Abrí la boca para hablar pero, Gloria levantó la mano y cerró los ojos, respirando fuertemente. Estaba totalmente despinada y su cara demasiado roja. Llevaba una bata gris que había sacado, seguramente de mi armario y estaba descalza.
Caminé despacio hasta estar a unos tres metros de ella.
- "¿Donde coño estabas, Maria?" -gritó mientras se ponía mas roja de lo que ya estaba. Ahora tocaba el momento interrogatorio y no era algo que me apeteciera.
- Ni que fueras mi madre, Gloria -refunfuñé mientras me cruzaba de brazos y la observaba mirarme con cara de asesina-. Dios Gloria Maria, solo tuve una pesadilla y salí a dar una vuelta -le solté. Su rostro se aligeró pero aun estaba enfadada.
Me senté y volví a mirarla directamente a los ojos. Ninguna de las dos hablábamos y lo único que se escuchaba era la respiración y de vez en cuando una mosca porculera.
- ¿Solo eso, Mery? -me preguntó. Puse los ojos en blanco mientras asentía con la cabeza. Sabía que no se lo creería pero lo había dejado estar ya, así sería todo mucho mejor.
Me levanté de nuevo y fui a preparar el desayuno. Observé que en el fregadero ya había un plato y una taza, me extreñé al principio pero luego pensé que Gloria ya había desayunado.
Me preparé un vaso de leche de soja y tome unos cereales de maíz que me encantaban desde que tenia uso de razón. Gloria estaba bastante enfadada ya que se había ido al dormitorio y no quería salir.
Una vez acabé de desayunar, entré para vestirme y me la encontré rebuscando algo en un cajón de la mesita de noche.
- ¿Que haces? -abrí muchos los ojos cuando la vi fumando un cigarrillo que seguramente había sacado del cajón.
Me senté a su lado y yo también comencé a fumar.
Al cabo de un rato, cuando terminamos el cigarrillo, nos quedamos mirándonos y soltamos una carcajada, acompañada por un fuerte abrazo.
- "No sabes lo mucho que te puedo llegar a querer tonta" -me dijo. Pelearme con Gloria era algo bastante normal aunque no durabamos ni diez minutos sin hablarnos.
- No mas que yo pava -dije para después darle un beso en la frente. Nos levantamos y comenzamos a rebuscar en mi armario para vestirnos e ir a clase.
Gloria acabó cogiendo una blusa blanca con cuello de barco, acompañado por unos pantalones negros, en cambio, yo opte por unos vaqueros azules y una camiseta blanca de tirantes que me llegaba hasta el culo y estaba abierta a los lados. Ambas llevábamos unas deportivas a los pies.
******
Al cabo del rato ya estábamos peinadas y maquilladas para ir a las facultades correspondientes de cada una.
- ¿Nos veremos a las tres? -le pregunté mientras salíamos de mi casa.
- "No creo que pueda, tengo examen de física el viernes y creo que debería estudiar -me dijo mientras agachaba la cabeza. Ella era una empollona de las ciencias y le encantaba tomar batidos de chocolate mientras que estudiaba y, antes, darme la vara con todas las formulas y numeritos que tenia que estudiar.
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You're mine
Kısa HikayeEsta historia, a demás de ser la primera que escribo aquí (tened piedad conmigo), trata sobre mi gran miedo que, ya vereis cual es...