--Tu querías hablar-- dijo Louis tratando de lucir frío y arrogante frente al rizado. Harry suspiró y le hizo señas a una vieja silla de madera que se encontraba detrás de él.
--Siéntate por favor-- por su parte, él busco una caja dura que aguante su peso y se sentó luego que el otro lo hiciera. Su príncipe no dijo nada, esperó a que el otro hablara pero sólo Harry volvía a adorar aquel rostro tan perfecto para él, esos ojos tan hermosos que parecían brillar más que un sol, su semblante, aunque esté serio siempre le recordaría la vez que lo regañó por haberlo esperado afuera de su casa esa vez que el rizado se enojó con él y luego fue para que lo perdonara. Su Lou... lo había echado de menos.
--¿Puedes apurarte? Estoy ocupado-- no quería discutir, pero el tono tan soberbio le molestaba un poco. Respiró hondo y comenzó a jugar con sus manos, nervioso.
--¿Cómo has estado?-- quiso saber. Le picaba la curiosidad de repente. ¿Cómo había estado durante esos largos cinco años sin él? ¿Pudo seguir tranquilamente o él también pasó llorando por la pérdida de su amor? Quería saberlo todo. Si estuvo con alguien después de él (rogaba que no), aunque le parecía hipócrita pensar eso. ¿Cómo está su padre? El señor Tom, la última vez que lo vio estaba en el suelo luchando por su vida. ¿Cómo estaría Ed, Liam, Niall? Llegó a tomarles cariño a cada uno, por su culpa lo habían atrapado a ellos también y lo habían lastimado. Jamás se perdonaría por ello. ¿Qué pasó con Zayn?
¿Después que se pasó al otro bando, seguiría siendo su amigo?
Louis pensó que estaba loco. ¿Era cierto lo que había oído? Él no fue a tomar el té y hablar como si fuesen amigos que no se habían visto hace cinco años. No, el fue para cerrar cuentas, etapas, quería acabar con todo lo que lo estaba preocupando. Con su ex novio que una vez llegó a amar, aquel niño precioso que creía inocente y luego se fue con el que lo había maltratado. Según las palabras del menor aquella vez.
--Sólo dime lo que quieras decirme y listo Harry-- dolió escuchar de esos labios que alguna vez besaron los suyos con toda delicadeza, decir su nombre con disgusto-- Terminemos esto de una vez por todas-- Harry asintió sintiendo su pecho encogerse por la amarga actitud de Louis.
--Bien, yo sólo quería saber... quería saber sobre los muchachos y tu padre--
--¿Mi padre y los chicos? ¿Los que tu involucraste aquella vez?-- cerró sus ojos con fuerza. Bien, si alguna vez pensó que no todo era su culpa, ahora se sentía culpable de todo. Agachó la mirada comenzando a respirar aceleradamente.
--Nunca quise...--
--Si, si. Tu nunca quisiste-- interrumpió nuevamente y ahora se burlaba de él-- Nunca quisiste ocultarme sobre tu pasado. Nunca quisiste fingir de que eras un niño bueno y terminaste perteneciendo a toda esa mierda. Tu nunca quisiste acostarte con tu hermano-- levantó la vista enseguida a escuchar lo último. No podía ser, ese no era su príncipe, no era su Lou, el que lo llevaba a caballito hasta el lago y corrían de un lado a otro hasta terminar con deliciosos besos. No era su príncipe el que le contaba cuentos de terror y cuando él se ponía a llorar, le pedía perdón y le hacía olvidar todo con pequeñas caricias.
--No sabes de que hablas Louis-- sus ojos habían empezado a tirar lágrimas heridas, lo miraba triste, abatido por lo que tanto había esperado se hizo realidad pero como una pesadilla. Louis se arrepintió en el momento pero no dijo nada, lo evitó.
--Mira, solo vine escucharte. Quiero eso, escuchar todo. Después me iré y no me verás más-- lo miró como si lo que le acababa de decir le diera justo en el pecho, una punzada.
--¿Qué quieres oír entonces?-- se sentó derecho intentando no intimidarse por el mayor. Aunque ahora los roles habían cambiado, y era Harry mucho mas alto que él, seguía sintiéndose desprotegido.