Stranger »Larry Stylinson«Completa.

9.- Investigación.

"¡Harry! ¡Despierta!" Cindy me sacudió en la cama, "Hay un hombre en el porche, creo que es una celebridad o algo"

Hice algunos ruidos extraños y la empujé para hundir mi cara en la almohada. La noche pasada fue trágica, no pude dormir pensando en lo que el Sr. Tomlinson me había pedido. Además, también estaba el caso de no poder ir a Homes Chapel a visitar a nuestros padres. Iba a ser un día agotador en Ulsan, estaba seguro de ello, y necesitaba mis ocho horas. Pero Cindy chillaba y chillaba como un disco rayado.

"¡Harry! ¡Busca tu cámara!"

"¡Basta  Cindy!" Logré decir antes de acurrucarme al otro lado de mi cama. Durante un tiempo, sólo hubo silencio, y pensé que se había rendido.

"Si no despiertas," Cindy habló en un tono escalofriante, "Voy a contarle a mamá sobre el incidente del robo."

Mierd- "¡Agh! Te odio." Dije mientras me sentaba a regañadientes y me palmeaba repetidamente la cara. Ella sólo usaba esa amenaza cuando necesitaba algo importante, así que la celebridad allá afuera realmente debió haberla impresionado. Cuando estábamos en el colegio, nuestros padres tuvieron que salir a la ciudad para un trabajo, por alguna razón mis amigos se enteraron, y todos fueron a nuestra casa y armaron una fiesta salvaje. Al final, un par de jarrones y muebles quedaron arruinados y cuando nuestros padres regresaron, la única excusa con la que pude salir fue que había ocurrido un robo. Nunca llegué a contarles la verdad, ni siquiera hasta el día de hoy, ya que incluso el marco de la fotografía de su boda estaba roto - entre otras cosas.

"Levántate Harry, lávate la cara por lo menos." Dijo mientras me empujaba hasta el baño.

Después de un segundo de echarme agua en la cara, todavía estaba medio dormido, "¡Vamos Harry, muévete!"

Seguí moviéndome tan lento como una tortuga sólo para molestarla, "Joder, Cindy. Cálmate."

"Te vas a comer tus palabras cuando lo veas, calmarse no es una opción." Dijo.

Todavía me estaba secando la cara con la toalla cuando abrí la puerta. Y Cindy tenía razón, calmarse no era una opción. Louis estaba de pie, girando las llaves de su coche con el dedo, llevando su característica sonrisa seductora, "Buenos días." Dijo.

"Lo eran." Molesté, "Hasta que llegaste."

Sentí a Cindy pellizcarme sutilmente a un costado. "No le hagas caso." Dijo ella, "¿En qué podemos ayudarte?"

Rodé los ojos por el efecto que Louis tenía sobre Cindy – y sobre todo el mundo en general. Yo no era quien para hablar, pero ¿qué exactamente le veían todos a este tipo?

"Cindy, te presento a mi jefe, Lou- el Sr. Louis." Moví mi mano vagamente, "Esta es mi hermana, Cindy."

Podía notar que Cindy estaba haciendo volteretas internamente, una gran sonrisa plasmada en su rostro mientras le hacía señas a Louis para que entrara, "Por favor pase señor." Cindy le hizo sentar en el sofá, limpiando desesperadamente el desastre alrededor. Casi disfruté verla en pánico.

"Voy a hacer café." Dijo Cindy, luego se volvió hacia mí, "Harry te va a en-tre-te-ner." No pudo haber enfatizado más la palabra.

Tan pronto como se fue, Louis y yo comenzamos un duelo de miradas. Me miró de pies a cabeza, y de pronto me di cuenta de que todavía llevaba puesta mi pijama – el pijama que había tenido desde que estaba en secundaria. Pistola, boca, ahora.

"Dijiste que me llamarías para decirme a qué hora saldríamos." Crucé los brazos, tratando de ocultar el gran oso de peluche en mi camisa.

"Me di cuenta de que no tenía tu número." Dijo simplemente.