11 de Octubre del 2014

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Cuando regresé al colegio me disculpé con Liam y él conmigo.

-Fui a buscarte a tu casa y me abrió Alex, me dijo que no estabas.

-Lo siento. Necesitaba estar sola.

-Yo igual lo siento, por comportarme de esa manera. -dijo con la mirada hacía abajo- sabes que no soy así.

-Ya no importa. Podemos moverlo para otro día.

Por poco creí que se había enojado, últimamente es lo que suele hacer.

Mi día en la escuela fue completamente normal. Estuve con mis amigos, tuve clases normales; como si todo estuviera volviendo a la normalidad. Me he puesto a pensar en lo del viernes, últimamente nada tiene sentido.

Cuando llegué de la escuela me encontré a mi mamá llorando en la mesa. No quería saber qué tenía, la verdad si yo estuviera llorando me gustaría que me dejaran sola. Cuando iba subiendo a mi cuarto me detuvo mi hermano.

-¿Dónde estabas el viernes?

-¿El viernes?

-Vinieron tus amigos a buscarte y no estabas. Pensé que andabas con ellos ¿Con quién estabas?

A veces Alex suele ser un poco manipulador.

-Y ¿A ti qué te importa?

-Andabas con ese idiota ¿No?

-El único idiota en este momento eres tú.

Simple As ThisDonde viven las historias. Descúbrelo ahora