Capitulo 11:

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Los ojos me pesaban de una manera terriblemente dolorosa, mientras intentaba abrirlos, fui recordando lo que había pasado. Joder, no, no, no. No podía ser verdad.

-Al fin despiertas- su voz- Llevabas dos días durmiendo- apareció frente a mí con un paquete de galletas- Ya pensaba que tendría que besarte como a la bella durmiente.

-Ah ella la beso un príncipe- lleve mi mano derecha a la cabeza- Y tú no eres ni siquiera un plebeyo.

-Oh por cierto- se incorporo, como si hubiera recordado algo sumamente importante- Tuve que curarte esa herida tan fea- miro mi estomago- Y no te asustes, que yo te cambie la ropa, no eres sonámbula- rió- Bonita ropa interior- tome el cojín y se lo tire en la cara- Pero si no intente abusar de ti- se excuso- Solo mire un poco.

-¿Qué has hecho Kai?- murmure, con la voz cansada y apagada.

-Bueno, prepare unos ricos huevos a la copa- mostró sus dientes- Pero yo diría que tendría que hacer una sopa, estas muy enferma.

-Sabes que no me refiero a eso- me senté, sintiendo un fuerte dolor, como una punzada en el estomago- ¿Qué ha sucedido?

-Oh bueno, ustedes pretendían salir sin mí, entonces llegue a impedir la misión, las cosas salieron mal y Damon y Bonnie se marcharon y tú te has quedado conmigo, en este infierno para siempre- se recostó en el sillón, riendo.

-No será para siempre- susurre, con tanta pena.

-Bueno, tú no tienes magia y yo tampoco- enumero- Según lo que dijiste, nadie te espera fuera- subió otro dedo- Bonnie tiene que estar en su habitación de la universidad con su amiga Caroline, mientras Damon tiene que estar amaneciendo abrazado a Elena- hizo una mueca- No, nadie vendrá por ti.

Y que digiera eso en voz alta, y sin un pelo de tristeza dolía, dolía mucho, porque sabía que era verdad. Yo había vuelto a Mystc Falls para recuperar mi historia con Damon, y las cosas habían salido como pelotas cuadras.

¡MI VIDA A VECES ES UNA MIERDA!

-Tenía pensado que esta tarde podríamos ir al centro comercial- movió sus cejas de arriba abajo, repetidas veces- ¿Qué te parece?

Me puse de pie, y subí las escaleras, con lágrimas cayendo por las mejillas y unas inmensas ganas de lanzarme desde una ventana. Pero entonces entre en el cuarto de Damon, y recordé la primera vez que hicimos el amor, la primera vez que hice el amor en la vida real, donde el era Ian y yo Bess, donde él era el actor más guapo de la serie que yo amaba y yo era una simple fan.

-¡Ahhhhhh!- grite y di un portazo.

Me deje caer en la cama y abrace su almohada. Saldría de este infierno, a como diera lugar.

|...|

Cuando el hambre me venció, y revise la herida que estaba muy bien curada por Kai, decidí bajar por algo de merendar.

Me dolía la cabeza, sentía que los ojos se me saldrían de la cara en cualquier momento y que el cerebro me explotaría, dejando las paredes de la casa llenas de sangre y pedazos de mi. Joder, que sádica me he puesto.

-Lo siento si fui muy duro- me gire un tanto sorprendida- Por lo de antes, no debí decir eso.

-Bueno, solo dijiste la verdad- apreté los labios- Probablemente nadie venga a por mí, pero tampoco lo harán a por ti- sonríe- Así que es un empate.

Volví a mi destino, intentar prepararme algo para sobrevivir, pero simplemente no podía dejar de pensar que Damon estaba entre los brazos de Elena, que quizá no han salido de la cama desde que se reencontraron, probablemente se hayan besado épicamente y yo ni siquiera aparezca entre sus vidas.

-¿Quieres que te ayude?- volví a la vida, cuando sentí el hombro de Chris chocar con el mío- Pareces un poco perdida- sonrió.

No sabía si lo que estaba viviendo era real o un simple sueño de muy buen gusto. Porque tener a Chris Wood a su merced, siendo un total amor de persona, parecía un sueño que podía terminar en pesadilla.

-¿Por qué estas siendo amable?- alce una ceja, mientras daba un salto para sentarme en la encimera- Eres un psicópata demente.

-Porque creo que tú tienes la mente tan retorcida como yo- sonrió, picando la zanahoria- ¿Te apetecen unas verduras salteadas?- asentí.

¿Yo, una mente retorcida? Por favor, lo único que quería era separar a Elena de Damon, aun si eso incluyera cortarla en pedazos para encerrarla en una caja de fósforo. Bueno, quizá era un poco retorcida.

-¿Nunca pensaste en salir de aquí por tus propios medios?-murmure, tomando un poco de agua.

-No tengo magia, no podría hacerlo- rió- Tu tampoco la tienes, así que no te crees falsas esperanzas.

-Pero la tuve- dejo de mover sus manos y me miro- Tuve magia, no entiendo porque no tengo ahora, pero tenía magia- sonreí con tristeza- Justo antes de morir.

-¿Qué?- frunció el entrecejo.

-Nada- suspire- ¿Crees que eso esté listo?- pregunte, mirando la olla con verduras que lucia de maravilla y olía mucho mejor.

-Si- apago el fuego- Soy un excelente cocinero, por si acaso- rió.

Cuando pretendía bajar, me sorprendí que Kai se acercara y me rodeara la cintura con uno de sus brazos, dejando nuestros cuerpos pegados el uno al otro y nuestros rostros a centímetros.

-La herida aun está abierta- sonrió y se alejo, para sentarse en la mesa.

¡Joder!

Lo que me espera.

Pero no te preocupes Damon/Ian, yo te seré fiel.

#Oh.

Yo no podría, si Kai se me acerca y me tienta, yo caigo en la tentación.

Pero es que esta taaaan bueno.

Pero Dios, tenemos qe serle fiel a Damon. Siempre Damon.

Muack;

La chica obsesionada con vampiros. 


Una fan en Mystc Falls 2 |TVD|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora