La Clave: Lazos de Sangre.

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 19 de Septiembre, 2019.

Malva. 

   Skylar Monroe, ese es el nombre de la chica que ha protagonizado los telediarios el día de hoy.

   El noticiero matutino muestra la desastrosa escena que protagonizan sus padres al hablar sobre la muchacha, lagrimas de desesperación y angustia bañando sus rostros, bolsas negras bajo sus ojos; un escalofrío me recorre entera al escuchar la extraña explicación sobre su desaparición. Me remuevo inquieta y lanzo la mochila a un lado del sillón en el que me encuentro, a la par que lanzo una que otra mirada sobre mi hombro, para comprobar que mamá aún permanece hablando exhaustivamente por teléfono; sobre su rostro encontrándose una fina línea y una expresión de preocupación que me pone los pelos de punta. Aparto la mirada para fijarla en el televisor frente a mí, mi concentración desenfocándose por segundos, no obstante me obligo a concentrarme en las noticias y no en los susurros de Elis en la cocina.

   "Está madrugada el pueblo de Forest ha sufrido otra terrible desaparición, una vez más la villa se tiñe de gris y los corazones de los feligreses de tristeza.

   Durante altas horas de la noche se ha reportado la desaparición de Skylar Monroe, quien tras haber sido vista por última vez hace 24 h, se suma como la novena persona desaparecida en este mes de septiembre. La joven a quien retratan como una chica alegre y extrovertida, fue vista en la salida del instituto antes de su desaparición; personas allegadas a su entorno describen que la muchacha se hallaba exaltada y nerviosa, como si temiera por algo, mejor dicho, como si supiese que se desvanecería.

   El día de hoy, jueves 19 del presente mes, sus padres la han reportado en la comisaria correspondiente del condado, fichándola como la sexta mujer en desaparecer, cuatro de los restantes tratándose de hombres. Cabe mencionar que sus progenitores no han tenido algún tipo de comunicación con la joven desde hacía más de una semana, puesto que se hallaban en un viaje relacionado a su trabajo como abogados.

   Sin duda una espantosa ola de desapariciones azota a nuestro querido pueblo, marea que solo parece traer consigo la desesperación y el odio hacia quienes han sufrido el arrebato de un familiar.

   El sherrif del condado se dedicara a realizar una investigación exhaustiva..."

   Observo estupefacta la pantalla negra frente a mí, aparato que se ha oscurecido de repente, imposibilitándome el escuchar lo último que estaba por decir la morena del noticiero. Confundida y con los pensamientos volando hacia la chica de un curso mayor, me giro en dirección a Elis, quien se encuentra con el entrecejo fruncido; su teléfono encontrándose sobre su mano derecha, en este destellando el nombre del señor Monroe. Trago grueso, ya sabía de qué iba su repentina llamada durante esta mañana y no me gustaba el camino que parecía ya haber tomado.

—Sabes que no me gusta que estés viendo esas noticias, cariño— Musita, su mirada bajando al aparato sobre sus manos, para teclear rápidamente y volver su mirada nuevamente a mí; mis dientes mordisquean mi labio inferior, el tono despectivo y desinteresado que usa para referirse a las desapariciones, sin pasarme desapercibido.

—Tu mañana tienes que estar llena de cosas buenas, Malva, no de hechos contrarios que puedan opacar tú día.

   Asiento y me trago las palabras que queman por salir de mi boca. No me gustaba que mamá tratase de minimizar la cosas que acontecían a su alrededor, eso y muchos defectos más eran los que a veces me hacían pensar que no era mi madre, no cuando parecía que solo le importara su bienestar, no cuando parecía que dejarme de lado durante días por trabajo era lo ideal. No cuando ahora estaba insegura de los días que estaban por venir.