capitulo 5

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- ¿Qué es un neko? - pregunté, confundido. Ella me miró entusiasmada.
- Neko en japones significa gato. Pero también se utiliza para llamar a los "chicos-gato", como tú les dices. - me explicó.
- Gracias, diccionario andante. - me burlé - Así que eres un neko, pequeño. - dije, despeinándolo.
- No haga eso, amo Oliver. - se quejó el gato. July nos miraba con la mirada típica de una fan de Justin Bieber, esa que está llena de esperanza en que algún día él se fijará en ella por sobre todas las otras chicas... Qué extraño ejemplo.

(...)

Íbamos caminando por el parque. Kam estaba tomandome de la mano, mientras July iba apartada.
- No mordemos. - bromeé.
- Ya lo sé, tontín. Es solo que... Se ven tan lindos juntos. - dijo, tomándose las manos, con una gran sonrisa.
- Gracias, señorita July. - dijo Kam, con una media sonrisa.
- Dime sólo "July". Nada de formalidades conmigo. - aclaró mi amiga, a lo que él asintió.
- ¿Quieren ir por un helado? - pregunté, sabiendo cuál sería la respuesta de mi mejor amiga, ya que era una maníaca del helado.
- ¡Sí, sí, sí, sí! - gritó como niñita.
- Está bien. - dijo Kam, aunque no se le veía muy animado.
- ¿Qué sucede, bonito? - le pregunté preocupado.
- Yo... July tiene razón. - respondió, aunque yo no comprendía a qué se refería.
- ¿En qué? - intervino la mencionada.
- En que soy un niño, y el amo Oliver es un adulto... Y yo... ¡No conozco a nadie de mi edad! - se largó a llorar a moco tendido. Rápidamente lo abracé contra mi pecho e intenté calmarlo.
- Kam, ¿quieres tener amigos de tu edad? - asintió enérgicamente ante mi pregunta - Pues en ese caso, es hora de que vayas a la escuela. Creo que eso sería lo mejor, ya que no quiero dejarte solo mientras estoy en el trabajo. - dije alegre, y Kam me abrazó con todas sus fuerzas.
- ¡Gracias, gracias, gracias! ¡Prometo no volver a ser el activo nunca más si usted no lo desea, amo Oliver! ¡Gracias! - gritó el pequeño, a lo que varias personas se giraron ante el comentario del chico.
- ¡Habla de un vídeo juego, pervertidos! - les grité a los fisgones, los cuales rápidamente se dispersaron.
- O sea que... ¿El pequeño te la... A ti? - preguntó July confundida.
- Es algo vergonzoso. - dije a modo de respuesta.
- No puedo creerlo... Tú niño, - dijo dirigiéndose a Kam - eres todo un pervertido.
- Lo siento mucho. - dijo él, cabizbajo.
- Me caes muy bien, Kami. ¿Te gusta el yaoi? - hablaba ella mientras pasaba un brazo por los hombros del chico. Estaba furioso por alguna razón, mientras los veía tan pegados.
- En realidad, podría llamarme "fundashi", ya que soy un gran fanático del yaoi y el yuri. - nos sorprendió respondiendo Kam.
- ¿Cuál es tu manga favorito? - preguntó July.
- Kuroneko Kareshi No Amaekata. - contestó sin titubear. July y yo estábamos con la mandíbula a punto de quebrarse.
- ¿¡Hablas en serio!? - gritó mi amiga histérica. Kam asintió lentamente. July se acercó como si lo fuera a golpear, y de la nada lo abrazó.
- Me... Asfixia... Señorita... July... - logró decir Kam, a lo que ella lo soltó y le dio un golpe en la cabeza.

Qué bipolar...

- Te dije que nada de formalidades. - le reprochó. Luego lo tomó de la mano, e hizo que yo lo tomara de la otra, y nos dirigimos a la escuela mas cercana para inscribir a nuestro pequeño neko.

(...)

Ya han pasado 3 semanas desde que Kam comenzó las clases, y debo admitir que estoy algo adolorido, ya que le permití ser el seme y ser mi novio, así que lo hacemos todas las noches...
Últimamente está diferente, sigue siendo el gato tierno de siempre, pero ahora se comporta como un adolescente y no como un niño pequeño. Ahora sabe mas cosas del mundo y comprende más. También tiene una amiga, que en mi opinión es la versión pequeña de July, y usa nuevo vocabulario que ella le enseña. Está desarrollando una personalidad... Y aunque no tiene las mejores calificaciones, no le va mal. Lo único que espero es que la pase bien, ya que él no es muy... Normal.

Mi mascota (yaoi/gay)© Donde viven las historias. Descúbrelo ahora