Una fan en Mystc Falls 2 |TVD|

Capitulo 4:

No podía creer que estaba sentada, atada y amordazada, frente a una jodida pared de ladrillos, pintada de un color que nunca antes había encontrado tan aburrido, incluso es mi favorito, pero es que mirar todo el santo día el rojo, aburre hasta la puñetera uña del meñique.

Kai, quien era mi secuestrador, nombre real Chris, no había vuelto, y de una manera urgente lo necesitaba, razones tenia bastantes, como por ejemplo, recrear la vista, porque el muy jodido imbécil esta para comérselo. Sin embargo, necesito que me suelte para ir a mear, lose, soy una dama.

Pensaba en las muchas maneras en que Bess Martin, la antigua Bess, aquella rubia loca y sexy, que era bruja, hubiera escapado de este lugar, pero siempre llego a la misma conclusión, con un hechizo, los cuales no puedo hacer, pero si puedo sentir la maldita magia de este hermoso pueblo.

No lo voy a explicar, porque ni yo lo entiendo.

¡¿Dónde MIERDA ESTA DAMON SALVATORE PARA SALVARME DE ESTE PSICÓPATA?!

Claro, seguramente llorando a Elena Gilbert.

Grr.

La puerta resonó en el fondo de donde quiera que estuviera y por alguna razón los vellos de mi nuca se erizaron, llegue a pensar que podía ser Ian, pero no, era Chris, quien ademas de traer la boca llena de alguna mierda, traía un jodido cuchillo en la mano derecha.

Ya esta, con ese me mata.

¡Adiós mundo, no cruel!

-¿Cómo has pasado el día?- pregunto, cuando saco la maldita cinta de mi boca.

-Ni te lo imaginas- sonreí tan sarcásticamente como pude- La pared tiene mas diversión de lo que podía imaginar- lamí mis labios- ¿Vas a matarme?- alce una ceja- Porque si lo vas hacer, primero déjame morir con la vejiga vacía.

Sus carcajadas resonaron, y no se si fue mi comentario lo que lo hizo reír, o simplemente fue mi estúpida persona, pero se acerco, irguió el cuchillo frente a mis ojos, y corto las cuerdas que me estaban matando.

El me había liberado.

El merecía un beso de película.

Bueno, no lo merecía, pero me apetecía dárselo.

¡ES QUE ESTA BUENO EL CONDENADO!

-¿Qué tanto piensas?- pregunto, cruzado de brazos-¿ No querías ir al baño?- miro directamente mis ojos, y corrí

Demore mas de lo que imagine en encontrar el puñetero lugar, pero lo logra, y cuando ya podía respirar con tranquilidad, volví a la sala. Si, soy una enferma mental por no haber escapado por la ventana, pero me confundía la repentina decisión de Kai.

-¿Por qué me has soltado?- fruncí el entrecejo.

-Porque no se cambiar pañales- hundió sus hombros y me sentí malditamente ofendida.

Yo no era un bebe.

-Ven, nos vamos de compras- tomo mi mano, y tiro de mi cuerpo débil como si fuera una muñeca de trapo.

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-¿Por qué vamos al Minimarket?- pregunte, cuando note a donde nos dirigimos.

-O te callas, o te callo- sentencio, con la mirada gris dura y fría.

Si me callaba de la manera que imaginaba- besándome- seguía hablando, pero probablemente me cortara la lengua con una tijera y se las daría a los pájaros del bosque.

Resople y cerré los ojos, pero antes de que pudiera abrirlos nuevamente, estaba con una cinta en los labios y las manos atadas, el chico era mas rápido de lo que imaginaba.

Me puso de pie, tras la silla que el se encontraba sentado, meciéndose y comiendo de lo mas relajado de la vida, como si nada nunca hubiera pasado, mientras que yo moriría de hambre y de ganas de beber agua.

Entonces, sin que siquiera lo notara, una presencia se presento ante nosotros, y pude sentir como mis piernas se volvían gelatina, como mi pulso aumentaba, como mis ojos se llenaban de lagrimas y como mi corazón quería salir del pecho saltando y revoloteando.

Damon Salvatore, Ian Somerhalder, mi ex novio, tan sexy como lo recordaba, con esa mirada tan azul y tan profunda que me enamoro, estaba frente a nosotros, con los ojos puestos de lleno en Kai.

-¿No me he presentado?- ni siquiera supe lo que hablaban- Lo siento, soy Kai- dijo tan fuerte y claro, que quise correr- Y esta es Bess- me apunto

Y fue ahí, cuando esa mirada azulada como el mar, se centro en mi, y fue ahí cuando note como sus ojos no me reconocían y me miraban con asombro, curiosidad y hasta con lastima.

Damon no sabia quien era, pero lo haría recordar, costara lo que costara.

¡Maldita vida la mía!

¡Ian, voy a por ti!

¡OH!

BESS Y DAMON, UN REENCUENTRO NO DE ENSUEÑO.

Pobre la chica, enserio que aveces siento lastima por ella, le ocurre hasta lo inimaginable.

Mira la suerte de ser secuestrada por Kai Parker.

De ver a Damon luego de un par de años.

De encontrar la mirada de Ian luego de haber roto con el.

La odio. Y quiero ser ella.

¡Mentira, no la odio!

Un beso;

La chica obsesionada con vampiros .