Martha my dear ♥ | The Beatles fanfic

Capítulo 9: Elizabeth

(narradora Martha)

Quise estar más tiempo en sus brazos pero la lluvia poco a poco aumentaba. Ambos sin decirnos mucho corrimos a casa. Estabamos empapados y yo empecé a sentir mucho frío. En la puerta dos personas con sus respectivas paraguas aguardaban.

Ya sabia quienes eran: fans. No era la primera vez, muchas se tomaban la molestia de esperarnos en la puerta y algunas veces en dejarnos obsequios o algo de comer. A Paul le daban bombones o jelly babies, a mi me daban galletas. Mientras nos acercabamos olores muy exquisitos provenian de sus objetos. Tuve que soportar las ganas de abalanzarme sobre ellas.

—¡Ho-hola Paul! —saludaron ambas chicas

—Hola chicas

—¿Paul, nos dejas un autógrafo?

Paul miró hacia el cielo debido a que la lluvia continuaba y no tenia pinta de que se apaciguaría.

—Claro —respondió con mucha ternura

Las chicas se miraron entre ella sonrientes y sacaron dos paraguas extras, para cubrir a Paul. Él puso su mano tras mi espalda y me puso a su lado.

—¡ey! —una de ellas me miro asombrada

—¿Jane?

—Amm no, dulzuras. Ella es mi amiga...

—Elizabeth —sonreí a las chicas.

Ambas me miraron alegres y asintieron.

—Hola, Elizabeth. 

¿Qué de donde saqué el nombre? Pues de una actriz de cine. En esos instantes no se me ocurrieron otros nombres convincentes. Sentía que decir que me llamaba Martha podría ser muy extraño para las fans y sobretodo, doloroso para mi dueño Paul. Mi nombre es hermoso pero pertenece más a mi yo del pasado. Ahora trataré de que me llamen Elizabeth y me presentaré como una amistad de mi dueñ- diré de Paul. 

Paul como todo un caballero las hizo pasar a la residencia y firmó sus libretas. Se podía ver la emoción de las chicas, entre ellas se miraban y admiraban el patio de Paul. Luego de eso pidieron como ultimo favor tomarse algunas fotos. Yo fui la fotógrafa, gracias a las indicaciones de la dueña de la cámara pude usarla bien. Pensé que con eso había terminado las tomas pero me pidieron tomarme una foto con ellas.

—No creo que sea necesario —les dije

—Eres amiga de Paul, ¡por favor! —acepté, me paré junto a ellas y Paul tomó las fotos.

—Una pregunta, y ¿Martha?

—Ahh —Paul bajo la mirada— ella ..no está.

—¡¿Se perdió?! —exclamaron ambas

—Ohh, habíamos traído galletas ...Te ayudaremos a buscarla, sabemos organizarnos muy bien.

—Gracias, chicas —respondió Paul aún con su mirada gacha 

Las chicas sintieron que era hora de irse, pasar algunos minutos con su ídolo había sido una gran experiencia para ellas. Me despedí de ellas y me dejaron una cesta con una mantita que la cubría. Paul les dio un beso en la mejilla a cada una y todas sonrojadas salieron de la casa.

—Así que Elizabeth

—Amm... es mi segundo nombre —sonreí 

—Me gusta, ahora se algo más de ti —sonreía picaramente— te llamare Elisa o Eli.

—Ambos suenan bien —dije emocionada.

—Perfecto, Eli. ¿Qué será? —señalaba la canasta.

—Pollo rebozado y papas fritas —dije sin dudar.

Paul me miró incrédulo y apresuró la caminata hacia la casa. Colocó la canasta en la primera mesa que encontró y empezó a abrirla. Noté como la canasta tenía varias capas de manteles y Paul por cada capa acercaba su nariz para percibir el olor de la comida que había mencionado. Hasta que por fin quito la última tapa y pudo ver.

—¿Tengo razón?

—Sip, adivinaste. Realmente estaba bien cubierto porque yo no sentía olor.

—Tengo..amm.. un olfato agudo.

—Eso es bueno —rió— tal vez por eso te llamas Martha.

Había entendido lo que me dijo pero no supe que decir.

—Pésimo chiste, perdón... que estúpido — murmuró— Iré por platos.

-jajajaja está bien.

Tomé la canasta y fui al comedor. Al sentarnos vi que Paul tranquilamente comía, pero yo luchaba con el cubierto para poder comer; lo tomaba de una forma extraña y por todas las maniobras que hacia, se cayó una papa al piso. Mágicamente tras el suicidio de la papa..diré de su accidentada caída, pude tomar bien el cubierto y comer sin problemas...

—Pronto serás una experta, poco a poco.

Gracias, dije mentalmente a la vocecilla .