19-Sorpresas no muy agradables

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Mierda mierda y más mierda. ¿Y ahora qué coño le digo?

Antes de que pudiera abrir la boca, Hugo se me adelantó.

-Mira, Madeline, nosotros nos queremos, pero no de la misma forma en la que se quieren Ari y Dallas, ¿me entiendes?- dijo Hugo. A mi madre se le llenaron los ojos de lágrimas.

-Claro que lo entiendo, si el padre de ellos es mi hermanastro. Nosotros nos enamoramos mucho antes que vosotros- respondió mi madre. Mi boca se abrió formando una perfecta "O".

-¿Por qué no nos lo habías dicho nunca?- pregunté sorprendida.

-Porque era muy difícil deciros que vuestro padre también es vuestro tío, y pensé que me juzgaríais- respondió mi madre llorando a mares.

-Pero, una cosa; mi pregunta, y perdonad lo descortés que soy, es: ¿aceptáis lo nuestro?- preguntó Hugo yendo al grano.

-Si lo aceptamos, pero queremos poneros ciertas normas- respondió Leo.

-¿Cuáles?- pregunté yo. Ellos dos se miraron y volvieron su vista hacia nosotros.

-La primera es que no podéis estar en la habitación del otro con la puerta cerrada. La segunda que no queremos que tengáis encuentros....sexuales en casa. Y la tercera y ultima es que uséis protección- respondió mi madre.

Hugo me miró y sonrió de lado mientras yo estaba roja como un tomate.

-¿Quedan claras o os las tenemos que explicar más... detalladamente?- preguntó Leo elevando una ceja. Hugo y yo nos miramos y tragamos saliva.

-Queda claro- respondimos a la vez.

-Muy bien, ahora quiero que subáis a decírselo a tu hermano, que seguro que no se lo tomará tan bien. Nosotros nos vamos a cenar con los jefes- dijo mi madre antes de irse por la puerta.

-Ves, princesa, si tus padres lo han intentado nosotros también. Va a salir todo genial- dijo Hugo.

-No, ellos lo intentaron y les salió bien por un tiempo, pero mira como están ahora- respondí yo muy triste. Hugo me abrazó.

-Todo va a salir bien. Vamos a hablar con Dallas- me dijo dándome la mano y subiendo las escaleras.

Tocamos a la puerta y de ella salió un Dallas con tan solo unos jeans.

-¿Qué queréis?- preguntó.

-Hablar contigo. ¿Podemos pasar?- preguntó Hugo con tranquilidad.

-Claro- respondió haciéndonos hueco para que pudiéramos entrar.

Nos sentamos en la cama de Dallas y él se sentó en su silla de escritorio.

-Vosotros diréis- dijo mirándonos.

Vale, con tranquilidad y calma....eso es como espero que se lo tome.

...

-Dallas, PARA- le grité a mi hermano intentando separarlo de Hugo.

-Eres un hijo de puta. Te juro que te voy a matar por haber elegido a mi hermana- le gritaba Dallas a Hugo mientras le pegaba. Hugo no se defendía, porque si lo hubiera hecho, Dallas estaría muerto.

-BASTA YA- empujé a Dallas al suelo y calló de culo. Ayudé a Hugo a sentarse en la cama.

-Arianne, no pensaba que fueras tan guarra de tirarte a tu propio hermanastro- escupió Dallas con asco. Le di una bofetada que sonó por toda la habitación.

-Simplemente habíamos venido para ver si te parecía bien, pero aunque no te lo haya parecido nos da lo mismo, vamos a seguir con nuestra relación te guste o no- le grité.

El idiota de mi hermanastroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora