Descendientes: Vida nueva en el palacio (TERMINADA)

¿Navidad al estilo Isla de los Perdidos?

No reproduzcan aún la música.

Narra Mal

El año pasado, festejamos una navidad normal como cualquier otra navidad. Ya saben... Velas, árbol, regalos, comida, música y convivencia; y así fueron las navidades los años anteriores, pero este año, todo será distinto.

En la Isla de los Perdidos, la navidad no era muy festejada por todo el odio a esas "cursis" fiestas. La comida era un poco de queso con gallinas ahumadas, pan de ciruela (muy duro por cierto), y en vez de bailar o convivir, rompiamos vajillas y vasos.

A mí mamá, le gustaba festejar navidad a su modo, por lo que creó una tradición que todos en la Isla conocen...

ARRUINA ESPÍRITUS

Al principio te preguntas qué es eso, bueno, es simple.

1. Busca a tu víctima.

2. Dile algo que lo alegre, por ejemplo: esa chaqueta te queda genial.

3. Dile algo dulce sobre la navidad

4. Ofrécele un bastón de caramelo

5. Si acepta, cuando estes apunto de dárselo, rompe el caramelo en dos, dile "pamplinas" y te vas.

Fácil ¿no?.

Narra Ben

Sí... le dije a Mal que no haríamos eso, pero ella quería una navidad distinta.

Preparábamos una fiesta navideña en el castillo. Estábamos en nuestra habitación, Mal leía un libro y yo tenía en mis manos la lista de cosas para la fiesta, era de noche y ya era hora de dormir.

- ¿Qué te parece si en vez de pavo ponemos un pollo almendrado?- le pregunté a Mal.

- Odio las almendras- respondió mientras leía.

- Oh... Una banda de rock navideña.

- Aunque lo parezca, no me gusta mucho el rock.

- Mmm al parecer no se que quieres.

Hasta que algo se me vino a la mente. Recordé algo que Mal me dijo el año pasado, algo que nunca hizo en la Isla de los Perdidos.

- ¿Y qué te parece... Una piñata?

- ¿Una piñata?- se le veía la cara de emocionada a Mal.

- Sí, ya sabes, con dulces y frutas.

- ¡Sí!

Después de eso, dormimos.

Al día siguiente, era 23 de diciembre.

Narra Mal

Había mucho movimiento en el castillo, todos para allá y todos para acá.

Llamé a Evie y a los chicos para decirles sobre la fiesta y dijeron que sí.

Estaba emocionada, y como siempre, Evie vino para ver lo de mi vestido.

- No necesitas hacer esto, preocúpate por tu vestuario- le dije a Evie mientras me medía.

- ¿De qué hablas? Las reinas siempre se deben ver perfectas, y yo sólo soy una maestra de química.

No me gustaba que Evie se hablará así, sé que ella aprendió que no importa como te ves de fuera sino por dentro, pero nunca pensé que cambiara tanto.

Por lo que le planearía una sorpresa.

Ya era 24, y era peor que ayer. Todos estaban tan ocupados, que ni siquiera podía pedir una taza de té, hasta que unos sirvientes llevaban fresas. ¡YUMI!

Ya era de noche, los invitados llegaban y yo estaba nerviosa. No sabía si el regalo de Evie llegaría a tiempo, estaba sudando; hasta que llegaron Carlos y Jay, y vieron la mesa de postres. Los detuve.

- Háganme un favor... ¡No devoren la comida!- se los dije susurrando.

Se fueron con cara de perros regañados.

El mayordomo tocó la campana y todos se sentaron en la larga mesa...

- Buenas noches a todos, y gracias por venir a nuestra cena de navidad- dijo Ben en voz alta.

Todos conversaban y charlaban, Jay y Carlos hacían un esfuerzo por no devorar la comida, Evie comía y yo esperaba su regalo.

Salí del castillo para ver si llegaba su regalo pero no había nadie, sin embargo, lo bueno era que desde la puerta se podían ver lo fuegos artificiales desde Auradon y recordé las palabras de mi mamá.

"Escucha Mal, la navidad es sólo una simple festividad inventada para sacarle dinero a los padres, pero al mismo tiempo, es una época divertida donde lo más importante es quitarles el espíritu navideño a los demás."

Cuando de repente, desde arriba algo caía, lo tomé y era una foto de Carlos, Jay, Evie, mamá y sus padres. Ví como todos sonreían en esos días en la Isla de los Perdidos, y supe que es la navidad realmente.

Bueno... ese momento de reflexión no duró mucho, el entrega paquetes llegó pero ese momento se convirtió en un momento de felicidad! Llegó el regalo de Evie y estaba muy felíz.

Después de la cena, todos fueron a admirar el hermoso árbol de Auradon y le dí el regalo a Evie, lo abrió y se quedó con la boca abierta.

- ¡No lo puedo creer!

Era un espejo grande, pero no era para reflejarse en el, sino que se mostraban fotos de todos nosotros.

- Es hermoso- dijo Evie mientras me abrazaba.

Luego Ben me preguntó si quería decir unas palabras.

- La navidad no es sólo los regalos, es la armonía entre la familia y amigos.

Y BLA BLA BLA...

Rompimos la piñata, y como sorpresa... Rompimos vajillas y vasos.

¡Felíz Navidad!

Yo: ¿les gustó? ¡Voten! Felíz Navidad y Próspero Año Nuevo. Les dejo algo de música para bailar.