Mi ángel (HISTORIA INTERACTIVA)

XXII (*)

En ese instante, observo a Hikari. Ella está en el suelo, mientras llora.

-N-No maté a nadie... E-Es un juego...

-Hikari...

-¡¡Protéjanla!! - Levanto la vista, veo que habían unos tipos, con armas apuntándome.

Esto es malo.

Salgo corriendo de allí, tratando de esquivar los golpes. Subo las escaleras rápidamente, saliendo del subterráneo.

Corro lo más rápido y lejos que puedo, subiendo las escaleras.

Unas balas rozan mi brazo, debilitandome.

Cuando llego al tercer piso, me escondo en una de las salas, encerrándome en un estante.

Tapo mi boca, tratando de que mi respiración acelerada no se oiga.

Escucho los pasos entrando a la sala.

-No importa, dejenlo escapar. Vayan con Hikari. - Era la voz de un chico. -Maldito mocoso. - Los pasos se alejan.

Observo mi brazo.

Un poco de carmesí brotaba de él.

-Maldición... Tengo que encontrar algo con lo que curarme.

Abro la puerta del estante.

-Te encontré...

Mis ojos se abren por completo.

Siento un fuerte golpe en mi cabeza, para luego caer desmayado.

(...)

-Prometeme... Nunca le harás daño a nadie. Jamás. No asesinarás jamás.

-Lo prometo mamá. - Acaricia mi mejilla.

-Muy bien. Siempre recordarás esto, okay?

-Claro.

-Te amo, Hikaru.

Despierto tosiendo fuertemente.

Me doy cuenta que mis brazos no tocan el suelo y no puedo moverme.

Abro los ojos sorprendido.

Estoy en un lugar oscuro, no puedo ver muy bien.

Me doy cuenta que mis brazos están amarrados, por sobre mi cabeza.

-Maldición!

Tengo que salir de aquí, ya.

Ellos me tienen.

El grupo de Hikari me tiene.

De eso estoy seguro.

Comienzo a tirar de mis brazos, pero se me hace imposible.

Estoy bastante asegurado.

En ese instante, la luz se enciende.

Cierro mis ojos, debido al repentino cambio de luz.

Cuando logro acostumbrarme, los abro lentamente.

Una cabellera negra y corta está delante de mí, dándome la espalda.

-H-Hikari...

-Así que ya despertaste. - Su dulce y apagada voz se hace presente.

-L-Liberame ahora...

-De verdad crees que lo haré? - Manipula algo con sus manos.

-Por qué haces todo esto?

-No lo entenderias. Jamás.