Simple As This

20 de Enero del 2015

Estaba caminando sola por la escuela y decidí ir al campo de fútbol. Estaba Jake sentado en las gradas como solíamos estar los dos. Creo que ya era hora de hablar con él pero tenía que pensar qué le diría si no quería que empeorarán las cosas como fue el caso de Liam.

Me fui acercando a él cundo finalmente me senté a su lado, ni si quiera volteó a verme. Nos quedamos en silencio. Traía una mirada triste —más de lo usual— como si algo lo inquietara.

—Jake... —finalmente dije.

Me quedé unos segundos pensando en lo que le diría.

—Yo... —apenas pude decir cuando me interrumpió.

—No.

—¿No qué?

—No digas nada.

—¿Nada? Pero no nos podemos quedar así. Jake...

—Mia, por favor.

Seguía serio y no me volteaba a ver. No quería seguirle insistiendo, debía darle su tiempo.

Me levanté para irme y en eso él me agarró del brazo.

—Espera. No te vayas.

Por fin me volteó a ver. En sus ojos se veía preocupación.

—¿Paso algo? —le dije volviéndome a sentar.

Se quedó unos segundos en silencio, lo cual para mí parecieron horas.

—Creo que regresaré a Nottingham.

En ese momento se me revolvió el estómago y mil preguntas pasaron por mi cabeza ¿Cómo? ¿Cuándo? ¿Por qué?

—¿Qué?

—No le está yendo muy bien a mi papá, económicamente. Creo que lo mejor sería regresarme.

—¡No! —de inmediatamente le contesté— Tu no puedes irte Jacob, no me puedes dejar.

Se volvió a quedar en silencio.

—Yo tampoco quiero irme pero creo que tengo que hacerlo.

Di un gran suspiro y no dije nada.

—Pero todavía no es un hecho, veré como siguen las cosas. Tú no te preocupes —siguió diciendo.

Me quedé callada. Él no se podía ir, estoy segura que no lo haría.

—Vamos Mia, di algo.

No quería decir nada, no tenía nada qué decir así que solo me le quede viendo hasta que finalmente me abrasó. Por lo menos ya nos hablamos.