El amanecer que se había asomado por el Santuario parecía ser uno de los más hermosos para los ojos verde azulados del caballero de Aries, y no solo por el gran espectáculo que estos presenciaban, sino por el hecho de estar de nuevo en su segundo hogar.
-Kiki, ¿Qué haces despierto tan temprano?, tu entrenamiento empieza dentro de unas horas- dijo el caballero de Aries mientras le dedicaba una sonrisa a su pequeño alumno.-Señor Mu, es que ya no puedo dormir más- dijo el pequeño.
-Hmmm está bien, entonces ve a comer algo, sino comes bien no podrás volverte un caballero fuerte para proteger a nuestra diosa y a las demás personas-
-¡Si!- y sin más, el pequeño se adentró en la casa de Aries.
Mientras que en el recinto de las caballeros femeninos, todas descansaban plácidamente en sus respectivos hogares, ese día no tendrían entrenamiento debido a lo duro que había sido el de el día anterior, a pesar de se caballeros de Athena también eran humanas cuyos cuerpos se cansaban y de vez en cuando necesitan reposo.
-¿Ya despertaste?- preguntó Lilly mientras se acomodaba en su almohada.
-No, sigo dormida- contestó Clare mientras tocaba la parte de atrás de su cráneo, la estaba matando el dolor.
-Que graciosa. Oye ¿Te sientes bien? ¿Te duele la cabeza?-
-Ah, sí. Créeme que caer de una montaña y aterrizar en el suelo no es la mejor sensación del mundo-
-Hablando de eso, ¿Qué te ocurrió? ¿Te desmayaste o algo así?-
-¿Hmm? Si si, quizá fue el cansancio- a decir verdad, aún no podía decirle lo que en verdad había pasado, la creerían loca.
-¿Has comido bien últimamente? Te veo muy flacucha- rió Lilly.
-¡Oye! Yo estoy normal-
-Cálmate era solo una broma. Oye ¿No quieres ir a desayunar a la sala de las caballeros femeninos?- preguntó Lilly mientras se levantaba de su cama.
-Eeh claro... Si tan solo pudiera levantarme-
-¿No puedes?
-No, me duele hasta el alma-
-Aguarda- dijo Lilly mientras se colocaba sus zapatos y su máscara- vuelvo en seguida-
-¡Espera! ¿A dónde...vas?- pero ya era tarde, la caballero de plata se había ido- espero que no sea otra de sus ideas absurdas- dijo Clare mientras acomodaba su almohada y se preparaba para volverse a dormir.
-¡Oye floja levántate de una buena vez!- gritó Nat entrando a la casa.
-Si pudiera lo haría- dijo Clare dándole la espalda.
-Pues para eso vinimos- dijo otra chica mientras entraba.
-¿Qué? Layla ¿tú también?- dijo sin voltear a verlas.
-Perdona pero tienes que comer- dijo Lilly entrando mientras reía.
-¡Oye oye! ¡Suéltame!- gritó Clare mientras se giraba para darles una de las miradas más molestas que ellas verían en sus vidas.
-Cállate y deja que te ayudemos, terca...Oye, jamás pensé que tu cara se vieran aún como la de una niña pequeña- dijo Nat mientras reía.
-¡Oye! ¡Claro que no!-
-¡Claro que si! Mira esas mejillas de niña pequeña- dijo mientras apretaba una de las mejillas de Clare.
-¡Eso duele!, ya dame mi máscara-
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"Hasta las lágrimas pueden convertirse en un arma poderosa" (Saint Seiya)
Fanfiction"El Santuario será atacado de nuevo, y al parecer al primero en atacar es al Patriarca. El primero entre los 88 caballeros de Athena, lo que desencadenará la lucha de unos cuantos caballeros de bronce por descubrir la verdad del Santuario. Pero, ¿Qu...