5 de Enero del 2015

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Todo iba normal en mi día. Me había levantado temprano y acompañé a mi mamá a hacer unos mandados de la casa. Hice cosas que suelo hacer. Todo el día estuvo haciendo mucho frío, había un viento húmedo.

Más en la tarde me arreglé para mi compromiso en la noche la verdad es que tenía mucho frío y afuera hacia aún más así que me dio igual qué ponerme. Estaba muy emocionada por hoy ya que no he salido mucho en vacaciones además de no he visto mucho a Jake desde que regresó.

Esperé un rato a Jake, más bien, llegó muy tarde pero tenía que esperarlo ya que yo no tengo auto y lo había invitado yo. Ya no estaba nevando pero de todas formas había un viento que horrible, ya habían quitado la nieve de las calles pero aún así las banquetas y las casas seguían tapizadas de blanco.

Veía la tele cundo oí el sonido del carro, seguro era Jake. Por poco pensé que lo había olvidado o que no tenía ganas de ir pero ahí estaba, afuera de mi casa.

Salí y el aire me congeló de inmediato, creo que era de los días más fríos del año.

Para no gustarle estas cosas Jake se veía feliz lo cual es raro ya que usualmente no demuestra ese sentimiento. De inmediato noté que traía puesta la chaqueta que le había regalado, la azul, también traía un gorro tinto que para ser sincera le quedaba muy bien. Mientras conducía lo miraba fijamente como la otra vez en clase que lo veía de perfil; sus mechones cayendo sobre sus ojos azules (en este momento eran azules) su nariz levantada y sus labios de un tono rojizo los cuales por el frío resaltaban más.

Al principio nos quedamos en silencio en el auto hasta que él me preguntó:

—¿Qué tanto me vez?

Yo solo reí y le conteste.

—Ahora tus ojos son azules.

—¿Por qué tanto trauma con mis ojos?

—Me gustan tus ojos, Jacob.

Él puso una sonrisa en su boca y soltó una pequeña risa.

—Tengo los ojos de mi mamá. —dijo.

—Me imagino. He visto a tu padre y en verdad no te pareces nada a él.

—No. Conociendo a mi mamá a lo mejor ni si quiera es mi padre. —dijo riéndose

—No digas eso. ¿Cómo no va a ser tu padre?

—Era broma y si no lo fuera no me importaría. Él me ha hecho muchas cosas por mí y de hecho preferiría no ser hijo de mi mamá.

—No digas eso de tu madre.

—Es la verdad. Tú lo dices porque tu mamá es una señora trabajadora y que seguro saldrá adelante pero la mía es todo lo contrario nunca salió adelante y probablemente nunca lo haga. No es una buena persona, Mia.

No sabía qué contestarle así que me quedé callada. Sabía que no era una santa pero entonces ¿Era una mala persona?

Al fin llegamos. Era un lugar muy grande y por suerte cerrado, creo que era una casa, había tanta gente que no sabía qué era.

Cuando entré lo primero que hice fue buscar a Cass pero no la vi así que me senté en un sillón con Jake.

—¿Así son todas las "fiestas"? —me preguntó Jake.

Ya era tarde por lo que había gente empujándose, gente gritándose, tomando, fumando y vomitando y la típica música a todo volumen.

—La mayoría.

—Y... ¿Qué es lo que tiene de divertido?

—Convivir con tus amigos, conocer gente nueva, bailar...

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