Simple As This

13 de Septiembre del 2014

He estado muy aburrida últimamente y sinceramente no ha pasado nada interesante en la escuela, bueno, algo así. Ayer que llegué a mi salón de clases, varios compañeros se habían ido de pinta a nomeimportadonde así que el salón de clases estaba vacío probablemente solo estaba la cuarta parte del salón lo cual no me extraña ya que suelen hacerlo seguido hasta yo misma me he fugado de la escuela, fue una sola una vez y fue el año pasado, mis dos amigos Liam y Cass me rogaban que lo hiciera

-Vamos Mia, no pasará nada -dijo Liam

-Nunca lo hemos hecho y créeme que si nos va mal no lo volvemos a hacer-se empezó a reír.

-¡¿Si nos va mal?!

Ambos comenzaron a reír yo solo los miraba abrumada y nerviosa. Liam se me quedo viendo con cara "¿Vienes o te quedas?" Sus ojos grises se clavaron en los míos intentado convencerme.

-Mira, lo peor que puede pasar es que nos atrapen y nos castiguen de por vida.

-Si es que nos atrapan pero no creo, tú tranquila, yo te protejo.- agregó Liam

Fue cuando hice una mueca de disgusto y contesté:

-De acuerdo.

Ese día hicimos distintas cosas, vagamos por varios centros comerciales, fuimos a McDonalds, nos recostamos en el parque, hasta nos bañamos en la fuente del centro. Fue uno de los días más divertidos que he pasado y en los que más me he reído, lo disfrute todo y por suerte nadie se dio cuenta.

-Buenas días chicos ¿Tan pocos vinieron hoy? Qué raro, hace mucho que no faltaban tantos.

-Debimos de haber ido con ellos.- replica Liam volteándome a ver

-1) no pertenecemos a esa bola de perdedores 2) dije que no lo volvería a hacer y 3) cállate.

Todos mis compañeros son unos estupidos de "alta sociedad" que lo único que los define son sus likes en Instagram, toda esa bolita de retardados era la que faltaba ese día en el salón cuando de repente tocan a la puerta.

-Perdón por interrumpir la clase me se me hizo un poco tarde

-No importa Tyler, pasa.

El chico pasa y se sienta detrás mío. Mis amigos se me quedan viendo cómo me pongo nerviosa.

Tyler Helders, es más lindo de lo que suena su nombre, es uno de los chicos más populares de la escuela, es alto, tiene el cabello rubio como el sol peinado hacia arriba, los ojos extremadamente azules y me ha gustado desde siempre. Sí, es el típico chico que todas quieren y todas sueñan pero en preescolar éramos mejores amigos y nos llevábamos de maravilla, simplemente nos dejamos de hablar. Me extraña que no se haya ido con su grupo de amigos zombies al igual que me extraña que se haya sentado justo atrás de mí y lo que fue aún más extraño fue que...

-Hola ¿Cómo estás?

-¿Uh?

-Mia, ¿Cierto?

Me conoces, alto estúpido. No finjas que no sabes mi nombre, ah.

-Tyler, ¿Cierto?- sonrío falsamente

-Uy, tranquila

Me empiezo a reír-Lo siento ¿Qué pasa?

-Tienes sentido del humor eh. Pues nada creo que deberíamos llevarnos más, me caes muy bien Mia.

-Tu igual me caes bien Tyler.

-El Viernes habrá una fiesta en la casa de unos amigos, sus papás salieron de viaje, tú sabes ¿No? -se ríe amablemente- solo quería saber si ¿te gustaría ir conmigo?

Sin pensar esbocé un fuerte:

-¡SÍ!

-¿Qué?

Maldición.

-Digo... Claro, creo que no tengo nada qué hacer el viernes.

Sonríe tiernamente -Muy bien ahí te veo.

Y ése fue fabuloso día aunque sigo algo confundía ¿Por qué yo? No sabía que le interesaba o algo por el estilo ¿Yo? Ya veré que se sucede el viernes.