Capítulo 10. Al despertar.

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-Aya apurate!- La voz de Hew era lo único que se lograba oír.
- Ya voy!- Grité con todas las fuerzas que me quedaban. Era difícil subir una montaña.
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Ya en la punta de la montaña nos sentamos todos en círculo. El profesor nos empezó a contar la historia de la montaña, la fauna y flora del lugar.

- Esta salida a terreno esta saliendo muy mal- dijo Matthew mirando hacia el horizonte.

La verdad era que efectivamente estaba saliendo muy mal la salida, a un chico le dió un ataque de asma, otra se cayó y se rompió una pierna y a Lindiana la pico una abeja (aunque eso fuera tan malo) pero igualmente todo era un desastre.
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Estábamos bajando la montaña.
El día era bastante lindo, el sol se asomaba pero no hacía tanto calor, las flores desprendían un magnífico olor y había una suave corriente de viento.

Matt y yo estábamos de últimos, el camino de bajada era muy estrecho.
Ya estábamos llegando a el inicio de la montaña, pero algo ocurrió.
Empecé a ver borroso, paré en seco y sitúe mi mano en la cabeza; estaba ardiendo de fiebre.
Intenté llamar a Matthew pero era muy tarde, había caído inconsciente.
Lo último que escuche fue a Matt gritando mi nombre.

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Me desperté en una cama blanca y fría, las paredes de la habitación estaban pintadas con colores pastel y tenían nubes flotando por ahí.
Intenté girar mi cabeza pero no lo logré porque una máscara de oxígeno cubría mi boca y nariz.
Levanté mi mano derecha y me di cuenta que tenía una cable conectado a una bolsa de sangre.

-Mierda, esto fue grave- pensé.

Una enfermera entró a la habitación, me miró con cara compasiva, se acercó a mi y me dijo que iba a llamar a mis padres.

Un rato después mis padres entraron y me abrazaron cuidadosamente.
Mi mamá empezó a llorar y mi papá me miraba con orgullo mientras que le tomaba la mano a mi mamá.
Yo no entendía nada.
Le hice una seña para que me ayudaran a retirarme la máscara.
Ellos cuidadosamente la quitaron.

- Hija mía, pensábamos que morirías- dijo exageradamente mi madre.
- Te extrañamos mucho en la casa- agregó mi padre.

- Esperen, no entiendo, me extrañaron? Cuánto tiempo estuve ausente?- pregunté.
- No te dijeron? Estuviste en coma por 3 meses- la voz de mi madre se quebró al decir esas palabras.
La cara que puse después de escuchar esa noticia fue muy grande.

- P..Peero qué pasó?- exigí.
- Creo que es mejor que él te lo cuente- dijo mi padre.

Matthew entró a la habitación, acto seguido mis padres salieron dejándonos solos.
Él se sentó a mi lado y tomó mi mano.

-L..Losiento mucho-  dijo Matt.
- De qué hablas?- Pregunté
- Fue mi culpa que estuvieras en coma tanto tiempo- exclamó Matt.
-No entiendo-
- Te acuerdas cuándo íbamos de bajada en el paseo de curso?- preguntó Matt
Yo solo asentí con la cabeza.
- Bueno, te dió un ataque y no pude tomarte antes de que te cayeras y te golpearas en la cabeza con una roca.-
Él repetía constantemente que había sido su culpa.
Yo simplemente lo tomé de las manos y le dije que yo ya estaba bien y que nada de esto era su culpa.
Una lágrima cayó por su mejilla.
- Me perdonas?- Dijo Matt.
- Te perdono-
Él me abrazó con precaución y dijo casi en susurro; te quiero.

La Verdad Detrás De La FelicidadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora