Vecinos| Justin Bieber y tu

Capítulo 11.

        En una hora debía ir a la casa de Hanna para escaparnos e ir al club nocturno. Estaba nerviosa, nunca había ido a una fiesta y hoy estaba por ir a un club nocturno, en dónde personas como Nash Grier están.
       Me apoyé en mi ventana que daba en dirección a la casa de Justin. Ahí estaba él y Moshe. Se los veía claro que discutían en la cocina. No se de lo que hablaban pero Justin parecía molesto.
      Seguí observando y vi como Justin tiró una silla, que salió volando a unos metros. Moshe comenzó a gritar aún más, tanto que podía escucharlo desde mi casa. Justin agarró unas llaves, y se fue.
       Aproveché la situación para ir a la casa de Bieber y hablar con Moshe, la última vez que había hablado con él fue la última vez que hable con Justin. La diferencia es que no volví a ver a Moshe nunca más.

      Toqué la puerta de la casa y un Moshe tan enfadado que prácticamente le salía humo por las orejas me abrió la puerta

-Y ahora que quieres?- Dijo enfadado hasta que me vio- ______!- Me abrazó fuerte

-Moshe- Sonreí y lo abracé- que acaba de pasar aquí?

-Ay ______- Se apoyó en mi hombro- Estoy tan cansado de él

-Que pasó Moshe?- Comencé a acariciar su espalda

-No lo puedo controlar _____- Se golpeó la cabeza- Esta tan rebelde, se escapa de entrevistas, les escupe a sus fans, tira sillas, comenzó a tomar de más, a veces le siento olor a droga- Se tocó la nuca- Él es como mi hijo sabes? Y es por eso que no renuncie, porque yo enserio lo amo a Justin, pero está acabando mi paciencia

-Si lo he visto mal últimamente Moshe- Hice una mueca- Pero no puedes estar así de estresado tú por su culpa

-Habla con él ______- hizo un puchero- Quizás lo puedas hacer entrar en razón

-Yo ya no hablo con él- Dije sería

-Porfavor ______, te lo suplico

-Suspiré- Esta bien, pero sólo por ti, y lo haré mañana porque ahora tengo una fiesta

-Una fiesta?- Sonrío- Ven dame un abrazo- me abrazó- Ahora entiendo porque la enana me tenía tan olvidado, ahora va a fiestas- Reímos

-Es una muy larga historia- Reí- Ya te voy a contar todo cuando tenga tiempo

        Me despedí de Moshe, tomé mi bolso y fui a la casa de Hanna. Ella y Emily me estaban esperando para arreglarme.

-Te quieres poner esto?- Dijo Emily mostrando un short que probablemente solo me tapa un cuarto de mi trasero

-Sigue soñando- Respondí

-Y esto?- Me mostró un corpiño que se hace llamar "remera"

-Entonces ve así, porque ya me estas cansando- Se cruzó de brazos

-Y si mejor me dejas elegir a mi?- Pregunté

-Prométeme que no te vas a vestir de monja

-Lo prometo- reí y me acerqué al placar para elegir algo.

        Soy una chica indecisa, y me probé unas miles de millones de prendas hasta que escogí un vestido negro, con unas plataformas negras y un collar fucsia.
       Me dejé el cabello suelto, me puse un poco de base, labial rojo y delineador.

-votación?- Pregunté a Hanna y a Emily que estaban sentadas en la cama, ellas abrieron los ojos como platos

-Te ves increíble- Dijo Emily

-Si Nash se te acerca le dices que no perra- Todas comenzamos a reír.

         El padre de Hanna se acercó a ver si estábamos dormidas, y habíamos puesto unas almohadas que simulaban ser nosotras.
       Esperamos una hora después de eso, y Hanna se acercó a ver si aún seguían despiertos. Por suerte, dormían.
       Nos sacamos los tacones para bajar por las escaleras, y en un silencio absoluto pudimos salir por la puerta trasera.
         Tuvimos que correr dos cuadras descalzas, y cuando visualizamos el club, frenamos.
      Cada una se colocó los zapatos y Hanna nos repartió a cada una un carnet falso.

-Y esto?- Señalé la bolsita gris que me había dado junto a la identificación

-Condones, no quiero a ninguna embarazada- Comenzamos a reír las tres- Escuchen bien todo, son aproximadamente las 1 a.m, a las 5,30 a.m tenemos que estar todas en la puerta principal del club- Todas asentimos- Si a las 5,31 a.m alguna no está allí, me iré, y les mentiré mañana a mis padres que se sentían mal.

       Comenzamos a caminar como maduras hacia la puerta del club. Él club era enorme, y brillaba. Vi a Drake, el rapero en la puerta y comencé a gritar en voz baja. Amo a Drake, su música es la definición de música buena.

-Le iré a pedir una foto- Dije, y cuando intente caminar Hanna me agarró del vestido

-Tenemos que parecer maduras idiota, no puedes pedirle una foto a un famoso ahora

-Esta bien- Me volví a colocar en la fila.

      Poco a poco la fila avanzó, y cuando fue nuestro turno me estaba comiendo las uñas por miedo a que nos descubran. Por suerte, el guardia nos devolvió las identificaciones y nos hizo una seña con la cabeza para que pasemos.
       Cuando yo estaba por pasar, la última de las tres, colocó su mano y me detuvo

-Pasa a a algo?- Dije nerviosa

-Mi número- Me guiñó el ojo y me entregó un papel, yo solo sonreí

        Cuando pase al club pude volver a respirar. Esto era un descontrol. El 90% de las personas que había ahí estaban borrachas.