"-Con su permiso señoritas- dijo el primer chico al momento en que se retiraban con una sonrisa hacia Clare y Lilly. ¡Esa voz! Clare había escuchado esa voz en alguna parte...pero ¿Dónde?..."Por alguna razón esa voz le había echo entrar en un pequeño trance, esa voz la tenía tan grabada en su mente, aunque no sabía el por qué.
-Oye, Clare ¡Vuelve a la vida!- decía Lilly agitando su mano frente a la máscara de Clare.
-¿Eh?...ah si, perdona es que...esa voz la he escuchado en alguna parte, y por alguna razón me parece muy familiar-
-¿Te refieres a Mirai? Hmm es nuevo aquí, llegó hace unos meses- decía la chica de cabello rizado mientras observaba como los dos chicos se alejaban junto con el resto del Coliseo- a mí la verdad siempre me ha parecido raro. Oye ya deberíamos ir a nuestro recinto, solo hemos quedado nosotras dos y ya está por ponerse el sol-
-¿Acaso le tienes miedo a la oscuridad caballero de plata?-decía Clare mientras caminaba y reía.
-¡Por supuesto que no! ¡Oye espérame!- decía Lilly mientras la alcanzaba.
-¿A ver quién llega más rápido al recinto? -la retó Clare.
-Oye niña , al menos yo ya estoy grandecita para andar con juegos infantiles-
-¿Eso es un no ?
-Eso es un...¡No podrás alcanzarme nunca caballero de bronce!- decía Lilly al momento de salir corriendo a toda la velocidad que a sus piernas le era posible.
-¡Oye!- gruñó Clare mientras la seguía.
-¡Eres demasiado lenta!- decía Lilly mientas volteaba a ver a su amiga que aún venía varios metros lejos.
-¡Lilly!....voltéate-pero ya era demasiado tarde, la chica había tropezado a cuerpo completo con algo, o más bien con alguien.
-Serás torpe caballero de plata- decía Clare para sí misma mientras alcanzaba a su amiga.
-Hmm, creo esta no es exactamente la forma que me gusta que las chicas se acerquen tanto a mi-decía el chico mientras masajeaba la parte trasera de su cabeza.
-¿Eh?...¡Milo-sama! Lo siento mucho, de verdad eeh...perdone mi torpeza ¡por favor!-decía Lilly mientras se levantaba a toda prisa y seguía disculpándose con el caballero dorado de Escorpio.
-No hay problema...Hmm ¿Lilly cierto?- decía el joven con una sonrisa.
-Así es, no volverá a pasar- decía la chica bajando la mirada.
-¿Lilly estás bien?- decía Clare ahogando una carcajada.
-¿Ah? Si si estoy bien- ¿y a esta chica que le pasa? Decía Clare para sus adentros.
-Oye, la chica de cabello castaño, ¿Eres nueva aquí?-
-¿Es a mi?- decía Clare señalándose a sí misma.
-Aparentemente si- decía Milo mientras sonreía.
-Ah si, Clare, caballero femenino de la Corona Boreal- decía la chica con orgullo.
-Clare eh...así se llamaba la noviecita que tenía nuestro inocente caballero de Aries hace algunos años...Espera...¿Eres tú la niña que Mu salvó hace años?- dijo Milo sorprendido.
-1. No era su "noviecita" y 2. Si, soy yo-
-Vaya, qué bueno verte de nuevo, lastima que Mu en estos momentos no se encuentra-
-Con respecto a eso, ¿Sabes algo de él? -preguntó Clare con más interés.
-No, nadie sabe de su paradero, al menos no por el momento-
-Ah-
-Bueno mis bellas damas, es momento de retirarme a mi casa, nos vemos- y con una sonrisa y un guiño, el apuesto caballero de Escorpio emprendió camino hacia la octava casa mientras las dos jóvenes caballeros caminaban hacia su recinto.
