XVIII (*)

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Maldición.

-Está bien, acepto. - Digo seguro.

-Bien hecho, Hikaru. - Él sonríe.

-Pero por favor, suelta a Michaela.

-Oh, cierto. - Él la suelta. Ella cae de rodillas al suelo. Me acerco a ella.

-Hey, Michaela. Estás bien?

-Él... e-es una mala persona... a-asesinó a un c-chico... - Me mira a los ojos - Y tú también!! T-Te aliaste con él!! Eres un enemigo!!

-Q-Qué? - Ella me mira con odio.

-Debo matarte!! - Ella se abalanza sobre mí y saca su compás. Sujeto su delicada mano con el compás.

-Michaela!! Calmate!! Estás fuera de control!! Michaela!!

-Hey niñata, ya déjate de jugar. - Akuma la patea fuertemente. Ella emite un gemido y se golpea contra la pared.

-Akuma!! No le hagas daño!!

-Esta chica es un estorbo. - La toma del cabello.

-No le hagas daño!! Sueltala!!

-Acaso no recuerdas? - Él la suelta. Michaela llora en el suelo.

-Recordar qué?

-Te aliaste conmigo. Dije que me ayudarías a deshacerme de todo quién me estorbara. Esta niña me estorba. -Me mira con una mirada cínica - Acaba con esta niña, Hikaru.

-Q-Qué? N-No... - Me levanto - No me refería a eso!!

-Ya es muy tarde Hikaru!! - Él me empuja - O lo haces, o tu vida termina aquí mismo.

-No asesinaré a una niña!!

-Ya lo dijiste Hikaru!! No tienes más remedio!! Hazlo ahora!! - Él me golpea en el estómago. Caigo de rodillas al suelo.

-Matame si así lo deseas, pero no le haré daño a Michaela. - Él ríe.

-Te crees tan valiente, no? - Él coloca su katana en mi cuello. - Y que tal si te lo pongo así. O la asesinas rápidamente, o la torturo yo, en frente tuya. Podré divertirme con ella horas. Ahora, qué dices?

-No me hagas esto Akuma.

-Decide rápido!!! - Grita.

Una lágrima resbala por mi mejilla.

-Lo haré yo.

-Así se dice - Él sonríe.

Me levanto y tomo mi katana. Akuma coloca en su boca lo que parece ser un pocky y sonríe. Me acerco a Michaela. Ella está en el suelo, llorando. La tomo del cabello. Su cara está llena de lágrimas. Abre sus ojos y me mira.

-Lo siento. - Ella llora - Sólo fui una carga para ti. Sal de aquí con vida, Hikaru.

Siento un nudo en mi garganta y una presión en mi pecho.

Suelto la katana.

No puedo hacerlo.

La suelto y caigo de rodillas al suelo. Sujeto mi cabeza mientras lloro.

-Qué crees que estás haciendo?!?!

-No puedo hacerlo!!!

-Hazlo ahor- Escucho un quejido.

-Ryo... - Michaela murmura.

Me giro. Veo que "Ryo" había golpeado a Akuma, hasta dejarlo en el suelo. Ahora él estaba encima, dándole combos fuertemente.

Mi ángel (HISTORIA INTERACTIVA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora