Parte 6

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-Oh- dijo la madre de Brei, luego puso una sonrisa en su rostro para tranquilizar la expresión aterrada del rostro de su hijo- Entonces... ¿lo conozco?

Brei por poco y no grita de alegría, cuando dijo que era un él lo que se esperaba era una reprimenda que se escuchara en toda España pero los rostros sonrientes de sus padres le daban a entender que estaba equivocado.

-¿No están enfadados?- preguntó de todas maneras para asegurarse.

-¿Por qué lo estaríamos?- dijo su padre alcanzando su mano a través de la mesa- quiero que sepas que para nosotros no hay nada más importante que tu felicidad y bienestar.

-Gracias, en serio gracias, estaba tan nervioso. Y madre, no creo que lo conozcas, ni siquiera va a mi instituto. Lo veo en el autobús, hace poco supe que es amigo del novio de David.

-¿David con novio?, vaya, que de misterios que se traen, debes decirle a él que también nos lo presente.-la voz de su madre era de reproche pero su rostro brillaba.-Ese chico es como de la familia.

-Mujer, no seas tan intrusa.-dijo su padre riendo.

-Podrías invitarles a pasar el fin de semana.- sugirió ignorando las palabras de su marido- así los conocemos y, ya sabes, podrías acercarte más a él.- hizo unos movimientos graciosos con sus cejas.

-¡Mamá!

-Sólo era una idea.- se excusó.

-Como sea, me tengo que ir, los veo más tarde. Los quiero.- tomó su mochila y con un movimiento de mano se despidió y desapareció por la puerta.

o.o

David se encontraba sobre el pasto retorciéndose de la risa, es que sentía que acababa de leer lo más gracioso de la vida y si le agregamos la cara colorada de Brei en estos momentos tratando de calmarlo, sus carcajadas aumentaban. Breixo observaba a Cristian y le reclamaba en silencio que le ayudara pero el chico también reía y levantaba sus manos al aire en símbolo de "aquí yo no pinto nada".

-Chicho,- trataba de hablar Celopan en medio de la risa- ¡Te han aconsejado que lo violes! Y que le chupes...-tomó su celular para corroborar lo que iba a decir a continuación- ¡un ojo!, vaya imagen mental me he metido.

-Mi máh, deja de reírte.

-Es tu culpa por no hacerme caso y seguir publicando tu vida.

-Y lo voy a seguir haciendo.- le enseñó la lengua e hizo unas cuantas morisquetas.

-Más encima lo saben tus padres, lo podrás violar con su consentimiento, en especial el de tu madre, ella es bastante... particular.

-También les conté de ti. Quieren conocer a Zeus.

-¿Qué?, yo quería dar la noticia, en todo caso iré pronto a tu casa.

-Les estaremos esperando.

o.o

Zeus y David hoy iban a la casa del primero y era en total sentido contrario al de Brei. Perfecto, se iría solo. Estaba acostumbrado a hacerlo pero se iba a encontrar con un chico que le coloreaba las mejillas de sólo mirarlo.

Llegó a la terminal y una de dos: 1) se había demorado demasiado en el trayecto; 2) el autobús estaba adelantado en el recorrido.

El chofer cerraba cuando él llegó e hizo señas para que se detuviera y le llevara.

Subió, pagó, todo muy bien, miró el interior de la máquina buscando por un asiento vacío. Parecía no haberlo pero luego cerca del fondo, en uno de los asientos dobles, el del pasillo estaba desocupado. Caminó allá, un chico con auriculares miraba por la ventana, su bolso sobre el asiento que pensaba ocupar. Le tocó el hombro, sabía que las palabras no servirían, podía escuchar la música que se reproducía en los cascos.

El chico, asumiendo para que le "llamaban", apartó el bolso y lo puso en el piso frente a él, Brei se sentó y volteó a ver al muchacho para agradecerle, lo que no esperaba era que ese chico, fuera Sergio.


Hay un chico - BrollieDonde viven las historias. Descúbrelo ahora