Cap 26

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Estabamos en dos diferentes esquinas, mis ojos contemplaban su figura expectante, sus manos iban y venían de su pelo a su cara mientras sus pies las acompañaban con un va y ven de derecha a izquierda.

Teníamos ya cinco minutos de haber entrado a la casa de Harry, nos habiamos atorado aquí, en la sala, justo al lado de las escaleras donde sabía que no tenía que ir, esto lo hablaríamos, así se arreglaría, no nadamas enredandonos y haciendo como si nada pasara al siguiente día aunque los dos sabíamos que seguiríamos teniendo rencor el uno con el otro.

Sentía que ninguno de los dos ibamos a hablar, nos la pasaríamos merodeando de un lado a otro entre su sala, asi que tome aire, me armé de valor y me quedé estática junto a su chimenea teniendo su espalda de  frente.

-Edward...- mi voz causó que diera un pequeño salto y se girara lentamente.-Solo tengo una pregunta y quiero que tu respuesta sea lo mas sincera posible- mis ojos hacían conacto con los suyos y mi respiración se estaba tornando un poco acelerada por la adrenalina que recorría en todo mi cuerpo, él  solo se dedicó a asentir y trataba de acortar los cuatro metros que habia de distancia entre nosotros con sus pasos rumbo a mi. -¿Porqué lo hiciste?- y se detuvo.

Sus manos fueron a enredarse con su cabello mientras sus ojos hacian contacto con sus botas. Sabía que tenia que darle tiempo para pensar, el alcohol aún  seguía en su sistema, la cuestión aqui era no desesperarse y aceptar la respuesta que saliera de su boca, así fuera la mas dolorosa de todas, si no era favorable, con gusto lo dejaría libre,  como dicen, si lo amas, dejalo ir y esperaría por un tiempo para ver si es que regresaba a mí, por otro lado, si la respuesta que salía de sus labios era favorable, tendríamos que encontrar una manera de seguir, ya estabamos conscientes de que la distancia nos perjudiaba de una manera irreal.

-Me llevaste de vuelta a la realidad- mis pensamientos se esfumaron como una nuve de humo ante mí para darle paso a una vision de Harry frente a mi. -Yo...- tocó mi mano con la suya y ahí me di cuenta de la cercanía de su cuerpo.-Lo siento- sus ojos se cerraron y su mano libre busco la parte trasera de mi cuello jalandolo para poder juntar  nuestras frentes.

Mi cuerpo estaba echo un mar revuelto de sentimientos, podía sentir sus manos sobre mi junto a su disculpa pero sentía que mi sangre hervía por todo mi ser, hasta el mas pequeño rincón era inundado por ese sentimiento, como podía perdonarlo así nada más, si me había dejado sola en el momento mas difícil de toda mi vida, sentía que estaba traicionando a mi madre, pero a la vez, también a mi.

Aquel hombre que estaba frente a mi tenia dos cosas a su favor, la primera, el me preguntó si me importaba que el se regresara y yo solo dije que no habia ningún problema;la segunda, lo amaba con toda mi alma que seria capaz de dar hasta mi vida por el, pero al final del día la conclusión era la misa, ¿Con que cara podía reclamarle?.

Me aleje dos pasos de él porque la pared me impidió seguir, aunque quería escapar y alejarme de su cercanía no tenia opción mas que  tomar todo el aire que podía para poder empezar.

-Harold, no es así se simple-sus ojos tocaron los míos y me partió el corazón darme cuenta que mis palabras habían echo que sus ojos se cristalizaran.

No me podía echar para atrás, era ahora o nunca, no iba a dejar esto inconcluso con mis palabras encerradas en mi mente, simplemente no, me rehusaba a esa idea.

-No sabes por él dolor que pasé y tú...- mi mano derecha borro una lágrima traicionera que salia de mis ojos y volví a mirarlo fríamente al escuchar su voz.

