Sexo con el amante de Mamá

~CAPÍTULO 52~ Paternidad...

Caminé despacio hasta llegar atrás del sofá, sin hacer ruido me incliné y al descuidado reposé un beso en su cuello, haciéndola tirar la piza que tenía en las manos, girando asustada y encontrándose con mi rostro a centímetros de los suyos.

-Kyuhyun—susurró muy despacio—

Sonreí manteniendo los la mirada fija sobre la de ella, se veía tan hermosa pero tan débil... la había extrañado tanto tiempo. ¿Cómo es que he podido sobrevivir sin ella tanto tiempo?—

-Te encontré—Dije muy despacio-- ¿Creíste que te ocultarías de mi toda la vida?—Me incliné hacia delante para intentar besarla, pero ella se apartó, manteniendo aún, su expresión de sorpresa.

Rodeé el sofá, tranquilo, tomando asiento a su lado. Ella seguía sin decir palabra alguna... podría quedarme observándola durante horas... ella estaba aquí, conmigo.

Bajé la mirada hasta su enorme vientre, y ella al percatarse de ello, bajó las manos y movió el gran sweater que llevaba puesto como tratando de cubrirlo—

-Está muy grande como para que lo ocultes ¿No crees?—Arqueé las cejas. Ella bajó la mirada mordiéndose el labio y encogiéndose de hombros—

-Vete—Pronunció al fin, rompiendo su silencio—No te quiero ver... vete con tu esposa—

-No me casé—Respondí suspirando. Apoyé mis codos en las rodillas y observé al frente, buscando las palabras para empezar a buscar respuestas a mis tantas preguntas— ¿Por qué te fuiste si te dije que me quedaría contigo? ¿Por qué solo te fuiste tratando de desaparecer de mi vida?—

-Porque así lo quise—Contestó sin preámbulos—Y no he cambiado de opción. Por favor. Vete—

-¿Cuántos meses ya llevas en estado?—Cuestioné sintiendo el corazón un poco incómodo ante la idea de las respuestas que me leve conmigo el día de hoy... ¿Y si no soy el padre?—

-Eso es algo que no te importa—Contestó levantando el tono de voz, sonando más molesta e intentando levantarse, apoyando sus mano en sus espalda para ayudarse a ponerse de pie. Me levanté y la sujeté de la mano para ayudarla a ponerse de pie, observando su enorme vientre—

-¿Ocho meses, o casi ya nueve?—Pregunté al notar que tenía casi el mismo tamaño que el vientre de Tamara—

Ya te dije que eso no te importa—Contestó nuevamente, molesta y dándome la espalda para empezar a alejarse.

-Necesito saberlo—La tomé de la muñeca y la detuve—Necesito saberlo ¿Acaso soy yo el padre?—

-No—Respondió escupiendo la respuesta—No eres el padre y quiero que te largues, ¡Que me dejes en paz!—Ella se veía alterada, demasiado, pero podía notar la tristeza en sus ojos al empezar a formarse lágrimas que trató de ocultarla, pero para su mala fortuna, las capté antes de limpiarlas— Déjame en paz Kyuhyun... déjame en paz—

Entonces dime ¿Quién es el padre?—Sujeté ambas manos para que no se marchara y poder obligarla a responderme—Dime quien es el padre—Estaba seguro que solo me había respondido de ese modos porque estaba enfada. Sin embargo, esa respuesta no me convencía como para dejarla a irse nuevamente—

-No te importa—Respondió moviendo sus muñecas para intentar zafarse— ¡Eso es algo que no te importa!

-¡Me importa!—Me apegué a su cuerpo para abrazarla con delicadeza, mantenido un poco de distancia al sentir su enorme vientre que nos separaba... ¿Res mi hijo o hija? ¿Cómo pudiera saber que soy el padre del niño que llevas dentro?— Por favor (TN)... dime lo que quiero oír—Susurré muy cerca de su labios—Dime que ese niño es mío, dime que estas esperando un bebé mío—