—No— Harry frunció los labios formando un puchero en ellos, metiéndose en la cabeza que todo lo que su príncipe dijo no es verdad. Cerró los ojos con fuerza soltando lágrimas de estos logrando no tener otro ataque de llanto. Movía la cabeza de un lado a otro y con sus manos apretaba fuerte las sábanas que cubrían su piel desnuda y las que habían sentido también la piel sudorosa de Louis— Mientes...—
—Lo lamen...—
—¡Cállate! ¡Me estás mintiendo tu me amas Lou!— escupió mirándolo a los ojos. Louis en ese momento quiso correr para abrazarlo y calmarlo pero no podía, ya no era como antes, sólo le quedó estar en su lugar, parado y con el corazón aún más roto— Dijiste que por siempre me amarías, me lo juraste, lo prometiste. Dijiste que era el único en tu vida, no puedes decirme eso ahora Príncipe ¡No puedes decirme eso ahora!—
—Han pasado cinco años Harry. Las cosas han cambiado— quiso recordarle el castaño sonando como excusa.
—¿De que estás hablando?—
—Mierda Ena... Harry— se corrigió al instante y siguió hablando normalmente como si no notara el encogimiento de cara que tuvo el rizado al escuchar ese sobrenombre que tanto le gustaba— ¿No recuerdas lo que pasó la última vez que nos vimos?—
—Claro que lo recuerdo Lou. Ese día Nick abusó de mi y quería mandar a matar a ti, al señor Tomlinson y los chicos. ¿Cómo olvidar ese jodido día? Tuve que improvisar cada segundo para que no les hiciera daño— eso era nuevo, pensó el castaño. Quedó de piedra al escuchar las primeras palabras de Harry. "Otra vez fue abusado". Apretó los puños con una ira repentina como si estuviese viendo ese momento hace cinco años atrás. Harry escupió cada palabra con angustia y tristeza, quería dejarle en claro todo a su chico, no quería perderlo de nuevo.
—¿Tu... otra vez?—
—Si. Me tuvo en una habitación diferente y me violó como pudo. Pero mientras lo hacía yo solo pensaba en ti. Rezaba para que no te hicieran daño, que estuvieras bien. Y si se trata de ti haría lo que fuera, lo que sea—
—¿Entonces por qué te fuiste?— el rizado rodó los ojos irritándose por ganarse la desconfianza de Louis.
—Lou, yo lo inventé todo. Le dije a Nick que lo prefería a él antes que a ti. ¿Qué querías que le dijera? "Oh Nick, ¿sabes? amo a mi novio y no me importa si lo matas a él, a su padre o amigos"— el castaño levantó una ceja incrédulo y sorprendido a la vez al escuchar ese tono de voz en él— No quería que te hicieran nada Príncipe ¿Entiendes?, me prometí hacer cualquier cosa con tal de protegerte. ¿Tu no habrías hecho lo mismo por mi?— esa pregunta lo toó desprevenido. ¿Si lo hubiese hecho? Claro que si, pero el saber que nunca más su enano había vuelto lo hacía trizas.
—¿Por qué no visite por mi?— preguntó con la voz rota, aguantando las ganas de llorar nuevamente.
—¿Por qué no viniste tu por mi?— ladeó los labios en una fría sonrisa que borró al instante. Bajó la cabeza y siguió hablando— Estaba atrapado. Cuando Nick... tuvo su accidente estaba perdido. No sabía donde estaba hasta que me di cuenta que estuve por meses en Los Ángeles. No sabía como volver y bueno... después supe todo lo que pasó allí. Lo primero que hice fue buscar a nana, pero cuando supe la verdad... te busqué a ti Lou. Pero no te encontré— nuevamente vagas lágrimas se asomaron por sus ojos que con su brazo borró enseguida— Cuando te vi, luego de cinco años, no lo podía creer. ¡Mi Príncipe estaba allí!— dijo con voz alegre soltando una risa nostálgica—pero no todo salió como quería— Louis miró al costado apretando los labios para no soltar ningún sollozo— ¿Sabes que fue lo primero que pensé a penas te vi?— al no escuchar ninguna respuesta siguió— Pensé... "Está todo un gran hombre hermoso y fuerte. Mi príncipe vino a buscarme"... eso fue lo que pensé— abrió uno de los cajones de su mesita junto a su cama y de allí sacó un nuevo boxer negro que se puso antes de levantarse y ponerse frente a Louis. Tomó sus manos y buscó con la mirada los ojos azules que tanto le gustan— Dime que es mentira, por favor...— dijo refiriéndose a aquellas hirientes palabras que el castaño mencionó minutos atrás— Lou...—