Sábado 18 de octubre del 2014
11:00 p.m.
- ¡¿Cuestión de suerte?! -preguntó con evidente molestia e indignación Emanuel- ¡Pudiste matarme!
El oriental puso los ojos en blanco ante las acusaciones del latino.
- No seas dramático. En todo caso te hubiera aturdido y el otro nahual te hubiera matado, no yo.
- Vaya consolación.
- Hablando de dramas, ¿por qué no te has levantado del suelo? -cuestionó Kim.
- Si no te has dado cuenta, estoy herido -contestó Emanuel.
- Vale, te ayudo.
Por medio de su magia, Kim hizo levitar el cuerpo de Emanuel y lo recostó a un lado de Trevor, quien no había dicho nada hasta ese momento.
- Por cierto Trevor -habló nuevamente Kim-, he quitado la ilusión que puse sobre las flores, por lo que ya eres visible para todos y las flores ya no presentan ninguna amenaza para ti ni para nadie -el aludido tenía la mirada fija en los cuerpo inertes que había a su alrededor-. Hiciste lo que era necesario Trevor. Era su vida o convertirte en su cena.
Se empezaron a escuchar algunos quejidos por parte del nahual que había sido herido por Kim.
- Cállate ¿quieres? -fue lo que dijo Kim, antes de dispararle otro rayo- ¿Acaso no eres testigo del momento de fraternización que trato de tener con mis colegas?
- ¿Ahora somos colegas?
- Tu tambien cállate Emanuel.
- ¿Dónde están los demás? -preguntó Trevor.
- Lejos de aquí, aunque no deben de tardar en llegar.
- ¿Cómo pueden hacerlo? -volvió a preguntar Trevor.
- Bueno, simplemente tomamos a las personas que queremos que nos acompañen y pensamos en el lugar en el que queremos aparecer. Aunque a veces...
- Me refería a matar -interrumpió el rubio- ¿Cómo pueden hacerlo con tanta facilidad?
- Como ya te dije, era su vida o convertirte en su cena.
- Hablo en serio Kim.
- Yo también en realidad -argumentó el coreano, pero notó la mirada de vacío de Trevor, quien no dejaba de observar los cuerpos-. Aunque entiendo por completo a lo que te refieres.
- ¿Lo entiendes?
- Por supuesto que sí, no siempre fui así. El solo pensarlo me causaba pánico -con un movimiento de su mano ocultó los cuerpos para que así Trevor no los viera más-. Nunca ha sido fácil en realidad.
- Nunca terminas de acostumbrarte -confesó Emanuel-. Al menos yo no he podido, pero lo hago para proteger a mis seres queridos.
- Creí que una parte de tu alma se fragmentaba.
- Ustedes dos en serio deben dejar de citar la saga de Harry Potter -le regañó Kim a Trevor, refiriéndose también a Walt-, sobretodo en presencia de Frédéric.
- Tiene secuestrado a mi mejor amigo en su mansión, tendrá que soportar mis bromas.
- No soy la damisela en peligro Trevor -contestó indignado Walt.
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The Dark Side of the Moon
WerewolfAl llegar a Rises Hills lo único que Walter Patterson desea a sus cortos 18 años, es una vida medianamente normal. Sin embargo, a los pocos días de llegar su esperanza desaparece al notar que allí también habitan hombres lobo. Cuando pensaba que eso...