SIN CONTROL. #2 || Liam Dunbar (Teen Wolf)

Capítulo 1 - Nuevas oportunidades.

LIAM POV'S

Stiles y Scott están hablando cerca de mí sobre lo que les deparará el futuro. Universidad, universidad y universidad. Este es el último año que ellos pasarán en Beacon Hills y luego... se irán. No sé que podría ser de mí sin el alfa, Scott.

Les escucho comentar los planes que tienen, sobre Lydia, sobre Kira y sobre April. Todos están pensando ya en irse, y probablemente en no volver. Y quizás sea mejor así. Aunque aún no sé cómo podría sobrevivir sin mi alfa, pero imagino que tendré que descubrirlo.

Scott y Stiles están pasando de mí y de las cadenas con las que estoy atado a un árbol en medio de la nada. Quizás esté todo un poco exagerado, pero lo han creído necesario por el tema de la luna llena.

— ¿Ha pasado ya tiempo suficiente? —Le escucho preguntar a Stiles.

—Síiiii. —Exclamo alargando las íes, cansado de estar atado a un árbol.

Stiles se gira y me lanza una sutil mirada.

—Eh, estamos intentando tener una conversación de adultos. —Se queja.

—Sois dos años mayor que yo y estoy bien. —Me quejo ahora yo. —Soltadme ya.

Ambos se acercan en un momento hacia mí y Scott saca las llaves del candado para soltarme.

—No es que no confiemos en ti. —Dice Scott para tranquilizarme.

—Yo no confío. —Sonríe Stiles.

—Pero después de la última luna llena. —Sigue diciendo Scott.

Suspiro, ya hemos hablado suficiente de este tema.

—Fue un desliz. —Me defiendo.

— ¿Un desliz? —Pone en duda Stiles. —Hubo una docena de llamadas a la comisaria sobre un monstruoso perro niño corriendo por las calles de Beacon Hills desnudo. ¿Eso es un desliz?

— ¿Por qué estabas desnudo? —Pregunta Scott.

—Hacía mucho calor esa noche ¿vale? Soltadme.

— ¿Seguro que estás bien?

—No volverá a pasar. —Le aseguro a Scott.

— ¿Tienes el control completo y total?

—Sí, completo y total.

APRIL POV'S

He perdido por completo el control de mí misma. He dejado que una ola de emociones me sacuda cada instante sin razón alguna. Nunca me he considerado una chica que llore con facilidad, pero es en lo que me he convertido en estas semanas. Y quizás, sabiendo esto, debería dejar de ver películas dramáticas con la petarda de June.

—Te dije que no la pusieses. —Digo entre lágrimas. Ese final es demasiado para mí.

June sonríe y me abraza, para luego pasarme una caja enorme de pañuelos de los que saco unos cuantos.

—Te he sensibilizado y eso es... ¡Geniaaaaaaaaal! —Sacude June sus palabras como si por el tono en el que lo dijese iba a dejar de llorar. Pero es cierto, soy más sensible desde que acepto a hacer este tipo de cosas que hace cualquier adolescente enamorada y rota.

Quizás sea una adolescente enamorada y rota.

—Solo acepté estos estúpidos... estupidísimos planes si me comprabas chocolate. —Le recuerdo. —Así que dime, ¿dónde está el chocolate que me corresponde?