XIII (*)

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-No te separes nunca de mí, por nada. Bien? Esto es peligroso. - Murmuro sosteniendo la frágil y delgada mano de la chica.

-Si.

-Por cierto, cual es tu nombre?

-Michaela.

-Es un bonito nombre. Me llamo Hikaru. - Ella asiente. Veo que aún sigue nerviosa.

Caminamos por los pasillos que parecen estar desiertos, pero ese pútrido olor sigue presente.

Por qué era necesario asesinar gente inocente, Hikari?

Por qué eres una asesina?

Muchas preguntas invadían mi cabeza. Muchas de ellas no podían ser respondidas al instante.

-Hikaru... - Miro a la pequeña. Ella me mira fijamente -T-Tengo que ir al baño.

-Uh... No creo que estos baños funcionen. Vamos de todas maneras.

Avanzamos rápidamente por el pasillo. Cada un piso estaban los baños. Ubicando los números de sala, veo que estamos en el segundo piso.

-Será peligroso bajar a los baños de la cancha. Podrían vernos. Subamos al tercer piso.

Subimos las escaleras lentamente. Me asomo y veo el pasillo. Me parece ver algo, pero al parpadear, no veo nada. El pasillo está desierto.

-Vamos, lento. No hagas ruido. - Michaela asiente.

Caminamos lentamente por el pasillo. Mi arma de fuego está cargada y la llevo en mano, por precaución. Llegamos a los baños.

-Vé y apresurate. Si sucede algo, no dudes en gritar. - Ella asiente. Entra al baño y cierra la puerta. La detengo - No cierres la puerta, puede quedarse trabada y eso sería bastante malo. - Ella entra a los baños. Espero afuera, apoyado en la pared.

-Hikaru, canta algo. No quiero que me escuches hacer. - Murmura.

-Es arriesgado si canto algo...

-Hazlo! - Ordena, me sobresalto.

-Bien.

El puente de Londres caerá,

Caerá

Caerá

El puente de Londres caerá,

My fair lady.

Repetí la misma estrofa un par de veces. No quería cantar las demás, me traía nostalgia. Mi madre me cantaba esa canción cada vez que podía. Puedo recordar su dulce voz susurrando a mi oído.

Bajo la mirada. Siento ese maldito nudo en mi garganta, ese nudo que he tenido que soportar a lo largo de mi vida. Ese nudo que no me deja ni respirar. Ese nudo que apreta mi garganta, que me ahoga.

Reprimo las ganas de llorar. No era el momento. Por qué simplemente no lo puedo superar? Han pasado años, muchos años desde su muerte. Por qué no puedo olvidarlo?

Porque una mente tan inocente no estaba preparada para ver eso.

Un nombre lleno de luz para un inocente niño, que perderá su inocencia pronto

Su dulce voz resuena en mi cabeza.

Por qué Hikari? Por qué me hiciste eso?

No aguanto más y dejo que una lágrima caiga de mi mejilla.

-T-Te mataré... No tienes perdón... N-No sabes como se sintió mi corazón aquella vez... P-Pude oírlo, s-se quebró... Creaste a una bestia, Hikari, a una bestia sin corazón... Tú creaste al idiota que soy hoy en día!! Te mataré!! Me quitaste lo más valioso para mí!! Juro que lo haré!!

Mi ángel (HISTORIA INTERACTIVA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora