado y aunque a veces también tiene sus arranques, el se controla y se tranquiliza más rápido que Samuel.
En momentos de peleas y discusiones, el es quien procura mantener la calma, aun que si, Samuel lo desespera a veces, pero intenta no perder el control y hacer las cosas más grandes, respira hondo y termina por calmar a la fiera de su novio.

[Mensajes]

Luzu, ¿estas despierto? - 2:23 am √√

¿Pasa algo cariño? - 2:28 am

No puedo dormir - 2:29 am √√

¿Quieres que te llame? y hablamos un rato - 2:30 am

Y si mejor ¿te vienes a dormir conmigo? - 2:31 am

Vale, voy para allá - 2:33 am

Y ellos son Samuel y Luzu, una pareja como cualquier otra, con altas y baja, y todo es o parece perfecto con ellos, pero hay un pequeño detalle, un pequeño ¿problema?, si podría decirse así.
Es la relación perfecta o bueno casi perfecta, pero para Samuel, no es suficiente, en los dos años que tienen juntos, jamás lo ha llamado de alguna manera en especial (amor, cielo, cariño, etc.), nunca le ha dicho te amo, a pesar de que Luzu se lo repite a cada instante, el solo responde con besos y caricias. Han tenido intimidad, pero sin llegar a más de tocarse (a nadie le han partido el culo).

Todas las noches se queda pensando, se pierde en sus pensamientos, viaja a un mundo de dudas, donde busca esa respuesta, ¿Qué es lo que me falta?, con Luzu lo tiene todo, amor, cariño, amistad, apoyo, estabilidad, con su familia tiene cariño de mas, apoyo infinito, sus padres lo aman y lo aceptan tal cual es, desde el principio que comenzó a salir con Luzu, sus padres lo aceptaron y los apoyaron, entonces, por que sigue habiendo un vacío, por que no se sentía completo, que es eso que le hace falta.

Pero por mas que indagaba en su cabeza, por mas que buscaba y rebuscaba, esa respuesta jamás llegaba, y tenía miedo de decirle a Luzu y lastimarlo, de que mal interpretará sus palabras, de que pensara que había algo mal con el, de que su relación se viera afectada ante ese comentario, y prefería ocultarlo y seguir perdiéndose en sus pensamientos, buscando una respuesta que sabia bien, jamás encontraría.