CAPÍTULO CINCO

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Tenía frente a mi al mismo chico que se adueñaba de mis pensamientos desde hace dos días y no sabía que decir ni que hacer así que ahora me encontraba sentada en mi cama siendo observada por el chico de ojos azules él cual  estaba apoyado en uno de mis muebles - ¿Que haces aquí? - lo miré a los ojos tratando de intimidarlo pero lo único que logre fue que enarcara una ceja y me mirara divertido.

- Vine a verte - se encogió de hombros y no pude evitar sonrojarme, el causaba cosas extrañas en mi.

- ¿Por qué? - ya sabía cuál podía ser la respuesta, tenia miedo de ella pero quería escucharla de sus propios labios.

- Porque eres mi mate , mi luna , mi todo- me miró fijamente acercándose hacia mi cama y sentándose a mi lado, y un sin fin de cosas ocurrieron en mi interior y no sabía como describirlas.

- Tal vez te hayas equivocado y no sea tu mate, puede ser - no pude seguir hablando ya que los labios del chico de ojos azules se estamparon contra los míos

Era un beso inocente, era un rose de labios que lograron despertar cosas en mi interior que no sabía que existían, mordió mi labio inferior haciendo que abriera la boca dándole acceso a ella y yo no dudé en hacerlo, y me sorprendí por ello.

El beso paso de inocente a salvaje y me apego más a él, me levanto y me puso encima de él, mis piernas rodeaban sus caderas, pero no me queje, estaba envuelta en una extraña burbuja, pude notar como nuestros sexos se rosaban haciendo que soltara un gemido y no pude evitar sonrojarme, alejé mi boca de la suya, mientras que él me miraba con una sonrisa en los labios.

Me separe de él volviendome a sentar en el sillón, no sabia que había pasado hace un momento, pero el se encontraba tan tranquilo, hasta diría que contento, me dedique a observarlo y era hermoso no lo podía negar, y no entendía como podía tener a un lobo como pareja, no parecía un mounstro como todos decían, al contrario, se veía hasta inofensivo y eso me tenia descolocada

iba a empezar a hablar para aligerar el ambiente cuando la voz del chico me interrumpe - Vengo a verte porque eres mía Jazmín, me lo confirmaste por la forma que reaccionaste a mis besos - se acercó peligrosamente a mi y junto nuestras frentes, yo cerré los ojos por inercia, me gustaba eso - Eres mía Luna y yo soy tuyo, nunca lo dudes - y sin más se separó de mi y se dirigió hacia la ventana.

Cuando cai en cuenta de lo que iba a hacer me acerque a él y lo agarre del brazo impidiendo su huida, una parte de mi no quería que se fuera- ¿Cómo te llamas? - le pregunte mirándolo a los ojos.

- Me llamo Duncan , Duncan Harries y soy tu dueño y soy también tu esclavo por lo que me quede de vida - dijo con una sonrisa en la cara - Nos vemos pronto Jazmín - y sin más depósito un beso en mis labios y término de salir por la ventana para luego desaparecer en la oscuridad dejándome con el corazón latiendo a cien por hora.

Y una de las pocas cosas que sabía con claridad era que el chico que gobernaba mis pensamientos tenía nombre y apellido .

Duncan Harries, y era un lobo, y yo su mate.

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