Luna

...
"Nuestro amor
estuvo libre de
estereotipos y

de complejos. 
Él llegó
y me amó
así tal cual,
gorda y sensual...

Y yo lo amé porque amó todo lo

 imperfectamente perfecta que fui..."

—Luna 

Prólogo

De un tiempo para acá, me volví una mujer segura, sin complejos, capaz de sentirme bien conmigo misma sin necesidad de un hombre en mi vida. Estaba consciente de que mi físico era un tipo de belleza peculiar. Tengo grandes senos, enormes muslos, estrías y celulitis. Sin embargo, muchos se volteaban a mirarme. Eso me hacía sentir bien, aunque no lo necesitaba para creérmelo. Un día, llegó a mi vida un hombre... Un hombre prepotente, o eso creía. También era un tanto mujeriego, aunque él juraba que no era así... Le encantaban esas chicas altas y esbeltas. Pero él se fijó en mí, no sé si para mi buena suerte o qué. Lo que sí sé es que me volví inseguridad y temor. Me enamoré de él y él no quería nada sentimental conmigo, salvo pasearse por mis curvas. Yo creía que el problema era yo y mi sobrepeso, pero no fue así. Él simplemente no estaba listo para una relación... Un día todo cambió, pues él se enamoró de mí. Se enamoró de la chica gorda... Y me amó así tal cual. Yo creía que para él yo era perfectamente imperfecta, pero él me amó por ser imperfectamente perfecta.