-Ya, ya puedes soltar los suspiros que quieras- decía Clare al momento de soltar una carcajada.
-¡No te burles! ¿vas a decirme que tú no lo ves atractivo?- decía la caballero de Grulla.
-Prefiero guardarme el comentario- y si, aunque era bastante atractivo, Clare no pensaba admitirlo, además no era su tipo, no es que ella tu viera algún "tipo de hombre" pero al menos sabía que él no lo era.
-Ah si, había olvidado que tú solo tienes ojos para el caballero de Aries- y ahí va de nuevo.
-Sabes , no sé que es más frustrante, el hecho de que no sepamos dónde está, o la constante insistencia sobre ese tema- decía una acalorada Clare.
-Ya ya perdona, solo espero que no pase contigo lo de "lo que se empieza jugando termina gustando"-
-No lo menciones más y verás que no pasará-
-Qué aburrida eres caballero de bronce- decía Lilly acercándose a la puerta de su casa.
-Hmm...oye, ¿No es esa la chica que estaba luchando ahora por la armadura de Lira?-
-¿Eh? ¿Dónde?-Clare señaló un pequeño graderío de madera un poco lejos de ellas, donde estaba el campo de entrenamiento- ah si , Akire creo que era su nombre.
-Está sola, ¿Por qué no la invitamos un rato a casa ? Tal vez se queda a cenar- decía Clare.
-Oye oye, ¿Quieres que nos mate? Esa chica-señalándola- Además de ser un caballero de plata, es aprendiz de Afrodita de Piscis-
-¿Y eso qué? Sigue siendo una persona ¿no?-
-Claro, una persona con la sangre envenenada- Pero Clare la ignoró por completo, sabía lo que se sentía estar sola, y aunque ese sentimiento había sido reprimido hace mucho, tampoco le gustaba ver la soledad a su alrededor- Si regresas con una pierna rota no será mi culpa, yo te lo advertí- decía Lilly mientras entraba a su casa.
La guerrera de la Corona Boreal se acercaba a paso lento hacia la chica de cabellos negros, su aura era un poco agresiva, pero a la vez no era malvada.
-Hola-dijo Clare quedando unos cuantos pasos lejos de ella.
-¿Y tú? ¿Quién eres niña?- decía la chica mientras se acomodaba el largo mechón azabache que tenía en el rostro.
-Clare de la Corona Boreal- decía mientras extendía la mano, pero al no recibir respuesta la retiró.
-Oye niña , si vienes a decirme que juguemos con muñecas un rato puedes irte, tengo cosas más importantes que hacer-
-¿Ah sí? Como por ejemplo, ¿Pasarla aquí sola mientras anochece?- decía mientras se sentaba a la par de la otra chica.
-Al fin y al cabo ¿a ti qué te importa?, ¿Me conoces o que?-
-No, pero no es malo hacer amigas, o al menos compañeras de guerra-
-Soy Akire de Lira- decía la chica mientras miraba a otro lado pero extendía su mano hacia Clare.
-Un gusto, Akire-le tendió la mano también- ¿Quieres cenar con nosotras? No se lo que cenaremos pero al menos tenemos comida- decía Clare en tono de broma.
-Hmm...no tengo nada mejor que hacer, así que vamos- se levantó, luego la siguió Clare, llegaron a la pequeña casa de Lilly, aunque al principio esta desconfiara de la pelinegra, al pasar el tiempo fue teniéndole un poco más a de confianza, cenaron y luego se quedaron sentadas en el pequeño juego de comedor que había en la casa.
-A ver Akire, ¿A ti te gusta alguien? Y no me digas que no, no como esta de aquí al lado-señalando a Clare.
-Hmm...eso es personal-
-¡Oh vamos! Estamos en confianza- decía Lilly en tono divertido.
-A ver , dime tú primero entonces-
-Hmm...es...el caballero dorado de Escorpio-
-Aigh, y eso que no viste la vergüenza que pasó ahora- decía Clare mientras reía.
-¡Shh! No me recuerdes mi desgracia-
-Yo que tú estuviera contenta, caer encima de un dorado, y mejor aún si tiene esa apariencia- decía Clare soltando otra carcajada.
-Oye esas no son las palabras que debería usar la aprendiz de Camus de Acuario-decía Lilly riendo también- el caballero de Acuario vendrá a halarte las orejas por decir semejantes cosas de su amigo-
-Lo dudo-
-Bueno ya te dije, ahora tú dime- decía Lilly refiriéndose a Akire.
-Eh...Saga de Géminis- dijo la chica bajando la mirada.
-Vaya, tus gustos no son nada malos- decía Lilly.
-Oigan ustedes, somos caballeros de Athena, y nuestra misión es proteger a la diosa , no enamorarse de sus caballeros-dijo Clare.
-Oye niña, nosotras no tenemos la culpa que el caballero de Aries esté desparecido- se burló Lilly.
-¿Así que a ti te gusta el caballero Mu de Aries?- esta vez fue Akire quien hizo la pregunta del millón.
-No- dijo Clare de inmediato- Somos amigos de la infancia, además, el caballero Mu es demasiado inocente como para querer entablar algún tipo de relación con una mujer-
-¿Eso quiere decir que si su actitud fuera diferente, si te gustaría?-
-¿Qué? ¡No! Aigh, sabes que, mejor me callo- Lilly y Akire rieron ante la actitud infantil de la caballero de la Corona Boreal.
-Bueno "compañeras de entrenamiento", me retiro, mañana será un día difícil- dijo Akire mientras se levantaba de su silla.
-¿A qué te refieres con "día difícil"?- dijo Clare.
-Los caballeros dorados han tomado la tarea de entrenar a las caballeros femeninos de Athena, mañana es el turno del caballero de Leo, Aioria- dijo Akire.
-¡Es verdad!, deberías agradecer a los cielos que no estuviste cuando el señor Aldebarán nos entrenó- se quejaba Lilly.
-¿Por qué lo dices?-
-¿Alguna vez has escuchado el dicho sobre la piedra de Sísifo?- preguntó Akire.
-Eeh...si-
-Pues créeme, la piedra en el entrenamiento era muy literal-
-¡Fue espantoso!, jamás quiero volver a vivir una experiencia así- decía la caballero de Grulla.
-Bueno ahora si las dejo, Buenas noches- decía la caballero de Lira mientras cerraba la puerta.
-Bien, ¡Es hora de dormir!- decía Clare lanzándose a la que sería su cama.
-Si, al fin - decía Lilly mientras se acomodaba en su cama también y se quitaba la máscara- ¿No te molesta que me la quite , o si?-
-Es igual, no creo que te hayas enamorado de mí ¿o si?-decía Clare mientras reía.
-¡Por Supuesto que no¡ ¡Iugh! a mí me gustan los chicos lindos como Milo- decía mientras se acostaba.
-Lo sé lo sé, era una broma- decía Clare al momento que ella se quitaba la suya también-Buenas noches-
-Buenas noches- contestó LillyPero las horas de sueño de Clare habían sido pocas, ya que en sus sueños escuchaba lo que parecía ser la voz más dulce que habría escuchado jamás...
¿Cumpliste tu promesa eh?...me alegro mucho por ti...por el momento no puedo estar contigo...pero prepárate...tengo un presentimiento que algo está por suceder... ¡Mantente alerta caballero de la Corona Boreal!
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"Hasta las lágrimas pueden convertirse en un arma poderosa" (Saint Seiya)
Fanfiction"El Santuario será atacado de nuevo, y al parecer al primero en atacar es al Patriarca. El primero entre los 88 caballeros de Athena, lo que desencadenará la lucha de unos cuantos caballeros de bronce por descubrir la verdad del Santuario. Pero, ¿Qu...