-No Elisa, ni lo quiero saber, por eso me fui-espetó frente a mí. -Me hiciste regresar a la realidad y no me gustó, toda tú...- sus manos iban y venían de arriba abajo señalando mi cuerpo.-...me haces pisar el suelo y darme cuenta de las cosas y yo no puedo con eso, simplemente...-mi voz se quebró sus ondas para que me escuchara.

-Te pierdes en el alcohol y en tu fama- mi mirada de decepción lo atravesada sin ninguna sutileza-Sigue así Harry...-una risa amarga salió de mi boca.-espero que no sea tarde cuando te des cuenta de lo que perdiste- mis palabras habían salido de la nada.

El coraje me llevo a decirlas y ya no había manera de retractarme, mi corazón estaba a punto de salirse de mi pecho y la sangre estaba en mis pies,  mis ojos no podían creer lo que estaba pasando, la adrenalina que sentía era inmensa y no tenia idea de lo que debía hacer.

-No Amor- su rodilla derecha toco el piso antes que la izquierda.

Sus manos estaban enredadas entre mis piernas. Me encontraba con un nudo en la garganta y las emociones alborotadas sin saber algo exacto.

Minutos atrás me había dicho que por mi se sentía como una persona normal, que yo, completamente mi persona, lo traía a la realidad y que no estaba completamente de acuerdo con eso, por lo menos ahí me había quedado en la historia y ahora, lo tenía frente a mí, arrodillado sin querer dejarme ir al escuchar mis palabras.

Las nauseas se presentaron a causa de los nervios y no saber que demonios era lo que estaba pasando entre nosotros, de estar con esta incertidumbre que me quemaba viva y el sin decir las cosas claramente.

Tome sus manos entre las mías y puse toda mi fuerza para poder levantaron y que estuviera parado frente a mí, no había necesidad de que el hiciera eso, simplemente teníamos que hablar y así arreglariamos las cosas, no quería que se menospreciara ni hiciera ese tipo de cosas.

-Harry- mis palabras salieron justo al lado de su oído mientras abrazaba mi cuerpo.

-No amor- ejerció mas presión en mi cuerpo y continuó- La culpa es mía y tengo que aceptar lo que tu decidas pero no puedo dejarte ir sin antes luchar por ti- mis manos recorrieron su abdomen hasta tocar la parte de atrás de su cuello.

Sus ojos esmeralda aun seguían cristalinos y yo me volvía a quebrar ante ellos.

-Tu vives aquí, yo solo estaré unos meses mas y me iré, si no pudimos con esto por la distancia no le veo caso que vayamos a intentarlo de nuevo- mi mano derecha jugo con sus rulos por un momento y mi boca le dedico una sonrisa para tranquilizarlo.-No creo que vayamos a poder mantener esto y lo sabes-su frente tocó la mía y con el dorso de mi mano de nuevo limpie una lágrimas traicionera de mi rostro.

-Mi amor, todo tiene solución- sus palabras me desconcertaron, obviamente yo no le veía ninguna razonable.

No me podía venir a vivir aquí porque los negocios de mi padre estaban allá y terminaría administrandolos en algún momento, toda mi vida , todo lo que soy pertenecía a otro país, mi mente estaba de nuevo desorientada y mi corazón se aceleraba al ver como Harry agarraba mis manos entre las suyas mientras me miraba completamente serio.

No sabia que diría, ni que iba a hacer o si su solución seria la misma que la mía, hacernos a la idea que teníamos fecha de caducidad.

-Harry...- su dedo índice toco mis labios y me quede callada al instante.

Sus labios formaron una hermosa sonrisa después de sacudir su cabeza varias veces, como si lo que me iba a decir estuviera completamente descabellado. Toco mi rostro y me sostuvo la mirada por unos segundos para que yo después me perdiera en un mundo alterno al escuchar las palabras que jamás pensé que saldrían de su boca.-Cásate conmigo-.

Undercover || H. S.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora