happy bday cry baby; muke au

fourteen

Michael llegó al colegio la mañana siguiente pensando en si ashton le habría dicho algo a sus amigos y ahora todo el mundo se reiría de él, aún más. Se sentía tan mal la noche anterior que durmió con su preciado osito de peluche y esa misma mañana lo llevaba en su mochila intentando sentirse un poco más seguro. No había visto más al rubio, tampoco lo había llamado o había ido detrás de él. Simplemente porque era obvio que Luke no quería que lo hiciese.

Se sentía un poco culpable por haber dejado ahí Ashton sin ni siquiera haberse despedido, y ese sentimiento de culpa aumento mucho más al ver como el chico se acercaba a él con una sonrisa nada más verlo.

-Hey mikey, ¿estás bien? Digo porque ayer...- Fue lo primero que salió de la boca del rizado.

- Oh, sí, no pasa nada, está todo bien. – Le cortó Michael devolviéndole la sonrisa, aunque después de ese 'mikey' sólo se le vino a la mente el rostro de su lukey.

Le había parecido todo un detalle el hecho de que ashton se preocupase por él, es decir, cualquier otra persona del instituto tan solo se lo habría contado a sus amigos y ahora mismo estaría riéndose de lo mucho que lloraba.

Pero Michael pensaba que Ashton era diferente. Por eso mismo pasó todo el día con él. En la hora del almuerzo le presentó a unos amigos, pero Michael pensó que estos no parecían tan simpáticos como el rizado al ver rostros y al escuchar risas que había escuchado antes, no en la mejor situación.

Y nada mejoró cuando la mochila del peli-morado se cayó al suelo, y su osito de peluche salió de está causando risas de todos los presentes.

Hizo como si no le importó y rió avergonzado con ellos al ver que ashton se reía sin ninguna mala intención, pero se le hizo realmente duro el ver como cogían su osito y lo destrozaban en frente de él.