Songbird (bethyl III)

Para Panchita_Picocho

Daryl estaba jugando con su hijo, en una de las camas moviendo los brazos del pequeño cuando Rick entró en la habitación, luego de que Carol declarara que no iba a interferir en cuestiones de Beth o Daryl y planeaba dedicarse a las batallas contra el capitolio Rick se había convertido en quien hablaba más con Daryl de cuáles eran sus deberes, de momento solo daba mensajes diciendo que Beth se recuperaba de su embarazo.

A veces visitaba parte de los distritos pero Rick prefería que se quedara a disfrutar de su familia pues le había advertido que sin importar lo que pasara cuando invadieran el capitolio Daryl debía estar ahí. Ambos hombres había logrado entenderse bien y ahora Daryl confiaba en Rick porque había demostrado ser una persona honorable y un buen padre.

-Deberías bajar un rato, es importante que te vean involucrarte con los demás- dijo Rick.

Daryl negó con la cabeza, él no era hombre de reuniones, era la boda de Abraham y Rosita por eso Daryl se ocultaba aquí con su hijo, Rick volvió a insistir así que al hombre de la ballesta al final se reunió en la fiesta con su hijo en los brazos para darse un poco más de confianza.

Todos le saludaron y Rosita acarició la cabeza de su pequeño, la mujer se veía mucho mejor ahora que estaba dejando las drogas, tenía momentos en que su cuerpo se convulsionaba por la falta de estas pero en general mostraba resistencia a caer. Sasha también tenía progresos así que Daryl estaba agradecido que Sasha no tratara de matarlo cada que lo veía.

Vio como Abraham y Rosita reían y bailaban, como partían su pastel de bodas. Daryl había estado ahí con envidia pura porque Deanna había destruido su oportunidad de felicidad, afortunadamente tenía un niño para recordarlo pero le dolía que todavía no tuviera nombre y no podía ponerle uno porque Beth le odiaba.

Maggie y Glenn no paraban de besarse cada que tenían oportunidad y acrecentaba la acidez de su corazón. Entonces vio a Beth caminando entre las personas; había mejorado ella también pues ya no intentaba escapar aunque aún no le gustaba que su hijo estuviera con Daryl.

El hombre se ocultó de manera discreta en una de las paredes para que ella no intentara arrebatarle el pequeño pero eso no evitó que Beth se diera cuenta de su presencia y caminó hasta donde estaba, Daryl de mala gana entregó al bebé sin una sola palabra en los brazos de Beth que sonrió al niño. Ya se iba a retirar el hombre cuando ella le hizo señas con la cabeza para que le siguiera.

Ambos llegaron a uno de los pasillos en ese momento con apenas iluminación, las paredes estaban carcomidas por salitre pero a ninguno de los dos le importó, colocaron su peso en el cemento y Daryl le dio una mirada tranquila en la espera de lo que fuera a decirle la mujer, como ella no hablaba fue Daryl quien decidió decir algo -Es una gran idiotez esta boda-.

-Es hermoso- le cortó Beth -Demuestra que a pesar de todo se preocupan el uno por el otro ¿Acaso no piensas que es hermoso? -.

Daryl le dio una mirada pequeña al rostro de Beth -Vamos, te llevo a tu habitación para que pueda dormir-. Dijo al señalar a su hijo.

-Merle- terminó Beth -Quiero que se llame Merle-. Ella miraba a su pequeño mientras lo mecía.

- ¿Por qué Merle? - quiso saber asustado Daryl.

-Era el nombre de tu hermano ¿no? Supongo que es el único consuelo que puedo darte. Yo estoy comenzando a creer que tú si eres el papá- contestó ella mirándolo a la cara, tragándose todas las implicaciones de esta frase.

-Dahir, quiero que se llame Dahir. Es el nombre más estúpido del mundo pero era el nombre de mi tío... fue la persona más amable que había conocido hasta antes de ti- respondió Daryl tratando de ocultar la emoción de todo lo que ocurría.

-Pues que se llame Dahir, a lo mejor ya nunca volvemos a estar juntos porque para mí es confuso pero es buena idea que estés con tu hijo- explicó Beth muy bajo en la voz.

Daryl asintió, era una pequeña batalla ganada - ¿Qué te hizo cambiar de opinión? -.

Entonces vio como Beth se sonrojó -Tú puedes diferenciar entre el bien y el mal, algo muy difícil en estos días-.

Entonces Beth comenzó a caminar en dirección a la fiesta con Dahir en sus brazos y Daryl estaba muy agradecido con ese momento. A lo mejor nunca iba a volver estar juntos pero no porque él no lo intentara, ahora que habían cruzado esa brecha tenía que hacer que se enamorara de él de nuevo. No sabía cómo lo había conseguido la primera vez pero iba a tratar: por su familia.

A la mañana siguiente, se pidió a todos se reunieran. Rick estaba con Michonne y Carol en el pódium para hablar. Todos esperaban con ansias las noticias de parte de Rick quien se aproximó al micrófono de modo solemne-Hemos luchado por esto desde hace mucho y por fin hemos acorralado al capitolio-.

La sala se llenó de gritos de júbilo y después de volver a quedar en silencio Rick volvió a hablar para explicar -Esta será la última batalla, la que nos permitirá atrapar a la presidenta. Mañana vamos a prepararnos para el ataque y confió en que a partir de este día todo sea libertad -.

Luego de despedirse la población general Daryl fue a la sala de juntas donde esperaban ya el resto de los implicados en el ataque. Daryl vio a Maggie, Glenn, Sasha, Rosita, Abraham y Beth. Cuando Rick entró lo primero que hizo fue cuestionar la presencia de Beth pero ella fue quien respondió.

-Yo voy también, tengo que ir y ver a la cara a Deanna-.

Daryl no quería que lo hiciera por todo lo que había pasado pero sabía que no lo podía evitar, se sentó y escuchó el plan de sabotaje. Cuando por fin terminaron vio como Beth se fue con Maggie y Glenn sin darle un último vistazo. Daryl le siguió porque no podía soportar su marcha de ese modo, atrapó su mano con una de las suyas y sin decir nada le llevó a uno de los comedores que sabía que estaba vacío.

Ni Maggie o Glenn intervinieron a pesar de la sorpresa de Beth quien una vez en el comedor vio a Daryl - ¿Qué es lo que vas a decirme? -.

Daryl se aproximó a ella y sin esperar más le besó, sus dedos se clavaron un poco en los brazos de Beth y sus labios con fuerza le obligaron a que le diera apertura, su lengua exploró su interior; su pecho atrapó a la joven rubia y apenas unos segundos fueron suficientes para recuperar aire porque ya estaba de nuevo en los labios de ella enredando su mano entre los cabellos rubios.

Por fin cuando estuvo más o menos satisfecho se separó -No necesito palabras-. Dijo y salió de ahí tan rápido como le fue posible porque se iba a llevar uno de los mejores recuerdos que tenía de ella, sin dolor de por medio.

Por fin le he puesto nombre al nene y por fin pude poner un beso de los personajes aunque fuera robado, ya viene la batalla definitiva y nos acercamos al final. GRACIAS por todo su apoyo y sus votos.