L. P. H. R

Prólogo

Había amanecido como cualquier mañana de verano. Me me di una ducha relajante y me puse un vestido playero con unas sandalias, me hice una trenza al lado y baje a desayunar, encontrándome con mi hermano que estaba jugando a no se que juego

-¿Mamá se fue ya? -pregunte mientras tomaba una manzana

-Tubo que salir antes -

-Vale -Me puse enfrente de él-Quede con Harry, no la  líes-le advertí

-Soy muy bueno -

-Oh, si un niño de trece daño es muy bueno -

-Y una chica de 15 es súper buena -me contestó

-Justin.... tu solo no la líes -alce una ceja. Él sonrió y yo rodee los ojos, cogí mi bolso y salí de casa.

(-)

Fui dónde mi novio y yo siempre quedamos.
Llevaba tres años con él y estaba muy feliz.
Me senté en un banco a esperar. Paso una hora y no apareció. Decidí irme a casa. -A lo mejor se ha olvidado-pensé.
Me levanté y mi móvil empezó a sonar. Era Lya

-¿Diga? -

-¡Edra, ven! -fruncí el ceño

-¿Que ocurre? -

-¡Tu ven! -Comencé a caminar, hacia su casa ya que no quedaba lejos

-Ok, enseguida estoy.... -Mis pies se pararon en seco y mis ojos se abrieron como platos

-¿Edra? -dijo Lya

-Ya voy -dije y colgué

Mis ojos seguían fijos en el chico de pelo negro sentado junto a una rubia besándose. Se separaron y confierme mis sospechas al ver aquellos ojos azules que una vez me cautivaron. Era Harry, mi novio. Me acerque completamente enfurecida. Él al verme abrió bastante los ojos

-¡Imbécil! -le di una torta

-Edra-se levantó, pero yo me gire y sigui caminado. El me cogió del brazo y me giro, yo intentaba contener las lágrimas, que estaban apunto de salir.

-¡Olvidame! -me solté y retrocedí -¡ No me vuelvas a mirar a los ojos! -el sonrió y dejo algo que no escuche que salí corriendo y las lágrimas empezaron a recorrer mis mejillas a medida que los buenos momentos que habíamos pasado juntos , ya no valeran nada. Estaba destrozada, estaba rota.

Mi primer y último amor

-Prohibido enamorarte -me dijo mi subconsciente y en ese momento supe que tenia razón.