#1 Mis 5 Idiotas |Editando|

XIV

 Abro lentamente los ojos, la luz me molesta, así que los vuelvo a cerrar una vez más. Intento darme la vuelta, pero siento mi cuerpo apretado. Hago un nuevo intento y ahora sí que lo logro. Mis ojos recorren las paredes de mi habitación ¿Yo no me estaba bañando? No hay nadie conmigo, pero la puerta está abierta de par en par. Me llevo mi mano a la cabeza, me duele mucho pero no parece que me haya golpeado. Paso a mirar mi cuerpo, lo tengo cubierto con la toalla que recuerdo lleve al baño.

—No entiendo... — susurro mientras tomo asiento en mi cama, mi ropa también está aquí.

Me pongo de pies, cierro la puerta y me comienzo a vestir, mi cuerpo está seco, así que lo más probable es que lleve un buen rato con la toalla puesta. Mi cabello sí que está mojado y mi cojín está húmedo también.

Saco el seguro de la puerta y me siento una vez más en la orilla de la cama. Los recuerdos comienzan a aparecer en mi mente y siento que una vez más, todo me da vuelta a mi alrededor.

—Hola — levantó la mirada, es Dustin — ¿Como te sientes?

Me lo quedo viendo unos segundos e intento sacar aquellas imágenes de mi cabeza.

—Mejor — miento.

—Dereck ha sido él que te ha sacado del baño — menciona — todos se han preocupado mucho.

—Lo lamento.

—¿Qué es lo que te ha pasado ahí dentro?

—Es que... — me muerdo el labio — me llegaron muchos recuerdos a la mente y bueno, supongo que por eso me he desmayado, porque está más que claro que lo he hecho.

Él asiente con la cabeza. No hay que ser muy lista para saber que he perdido la conciencia y me han traído a mi habitación. Dejo que un suspiro se escape de mis labios y tomo el cojín con la funda mojada, se la saco lentamente.

—¿Por qué no dices que es lo que realmente te pasa?

—No es algo que les incumba, en lo más mínimo — formó puños en ambas de mis manos y me lo quedo viendo molesta — el hecho de que viva con ustedes no significa que les tengo que contar todo, ustedes no lo hacen. Recién nos venimos conociendo, no me pidan que salte de un puente por ustedes.

Él asiente con la cabeza.

—Vaya debe ser algo muy grave teniendo en cuenta que has saltado a la defensiva de este modo.

—Quiero estar sola Dustin — me dejó caer en la cama y espero a que él se marche.

—Lo entiendo — susurra.

Se marcha rápidamente e intento dormir, pero es una tarea bastante difícil teniendo en cuenta el ruido que hacen los chicos en el pasillo y que mis pensamientos están completamente descontrolados en estos momentos.

—¿Y te ha dicho algo? — esa es la voz de Bruno.

—Debe ser algo delicado — susurra Alexander.

—Sin duda lo es — responde Dustin — ya que por la manera en la que me ha contestado, lo deja en evidencia.

—Tenemos que darle su espacio, a ambos — susurra Dereck — ya que lo más probable es que Cristóbal también sepa que es lo que está pasando con su hermana.

Ellos se quedan callados y luego escucho como se marchan, tal vez alguien ha subido, puede que sea mi hermano o uno de los primos de Alexander. Dejo que un suspiro se escape de mis labios. Supongo que en algún momento tendré que decir todo, pero es verdad que se me hace muy complicado decirlo en voz alta.

(...)

Han pasado tres días desde que me desmaye. Esta semana todos en la casa hemos estado muy ocupados, llenos de exámenes y cosas de ese estilo. Han sido unos días muy ajetreados.