Capítulo 9.

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No dejes que nuestros labios se separen.

Tus labios son lo único que necesito, no los alejes de mi. Nuestros besos son una promesa de amor. Nuestros labios encajan perfectamente; y es notorio cuanto se necesitan. No quiero olvidar el sabor de tus labios... No dejes que nuestros labios se separen.

Por supuesto, el timbre debía interrumpir nuestro dulce momento.

¿Pero quién ha dicho que no nos besamos?

Ignoramos el estúpido timbre, ella miró mis labios por última vez antes de besarlos. Sus labios eran suaves, se sentía bien sentirlos con los míos. ¿Qué pensará de los míos?

Luego de la falta de aire y la insistencia de la persona que estaba al otro lado de la puerta, nos separamos. Tenía la cara sonrojada, creyendo que había hecho algo mal.

Que no crea eso, porque sus besos me hacen bien.

Emily se levanta y por poco sale corriendo al abrir la puerta, todo por salir de la situación.

No sé si debí ofenderme por eso, pero aún estaba en shock de su beso.

Escuché la voz de un hombre muy conocida.

- ¡CASEY! ¡MI VIDA! ¿QUÉ TE HA PASADO? – Mi mejor amigo corrió desde la puerta hasta el sillón y me abrazó al verme con tantos moretones alrededor de la cara.

- Nada. – Le mentí a Esteban. Confiaba mucho en él, pero aún no le conté los problemas con mi padre.

Emily alzó la ceja en signo de pregunta pero no dijo nada.

- Pero si estás echa...mierda. – Esteban me soltó y buscaba algo en la bolsa que traía. Sacó varios pequeños vasos para shots y dos botellas de vodka.

- ¿Supones tú que vamos a tomar dos botellas de vodka? – Emily se sentó junto a nosotros mientras Esteban servía el vodka. Ella no era una gran bebedora.

Agarré cuatro shots que estaban en la mesa central, los tomé como agua.

- A este paso no tomaremos nada. –La frase iba dirigida a Emily; yo sólo reí.

Cada uno empezó a agarrar los shots, y luego de una botella entera de vodka empezamos con cervezas que Emily tenía guardadas en su refrigerador.

Luego de 2 cervezas que bebí, empecé a recordar todo. Mi madre, mi pequeño hermano que no pude conocer, a mi padre y sus amigos con sus intentos fallidos de violación. Queriendo olvidar, sólo pude recordar. Y más recuerdos tristes vinieron a mi mente.

Me levanté y fui al baño, no sin antes de avisar que iría allí. Cuando puse el seguro al baño, simplemente caí. Mis piernas se sintieron débiles, y simplemente caí.

Como mi mundo, de nuevo.

Quisiera un padre que no me golpee cuando está borracho, o por lo menos un padre que no sea un adicto al alcohol. Aunque yo lo era, también sabía controlarme.

Saqué un cigarrillo de mi caja que tenía en el bolsillo y empecé a fumar. De ese cigarrillo pasé a fumarme toda la caja, mientras lágrimas salían incontrolablemente. Llevaba casi una hora encerrada en ese baño, fumando, llorando y recordando.

Y ahora recuerdos de los pocos besos con Emily pasaban por mi cabeza. Ella jamás me querrá como yo la quiero. Y me parece increíblemente triste.

Tocaron la puerta del baño.

- Casey, sal. – La voz de Esteban borracho se escuchó al otro lado de la puerta. Sin embargo, no quería salir.

- Estoy cagando, no jodas.

- Me importa mierda. – Empezó a empujar la puerta, luego de unos minutos se dejó de oír como hacía esfuerzos de tratar de tirarla. No me moví del lugar que estaba, seguía fumando.

Era la única sobria entre este pequeño grupo de amigos un jueves en la tarde. Aunque no he escuchado a Emily... tal vez no esté borracha.

Quité el seguro del baño y abrí la puerta, para ver una escena de Esteban apenas en bóxers dormido en el suelo.

Pasé por encima de él y fui a la sala, donde en la mesa central seguía la botella de vodka intacta y más o menos 6 cervezas vacías. Y en el sillón, estaba ella. Sentada mirando a la nada, tomando de una lata de cerveza inconscientemente.

Me senté a su lado, y la abracé. Ella se sorprendió con mi abrazo, hasta yo lo hice, pero me rodeó con sus brazos y me dio un abrazo muy fuerte, que hacía que dolieran los moretones pero sus brazos me hacían sentir muy bien.

Si estoy con ella, no necesito a nadie más.


Cosas terribles. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora