Capítulo N° 1

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Revolviendo los pensamientos de mi pasado recordé esos fríos y horribles instantes que me atormentaron por largo tiempo, esos momentos en el que las más detestables ideas pasaban por mi mente, aquellos tiempos que cualquiera desearía borrar de su memoria.

Todos esos pensamiento oscuros comenzaron en el año 2005, a finales de este año con la muerte de mi amada abuela. Sé que muy pocos gozan tanto tiempo con sus abuelos, realmente valoro mucho esos instantes que pasé junto a ella, momentos que jamás olvidaré. Tenía 80 años cuando falleció. La mañana de ese terrible día, 15 de noviembre, todo transcurría normal no parecía que cambiaría tan drásticamente, ella empeoraba con el tiempo, casi que a diario, pero ya se hacían frecuentes sus pésimas recaídas, podría ser que le diera una nueva alucinación, que le diera un ataque de asma o que le diera tos durante todo el día, su salud cambiaba de un estado a otro, mi madre y mi tía desde muy temprano realizaban las tareas del hogar, ocupadas como siempre, mientras mi abuela descansaba recostada en una cama en su habitación.

Cuando alucinaba recordaba momentos de hacía bastantes años atrás, recordaba a cientos de familiares y amigos ya fallecidos y otros que seguían vivos, esos eran los que ella mas apreciaba, hablaba toda la noche con ellos, inclusive con su madre, a la cual amaba y siempre la recordaba, en esos tiempos llegó a hablar con su amado hermano, Carlos, este había muerto hacia unos cuatro años, era como un abuelo para mí, me daba regalos, me me mimaba y me consentía con dulces y regalos, pero en ese entonces yo tenia unos nueve años cuando él murió, al menos eso me dijo mi madre, ella y el resto de mi familia no me dijo nada sobre la muerte de él, ni a mí, ni a mi abuela; en una de sus muchas alucinaciones, durante la llegada de unas primas que llegaron a visitarle, ella se quedó mirando fijamente un punto en el vacío de la sala de estar, donde estaba cortos momentos ya que pasaba más tiempo en su habitación, todos lo notamos, ella aún después de cierto tiempo, al rededor de cinco minutos, seguía mirando hacia ahí y me digne a preguntarle:

-Abuela?, ¿Qué miras?.

-Estoy observando a Carlitos, mi hermano del alma.

-Pero... abuela... ¿Estás segura de lo que estas viendo?

-Claramente! -afirmó con enojo- ¿Qué tú no lo ves?

Quedé sin palabras, nadie comentó nada, todos la miramos a ella, yo un poco aturdida pregunté que si él se encontraba bien, nadie contestó; en ese momento comprendí que había muerto, nos miramos todos de nuevo y sabíamos que pensábamos lo mismo, pero ya pasado unos minutos mi abuela dejó de mirar hacia ese lugar y dijo:

"Oh!, mi hermano, como lo extraño"

Dió un largo suspiro y se quedó dormida, algo que si pasaba muy frecuentemente.

En ese momento caí en cuenta de porque él no había vuelto a llegar a visitarnos en la casa, había muerto ya hacia años. Que no me hubieran contado me dolió bastante, él era como un abuelo para mí, realmente lo amaba y a pesar de todo a muchos no les importó y decidieron no comentarme nada, realmente me resentí con mi familia por dicho acto, sentía en mi pecho un vacío y decidí preguntarle a mi madre porque no me habían absolutamente nada:

-Madre, ¿Por qué no me habías dicho que el abuelo Carlos a muerto?, ¿Por qué me tuve que enterar por mi abuela?, por mi abuela la cual esta alucinando y no le queda mucho tiempo más de vida.

-Un poco impactada por mis acusaciones contestó-Amor, sabemos que tu amabas al abuelo Carlos y que a tu edad de ese momento no tenias la suficiente madurez para que entendieras la situación.

"Las Sombras de mi Pasado"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora